tag:blogger.com,1999:blog-6172100325203689262024-03-14T00:24:51.469-07:00Haradim II-El regreso de los héroes-Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.comBlogger12125tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-9878698002246900532009-03-30T19:48:00.000-07:002009-03-30T19:53:06.378-07:00Fecha 9: 22/03/09<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_N5G31kw9pStPn0er9kIC6JHVoOQFATYhC75dKqxHKM6HgiXyqK1rAMSPwZf4LqH1x8SRB-_dndsTwywF3ZEXK3L9FWAY77R7DujPipvo-urGsvRXOibdHb-dlepZcucTk3kgKrW1K6xh/s1600-h/Pasado+feliz.jpg"><img style="margin: 0px auto 10px; display: block; text-align: center; cursor: pointer; width: 313px; height: 400px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_N5G31kw9pStPn0er9kIC6JHVoOQFATYhC75dKqxHKM6HgiXyqK1rAMSPwZf4LqH1x8SRB-_dndsTwywF3ZEXK3L9FWAY77R7DujPipvo-urGsvRXOibdHb-dlepZcucTk3kgKrW1K6xh/s400/Pasado+feliz.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5319178940611912242" border="0" /></a><br /><br />En un momento de la noche Iskander me llamó y me dijo:<br />-Quiero que te asegures de que Aiko llegue a Hattori después de todo esto…<br />-¿Por qué me pedís eso? No vas a morir…- era más un deseo que una creencia.<br />-Cuando todo termine voy a destruir tu espada.<br />-No es mi espada, pueden destruirla por mí. Me hablás como si no fueras a volver- pero yo sabía que era muy probable que ninguno de nosotros volviera.<br />No me dijo nada, pero supe que él planeaba sacrificarse en caso de ser necesario. Lo miré a Goran, estaba segura de que él iba a hacer lo mismo.<br />La noche terminó y fuimos a descansar, algunos más que otros, obviamente no iba a desperdiciar mi última noche con él.<br />A la mañana temprano escuchamos el sonido del avance enemigo, nos calzamos las armaduras y salimos a un día sin sol.<br />-¡No habrá amanecer para la humanidad!<br />Vi que Iskander se subía a un dragón rojo, seguramente era Jaria, que con su aliento de fuego roció a los no muertos que se retorcían a su paso. Zug se apresuró a volar los puentes que llegaban a la ciudad, pero los no muertos tendieron puentes de carne, eran del mismo Jurgenot. Zug acomodó los cañones hacia los nuevos puentes pero no alcanzaban, eran demasiados.<br />-¡Milo! ¿Donde mierda estás?- Escuché gritar a Burgen que cubría uno de los puentes cerca mío. Entre Iskander, él y yo cubrimos los pasos que habían formado los puentes hasta que Milo estuvo en posición, pero la marea negra nos superaba y tuvimos que replegarnos hacia el castillo.<br />-¡Tenemos que hacerlo ahora! Nike llevanos al Jurgenot- me dijo Iskander.<br />-Lo siento, yo nunca estuve dentro del Jurgenot, no sabría como llegar allí- dije y le tendí la espada a Burgen, pero Goran me interceptó y se la entregué a él.<br />-Posiblemente Vecna tenga un campo antimagia- dijo Goran.<br />-Menos cháchara y más acción- le dijo Iskander.<br />Goran abrió una grieta en el espacio con la espada, del otro lado vimos el interior del Jurgenot, estaba lleno de criaturas horribles. Iskander y Burgen pasaron primero cargando, los demás los fuimos siguiendo. Mi tío y yo, Lile, Trenton y Zug, por último pasó Goran que guardó la espada y se preparó para combatir a los primeros no muertos que nos habían visto.<br />El primer combate no nos llevó mucho tiempo y no presentó mayores inconvenientes en esta etapa, pero eran demasiados. Iskander intentó cubrir la entrada con un pedazo del Jurgenot, pero seguían viniendo igual. Cubrimos a Lile entre todos mientras ella trataba de identificar la mayor fuente de poder. Lile señaló hacia arriba y yo grité:<br />-¡Está arriba!<br />Jazir convocó un murciélago de sombras y nos llevó a Lile y a mí. Goran desplegó sus alas y se llevó a Trenton con él, mientras Iskander en su forma dracónica llevaba a Zug y levantaba a Burgen con telekinesis. Ahora el problema iba a ser “el techo”. Iskander quiso cargar con su lanza, pero el caballo lo hizo entrar en razón.<br />-¿Y si vamos por una bahía lateral? Digo… para no morir.<br />Iskander bajó a Burgen cerca de una de las bahías laterales y fue hacia la otra. Tuvimos que decidir, el camino donde estaba Burgen fue el elegido, decidimos seguir todos juntos por ahí, no convenía dividirnos. Empezamos a subir y el pasillo se fue haciendo cada vez más estrecho. El lugar se parecía demasiado a Nuredum. Llegamos hasta el final del pasillo y vimos una escalera caracol subir hacia donde Lile había sentido a Vecna. No había forma de pasar con las monturas así que Goran usó la espada para abrir una grieta y enviarlas hacia Imerion. En ese pequeño resquicio pudimos ver como Emme trataba de detener a los no muertos y Jaria controlaba el clima a su favor. Muchos soldados yacían muertos en la ciudad.<br />-Tenemos que apurarnos- dijo Iskander al ver ese cuadro.<br />-Sino vuelvo Anya es tu jinete- le dijo Burgen a su amigo Témpano y se despidió de él. La grieta se cerró y lo vi a Trenton con la expresión de quien pierde su última oportunidad, pero se quedó con nosotros a pesar de todo.<br />Seguimos camino por la escalera y llegamos a un pasillo con rejas de metal, en las paredes vimos unas especies de crisálidas, llenas de un líquido verde, dentro había personas (o lo que quedaba de ellas).<br />-Esto no será el alimento del Jurgenot- dijo Burgen- ¿No podemos sacarlos?<br />Iskander rompió una de las crisálidas pero vio como el líquido se volvió sólido al contacto con el aire y dejó atrapado en su interior al pobre individuo.<br />-Creo que no podemos hacer nada…- dijo.<br />Escuchamos gritos a lo lejos, era escalofriante ese lugar. Parecía que el sonido provenía de unas celdas cerca de allí.<br />-Eso fue lo que te pasó a vos- le dijo Goran a Burgen. No suite a lo que se refería y no quise saberlo.<br />-¿Por dónde?- le preguntó Iskander a Trenton, y él señaló el camino. Todos vieron gente conocida en las crisálidas y en las celdas, el ánimo de todos comenzaba a flaquear pero Iskander nos dio ánimo.<br />-Continuemos, no es el momento para que nos asustemos.<br />Caminamos bastante más, siempre subiendo, hasta que llegamos a una sala con un enorme cristal verde. Iba desde arriba hacia donde estábamos nosotros y bajaba por el centro de un gran agujero hacia abajo. Creímos que esa era la fuente de energía del Jurgenot y probamos todas nuestras armas, incluso la espada de los planos, pero era inútil, no le hacíamos nada, solo algunos rasguños. En un momento se abrió una vaina y Goran gritó que nos agarráramos de algún lado, así lo hice, en ese momento un horrible rayo negro salió disparado y a lo lejos vimos como caía una de las torres de Imerion.<br />-Hay que romper eso- dijo Burgen viendo lo que podía hacer.<br />Vi que mi tío entraba al mundo de las sombras y se metía adentro del cristal, no sabía lo que intentaba hacer pero al poco tiempo unas gritas aparecieron en el cristal. Burgen le dijo a Zug que intentara usar el martillo en el momento en que la vaina se abriera y él así lo hizo. Cuando el rayo negro se preparó para disparar mi tío ya estaba afuera y vio como el cristal comenzó una implosión gracias al martillo de Zug que le había cortado el escape. Todo comenzó a temblar y vi que Trenton cayó por una baranda, por suerte mi tío logró agarrarlo antes de que fuera demasiado tarde. El Jurgenot cayó, ahora estábamos en su cuello y nos apresuramos a seguir subiendo.<br />Llegamos a una explanada y vimos unas enormes columnas, tenían esculpidas figuras de elfos y hombres, y las figuras comenzaron a moverse y a desprenderse de la piedra.<br />-¿Quién osa despertar al jurado eterno?<br />-Venimos por Vecna- dijo Iskander.<br />-Venimos a detenerla antes de que arrase nuestro imperio- dijo Burgen- ¿ustedes están de acuerdo?<br />-Nosotros somos la muerte.<br />Y estos enemigos no eran como los que habíamos combatido hasta entonces. Fui contra uno de ellos y recibí grave daño, en el fragor de la lucha sentí que una enorme energía salía de mi mano, no entendí que era pero supe que si lo aplicaba al golpe podría destruir casi cualquier cosa. La figura contra la que combatía cayó destruida cuando mi cimitarra imbuida con ese poder la tocó. Me quedé mirándome la mano, jamás había sentido ese poder.<br />Goran agarró del cuello a otro de ellos y el anciano pareció resucitar. Vi como lo estranguló con su brazo sin piedad, al igual que Burgen cuando destruyó a otro con su gran espada. Iskander cargaba una y otra vez con su lanza y Jazir usó por primera vez la espada que le diera Sviden, parecía que los dragones de la hoja volaban a su alrededor cuando él la blandía. Pero lo más impresionante fue ver a Zug revolear su martillo por el aire y estrellar contra la pared al que ostentaba la corona. Todos sabíamos que ese era el espectro más poderoso, y él lo derrotó con un solo golpe de su martillo.<br />Solo quedaban dos y Goran le dijo a uno de ellos.<br />-Sería bueno que nos digas donde tenemos que ir…<br />-Eh… sí… por acá- dijo la figura. Al ver derrotado a su líder la otra volvió a su puesto en la columna y ésta nos llevó hacia Vecna.<br />Seguimos un poco más solo para llegar a otro cuarto con más enemigos, y uno de ellos tenía la fullblade que había sido de Burgen. No quería combatir con él si portaba esa espada, realmente creo que ese fue el único momento en el que realmente me asusté. Los enemigos eran enormes y estaban totalmente cubiertos por sus armaduras. Y no sé qué fue lo que ocurrió pero quedé ciega y sorda por un instante. Cuando volví a ver Burgen le cortaba la cabeza a su enemigo y recuperaba su espada una vez más. La colgó a su espalda y continuamos camino. Goran me agarró de la muñeca y me dijo:<br />-La próxima vez que te pongas en peligro te mato yo.<br />-Pero… estábamos rodeados, tenía que combatir.<br />Goran parecía nervioso, lo seguí sin decirle nada más.<br /><br />Subimos la última escalera. Al final de un pasillo, sentada sobre un trono nos esperaba una mujer morocha, tenía un ojo verde, del otro lado la cuenca vacía, y le faltaba una mano. La custodiaban dos hombres ancianos, decrépitos, como los que habían salido de las columnas. Detrás un monstruo gigante con una armadura llena de pinchos de los que colgaba carne seca y putrefacta. A su derecha un hombre rubio, muy blanco, y a un flanco cinco caballeros como el que había quitado a Burgen su fullblade.<br />-Llegaron hasta acá solo para morirse… ¿no podrían haberlo hecho abajo?<br />Si había estado asustada hasta ese momento lo que sentí entonces no sé que era, estaba aterrada, pero me tragué ese miedo, ahora era el momento de la definición, o moríamos nosotros o moría ella. Y me gustaba más el “moría ella”.<br />Iskander, Burgen y Goran se plantaron para defendernos, Trenton estaba al lado del Lile custodiándola. Zug esperaba la ocasión para arrojar su martillo. Jazir y yo estábamos listos para flanquearlos. Primero había que derrotar a esos cinco. Pero Vecna no iba a hacernos las cosas tan fáciles y nos arrojó un hechizo en el que tanto Trenton como yo quedamos paralizados. Los demás poco a poco fueron derrotándolos. Vecna en un mal movimiento de Burgen se quedó con su espada de lava y él volvió a usar la fullblade, todos escuchamos el sonido cuando la activó y dobló su tamaño, había ido a socorrer a Jazir que ahora se batía con el hombre rubio.<br />Goran había quedado rodeado por dos y cayó de rodillas al suelo ante los golpes de ambos, lo vi caer pero no pude hacer nada por defenderlo. Zug le arrojó su martillo a uno de los atacantes y fueron contra él. Lile que se había quedado sin poder decidió utilizar su propia vida para ayudarnos. Un círculo mágico se dibujó bajo ella y dijo:<br />-Nos vemos.<br />En ese momento cayó al suelo muerta mientras todos los efectos que nos habían logrado alcanzar se desvanecían y nuestras múltiples heridas sanaban.<br />-Ahora sí me hiciste enojar- le dijo Iskander.<br />Vecna que vio como todos sus ayudantes desaparecían uno a uno, y luego de que Iskander arrollara de un solo golpe al monstruo con la armadura de pinchos, nos arrojó un poderoso rayo de energía necrótica. Corrí hacia Goran e intenté cubrirlo con mi cuerpo aunque sabía que no iba a servir.<br />El poderoso rayo de Vecna había logrado alcanzar a Zug de lleno y Goran sin siquiera mirarme y sin decirme nada se acercó a él y le dijo:<br />-Te entrego mi vida- y Zug volvió a nosotros. Su primera acción fue arrojar el martillo hacia Vecna pero vio como este rebotaba en una barrera invisible y volvía hacia él. Vecna y su ayudante rubio, el último que quedaba y cuya piel blanca resplandecía con la luz, eran inalcanzables mientras no pudiéramos romperla.<br />Solo quedaba una opción, me introduje al mundo de las sombras y como supuse crucé la barrera. Me planté frente al hombre que la protegía creyendo que él era el responsable de la barrera, pero hubo algo que me llamó la atención debajo del trono. Recordé que Lile había dicho antes de morir que allí se encontraba la mayor fuente de poder. Sin pensarlo siquiera me arrojé debajo del trono y vi una máscara. La tomé en mis manos y la alejé de ellos, en ese momento la barrera se deshizo.<br />“Poneme” escuché que me decía una voz…<br />“Nunca” pensé. Tomé mi cimitarra y la clavé en la máscara atravesando también mi propia mano con ella, no podía arriesgarme a soltarla ni por un segundo.<br />La máscara cayó destruida y vi como la sangre bañaba la palma de mi mano.<br />Iskander y Goran cargaron contra Vecna. Goran abrió una grieta con la espada de los planos mientras Iskander la atravesó con su lanza y se la llevó con él. Antes de que se cerrara el portal arrojó hacia fuera su lanza, solo un arma con un espíritu elemental podía destruir la espada de los planos, no podía llevársela. Pero cuando creyó que jamás iba a volver a su plano original sintió que alguien lo empujaba contra la grieta y se quedaba en su lugar. Goran lo había salvado, sacrificándose él mismo. La espada ya no estaba en este plano, y supe que ya no lo volvería a estar, ni la espada, ni Goran y mi alma que se había ido con él.<br /><br />El Jurgenot comenzó a convertirse en cenizas y mientras caíamos sin remedio al suelo, las águilas de Shezabé nos elevaron por los aires y nos llevaron hasta Imerion. Desde el cielo vimos el desastre que habían causado los no muertos, ahora desintegrándose en polvo.<br />-¡Tienen que ayudarlos!<br />-¿Pero cómo? Ya no tenemos magia…<br />-Como sea…<br />Pasaron los días y unos antes que otros nos fuimos recuperando. Burgen ahora capitán de la orden de caballeros de un reino sin nombre intentaba organizarlos como podía. A su lado estaban Milo, su primer ministro de guerra y Anya, la segunda al mando. Aiko estuvo todo el tiempo al lado de Iskander, no se movió del lado de su cama todos los días que el estuvo recuperándose.<br />El luto por la muerte de Lile duró siete días, sus exequias fueron con todo el honor que merecía y sus amigos estuvimos allí para darle nuestro último adiós, algunos llorando, otros en silencio, otros cabizbajos, a partir de ese día St. Cuthberth desapareció para convertirse en St. Lile.<br />Zug tomó el puesto como warlord, sé que nadie lo hubiera podido desempeñar mejor que él.<br />Mi madre y mi tía desaparecieron, ninguna de ellas se despidió de mí. Le habían dicho a Jazir que ellas debían “desaparecer de la historia” (Y de mi vida. Está bien, después de todo, ni mi madre ni mi tía habían estado jamás en mi vida. Aún así les agradecí el haber estado conmigo ese poco tiempo).<br />Trenton volvió a Rittardast, solo uno de cada diez en su reino habían sobrevivido la guerra. Amelia había muerto y ahora él los dirigiría.<br />La noticia que más me alegró fue la de Selene, estaba embarazada, y verla tan feliz al lado de mi tío era un consuelo para mí.<br />Sé que sin esas grandes o pequeñas cosas yo me hubiera matado. Sino hubieran estado allí Iskander, Selene, mi tío, Burgen, Zug, Trenton, Mael, no hubiera dudado en quitarme la vida.<br />Pasaron tres meses desde el día en que el cielo se oscureció y en ese tiempo no hablé, escuchaba lo que me decían pero no contestaba o no emitía opinión. Fui a ver a Iskander varias veces, una de ellas me dijo:<br />-Fue un idiota, no tenía por qué hacer eso…<br />Yo rondaba por todos lados, veía lo que hacían Burgen y Zug, tomaba alguna copa con Selene, recorría la ciudad, sin saber a donde ir, pero sin querer frenar, sentía que si en algún momento me detenía no iba a poder seguir adelante.<br />Mi tío y Selene me obligaron a volver a Firehorn. Todos comenzaron a llamarme “Lady Nike” y supuestamente me obedecían, pero yo no decía nada, solo era una figura y mi tío era el que decía lo que se tenía que hacer.<br />Firehorn había vuelto a ser un lugar gris, llovía ceniza y el volcán estaba aún activo, aquellos que no podían soportar los vapores se cubrían con máscaras o llevaban capuchas. Era una ciudad de espectros, un buen lugar para mí.<br />Entré a una taberna, recordé los días que había estado esperándolo allí, hacía más de quince años. Había llorado, sí, pero nunca enfrente de los demás. Me sirvieron un trago, yo no tenía expresión en mi rostro, estaba viviendo a medias. Creo que ahora me parecía mucho a un no muerto.<br />Un hombre encapuchado entró a la taberna y me preguntó.<br />-Disculpe ¿puedo acompañarla?<br />Levanté los hombros, una señal que ahora usaba muy a menudo y que significaba que todo me daba igual. Selene la odiaba.<br />Se sentó al lado mío y vi como apoyó su brazo de metal en la barra.<br />-Un vaso de vino por favor…<br /><br /><br />FIN<br /><br />PD: por ahora… ^^<br />PD 2: Me pregunto qué hubiera pasado si no me hubieran salido dos 20 en las dos tiradas de voluntad que tuve que hacer cuando sujetaba la máscara de Máscara de los Inviernos...Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-27494374536335242452009-03-22T09:48:00.001-07:002009-03-22T09:51:17.389-07:00Fecha 8: 15/03/09<div style="text-align: center;"><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVhiFuZ12j4W-4OK3E_1S9gxsQalrNemMogpCrEL87AEySoL9WWi2jO0A_HdJLQ58vxw2jwGwx0CcTevDAfebMZaa9ZDFE5h7S2eHmnmO8mtfYbH5RouLDNEhZd1DLMpkjnI4fUZrtINVF/s1600-h/Jaraven.jpg"><img style="margin: 0px auto 10px; display: block; text-align: center; cursor: pointer; width: 325px; height: 400px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVhiFuZ12j4W-4OK3E_1S9gxsQalrNemMogpCrEL87AEySoL9WWi2jO0A_HdJLQ58vxw2jwGwx0CcTevDAfebMZaa9ZDFE5h7S2eHmnmO8mtfYbH5RouLDNEhZd1DLMpkjnI4fUZrtINVF/s400/Jaraven.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5316055261271911202" border="0" /></a><span style="font-weight: bold;">Javaren</span></div><span id="postmessage_6952"><div style="text-align: right;"><span style="font-style: italic;"><br /><br /><span style="font-weight: bold;">Extracto del diario de Nike Baenre. </span><br /><span style="font-weight: bold;">Un día antes de la Batalla de Imerion.</span><br /><span style="font-weight: bold;">Año 62 DBN.</span></span></div><br /><br />Salimos de Josper camino a Imerion. Era la primera vez que iba a esa ciudad, jamás había tenido la posibilidad de ver “la ciudad de los reyes”. Hicimos un alto en el bosque y fui a hablar con Selene, creo que aún no me animaba a conversar con mi madre, aunque en ese momento fuera inconsciente.<br />-Selene ¿estás bien?<br />-Sí.<br />No me lo creía, le toqué el hombre, ya no estaba helado, era otra vez la calidez de mi amiga. Casi no podía creer que estuviera otra vez allí conmigo. Selene me señaló hacia Nuredum, el cielo sobre las montañas estaba cubierto de nubes negras.<br />-Es lo que vio Lile, va a salir el Jurgenot.<br />-Puede que ya haya salido…<br />Eso no era nada bueno, pero no había mucho que pudiéramos hacer.<br />-No tiene sentido ir ahora- le dije.<br />-Sería ir a la muerte.<br />-Me da miedo preguntarte qué pasó en Agún- ella hizo una mueca, como diciéndome que ni siquiera podría imaginármelo- No quiero saberlo. Perdoname por haberte dejado sola.<br />-Ahora estoy acá otra vez.<br />-¿Quién te trajo?<br />-Tu tío. Me sacó de Estigia y después me llevó al infierno a buscarte- Definitivamente mi tío no era lo que se puede llamar “un romántico”…<br />-No, mi tío no iba a buscarme a mí, iba a buscar esto- le dije señalando la espada de los planos.<br />-Ah! Mirá vos…<br />-Él no sabía que estaba ahí, y no era mi idea tampoco terminar en el infierno. Se encontró conmigo por casualidad.<br />-No te puedo dejar sola que te mandás una cagada tras otra.<br />-¿Cuál de todas?- le dije sonriendo.<br />-No sé… vos decime…<br />-Bueno, si te referís a las recientes… a ver, vayamos de atrás para adelante. Me casé con el rey de los demonios, antes de eso me fui con mi primo Orión y destruí su ejército en Nuredum cuando fui en ayuda de Zug… Te dejé sola en Agún…<br />-Te enamoraste de un generalcito, te fuiste a Josper a trabajar de prostituta y resultó que ¡Emme es tu madre!<br />-Yo no puedo elegir a mis padres.<br />-Emme, tu peor enemiga- dijo acentuando la última palabra.<br />-¡Ya sé! ¿Qué querés que haga?<br />-Está claro que no puedo dejarte sola…<br />Sonreí, yo había sido la que la dejó sola y en Agún había muerto por mi culpa.<br />-Ahora tengo que hablar con ella…<br />-¿Con tu tía? Digo… con tu madre… ¿por qué mejor no descansás un poco?<br />-Está bien, tenés razón.<br />Me acosté a su lado y del cansancio me dormí apenas apoyé mi cabeza sobre la capa hecha un ovillo. No era cómodo pero estaba con Selene, lo demás no importaba. Me dormí pensando en Goran, Burgen y Zug, rogaba que estuvieran bien.<br />Al día siguiente seguimos camino a Imerion. Cuando llegamos y vi la ciudad entendí por qué le decían “la ciudad monumento”. Dos enormes puentes eran los únicos accesos a la isla, una avenida principal iba directo hacia el palacio con techos de cristal, dos avenidas laterales la secundaban. Haradim había hecho construir la ciudad en honor a sus victorias. No era la idea que el enemigo llegara hasta allí, la ciudad era prácticamente indefendible. La muralla, si es que podía llamarse así, parecía de papel. Tenía dos torres principales, la de St. Cuthberth, que anteriormente había sido la sede de los caballeros de la Orden de Haradim y la torre que ahora era la sede de los ministerios. Habitaban allí trescientas cincuenta mil personas, ahora eran muchas menos, los civiles habían sido evacuados.<br />Cabalgamos directamente al palacio, por la avenida principal se hallaban las estatuas de los héroes de Haradim, alcancé a leer Balder y varios otros nombres más que no conocía hasta que llegué a Zelgaris, mi tío, esposo de Shezabé. Recordé el cuadro en Hidden Forest, era muy parecido. Había creído por unos días que él era mi padre. Me pregunté quién lo sería ahora, era un misterio. Aún no había logrado juntar fuerzas para hablar con Shezari.<br />Un guardia nos detuvo, le entregué la carta que me había dado Burgen y nos dejaron continuar. Cuando llegamos cerca del palacio Shezari me dijo:<br />-Dame eso- y me pidió la carta.<br />-¿Qué vas a hacer?<br />-Vos dámela.<br />En fin, era Emme, no iba a cambiar porque fuera mi madre.<br />Entró mostrando el papel, dudo que alguien lo pudiera haber leído, iba caminando demasiado rápido y comenzó a abrir las puertas con telekinesis. Los guardias se paralizaban a su paso. La seguí, no iba a permitir que cometiera ninguna locura. La sala tenía una enorme escalinata que llegaba hasta el trono, me recordó bastante a la sala del trono de Azmodeus. Sviden estaba al fondo, sentado en su pequeño trono, una mesa llena de papeles se interponía entre él y los visitantes. Emme se quedó atrás junto a Jazir y a Selene, yo avancé. Me senté frente al escritorio y él dejó de firmar los papeles para mirarme.<br />-Nike, qué sorpresa- aunque no parecía sorprendido.<br />-Me gustaría que me responda algunas preguntas.<br />-¿Y por dónde querés que empiece?<br />-Cincuenta y dos años atrás.<br />-A ver, creo que no entendés…<br />-Por eso, vine a que me explique. Empiece por cincuenta y dos años atrás cuando me separaron de mi madre ¿usted conoció a mi abuela no?<br />-Hace cincuenta y dos años nació una heredera a una casa de Garrath… y teníamos que protegerla.<br />-Y por eso me separaron de mi madre…<br />-Ella también estaba en peligro ¿Por qué te pensás que decidimos hacerlo? Para que no lograran manipularte, para que no pudieran convertirte en el nuevo emperador. El problema fue que Shezabé no pudo hacerlo y te entregó nuevamente a tu abuela, pero habíamos logrado ocultarte.<br />-No me parece una buena razón para separarme de mi madre y decirle que había muerto… pero bueno, ya que ustedes son los que saben, ahora nosotros tenemos que lidiar con las consecuencias de sus malas decisiones, así que supongo que nos van a ayudar con eso- dije señalando hacia fuera.<br />-Yo ya no tengo más que hacer, mi tiempo ya pasó.<br />-O sea que se va a lavar las manos…<br />Él sacó una cajita y me la entregó. La abrió frente a mí, era una pluma de plata igual a la que tenía mi tío Jazir, y que le había entregado mi madre.<br />-¿Qué es esto?- le pregunté.<br />-Eso es el símbolo de una organización secreta, “la pluma de plata”.<br />-Mi madre tenía una igual ¿de quién es?<br />-Esa es mía, la otra era de Balder- había visto su estatua afuera, parecía alguien importante.<br />-¿Quién es Balder?<br />-Es tu padre… y también es el padre de Iskander.<br />¿Qué? ¿Mi padre? ¿El padre de Iskander?<br />-Eso no puede ser… yo soy cadormen y él es semidragón.<br />-Vos sos semicadormen y él es semidragón. Cuando no pudieron crear un nuevo emperador usándote a vos, fueron en busca de otro.<br />Ahora estaba demasiado confundida como para seguir hablando.<br />-Bueno, creo que hay alguien a quien tiene que darle explicaciones ¡Shezari!- la llamé, creo que era la primera vez que la llamaba así- Ahora va a tener que explicarle por que la separó de su hija por cincuenta y dos años.<br />Me levanté y vi como ella tomaba mi lugar. Lo agarré a Jazir del brazo y lo conduje hacia fuera.<br />-Vamos, hay cosas que hacer.<br />Sabía que Trenton estaba en la ciudad, había visto a los jinetes de Rittardast entrar en formación poco después que nosotros, así que fui a buscarlo. Mi tío desapareció una vez más y yo me dispuse a ver con qué contábamos. Los números eran tan desalentadores que la batalla parecía perdida antes de comenzar. Treinta mil campesinos, hombres y niños que con suerte podían sostener un arma, diez mil jinetes a las órdenes de Trenton, veinte mil hombres de las fuerzas de Haradim, no mucho mejor entrenados que los campesinos, quince mil más entre arqueros de Elgart, cadormen, centauros, y una legión de Garrath de cinco mil hombres a las órdenes de un niño que no parecía mayor de diecinueve años. Cuando Trenton me lo señaló no lo podía creer ¿ese era V’nef Aradiel?<br />-No te preocupes- le dije- cuando llegue Iskander seguramente él los comandará- y pensé en lo que me había dicho Sviden, él era mi hermano, aún no podía creerlo… pero me alegraba que así fuera.<br />Decidí ayudar con la muralla, no había mucho más que pudiera hacer.<br /><br />Estaba ocupada ayudando a reforzar la muralla, hacía casi cinco días que no dormía, cuando escucho que alguien me dice:<br />-No te va a servir de nada hacer eso- era mi madre.<br />-¿Podrías ayudar no?<br />-Vení- me dijo y me agarró de la mano. Me llevó hasta la muralla y me mostró las afueras de la ciudad.<br />-Hay otras cosas que podemos hacer.<br />-Sí, tirar abajo los puentes, pero nos pueden bombardear…- le dije. Mientras pensaba que necesitaba que Zug llegara rápido. Él iba a saber cómo reforzar la muralla.<br />-Esa muralla no va a resistir.<br />-Al menos estoy intentando hacer algo… Yo no sé de estrategia, tenemos que esperar que lleguen Iskander, Burgen o Goran.<br />-Hay gente capacitada acá.<br />-Sí, Trenton, ya hablé con él.<br />-No entendés, cualquier estrategia no va a servir de nada. Hay una sola forma en que podemos ganar esta guerra.<br />-¿Qué sugerís?<br />-Esa espada, hay que enviar a Vekna a otro plano, pero para eso tenemos que entrar adentro del Jurgenot. Luego hay que destruirla.<br />Lo decía como si fuera muy fácil.<br />-Eso no es algo que voy a decidir yo sola…<br />-¿Y si tuvieras que hacerlo?<br />-Lo vería en el momento.<br />-Ay sí… lo vería en el momento…- dijo con esa voz que odiaba que usara. Pensé: “Es tu madre, es tu madre”. Bueno, no iba a cambiar de un día para el otro.<br />En ese momento apareció Jazir.<br />-Hola tío.<br />-Buenas…<br />-Tenemos que esperar que lleguen los demás, seguramente mi hermano Iskander sabrá que hacer.<br />-¿Qué?- dijo Shezari.<br />-Sí, Iskander es mi hermano.<br />-¡Ah bueno!- dijo Jazir.<br />-¿Y quién te dijo eso a vos?-me preguntó mi madre.<br />-Sviden<br />-¿Y le seguís creyendo a Sviden?<br />-¿Conocés a un tal Balder?<br />La expresión de Shezari cambió por completo.<br />-Bueno, Balder es el padre de Iskander, así que si lo conocés entonces también es el mío.<br />Ella me miró como confirmándome que sí lo conocía.<br />-¡Ah mirá! Seguro ese de allá también es tu hermano. Ese maldito…- empezó a señalar a cualquiera diciendo que todos podían ser mis hermanos.<br />-Entonces es verdad lo que me dijo Sviden- creo que estaba demasiado feliz con esa noticia, siempre había querido tener un hermano.<br />-¿Y vos que pensás hacer?- le dijo mi madre a Jazir.<br />-Ir a Athos. Pero necesito ayuda para llegar ahí…- seguramente estaba pensando en la espada.<br />-¿A Athos? ¿Para qué?- le pregunté.<br />-Tengo unos asuntos que solucionar con mi tío.<br />-¡Hola! Hay una guerra allá afuera, ¿no podés hacerlo después?<br />-Es igual a vos…- le dijo a mi madre.<br />-Si querés yo después te acompaño a ir a matar a tu tío, pero ahora necesitamos ayuda acá, ¿por una vez podés pensar un poco en los demás en vez de pensar en vos?<br />-No, no puedo, a ver… soy cadormen.<br />-Bueno, mirá todo lo que pasó por los que piensan como vos.<br />-Tiene un punto- le dijo Shezari- Ah… había una cadormen ciega afuera, creo que te estaba buscando.<br />Jazir salió disparado en cuanto escuchó eso.<br />-¿Quién es esa?- le pregunté.<br />-El amor de su vida.<br />-¿Por qué mi mejor amiga se tenía que enamorar de él? En fin, espero que no se haya enamorado en serio.<br />En ese momento escuchamos un cuerno, miré y ya sobre la ciudad se acercaba un ejército de veinte mil hombres, a la cabeza iban Milo y Anya, unas veinte águilas gigantes los seguían desde el cielo. Era Shezabé. Fui a recibirlos y ellos me dieron la noticia, Burgen estaba muerto, no podía asumirlo, pero las lágrimas brotaron de mis ojos confirmándomelo.<br />-¿Dónde está Goran?<br />-La última vez que lo vimos había cargado directamente contra el Jurgenot- me dijo Anya.<br />No lo dudé, definitivamente Goran hubiera hecho algo como eso sin pensar en su vida ni en las consecuencias. Que me dijeran eso fue lo mismo que me dijeran que había muerto. Vi que Shezabé entraba a la ciudad sin frenarse a saludar a nadie, no me importó, estaba demasiado ocupada llorando.<br />-Burgen… Burgen…- repetía una y otra vez, tenía miedo de nombrar a Goran, no podía asumir esa realidad. Goran no podía estar muerto ¿por qué siempre me dejaba sola? Estaba llorando en un rincón y la única que vino a consolarme fue mi madre.<br /><br />No sé cuantos días, horas, minutos pasaron hasta que llegó una segunda comitiva. Miré a lo lejos y lo vi a Zug sentando sobre su cañón, grité su nombre desde la muralla y él movió su mano para saludarme, fui a recibirlo, fue una gran alegría volver a verlo.<br />-Zug que bueno que viniste, tenemos una muralla que reforzar- le dije cuando estuve a su lado.<br />-Tengo varias ideas.<br />-Te lo encargo.<br />Y no pude reprimir las lágrimas de emoción cuando vi que Burgen cerraba la fila. Venía totalmente desnudo, sin espada, sin armadura.<br />-¡Tapate!- le dije y le arrojé mi capa- ¡Tonto! Me dijeron que habías muerto.<br />-Yo le ofrecí ropa pero no quiso- me dijo Zug.<br />No pude evitar sonreír.<br />-¿Dónde está el cuerpo?- le dije ahora muy seriamente.<br />-¿Qué cuerpo?<br />-El de Goran- mi expresión había cambiado por completo. Él miró hacia atrás y dijo:<br />-¡Hablá estúpido!<br />Había un hombre que venía detrás de Burgen, él era tan alto no había logrado verlo. Se sacó la capucha, era Goran y le faltaba un brazo.<br />-¿Vos crees que un Jurgenot puede matarme?- me dijo.<br />Corrí hacia él y me abracé a su cuello. Él me abrazó con el único brazo que tenía y nos besamos.<br />-¿Estás bien?- le pregunté.<br />-Sí.<br />-Hay que decirle a Lile que recupere tu brazo.<br />-No te preocupes, no quiero molestar a esa niña. Tengo otra idea.<br />Vi que Burgen se dirigía hacia el palacio con Zug.<br />-Necesito que me lleves con el líder de las tropas de Garrath.<br />-Deberías descansar un poco.<br />-Primero llevame con él. No tenemos mucho tiempo.<br /><br />Burgen fue a buscar primero a Milo y a Anya, ambos ya se encontraban en debate con Trenton. Fue tal cual estaba, con mi capa de taparrabos.<br />-¿Podés vestirte no?- le dijo Anya, pero lo abrazó y lo besó, estaba feliz de verlo otra vez con vida, quién más que yo para entenderla, no era una tarea fácil para los que se quedaban esperar a aquellos que habían ido a combatir.<br />-Capitán- le dijo Milo.<br />-General- lo corrigió Burgen- preparen a todo el ejército, que estén formados a mi regreso. Voy a hablar con Sviden.<br />-Así lo haremos, General.<br />Y ahora sí Burgen se dirigió hacia la sala del trono a hablar con Sviden. Creo que ese día estuvo más solicitado que nunca, todos queríamos hablar con él.<br />-General, ¿cómo le va?- le dijo Sviden.<br />-Buenas tardes. Tengo algunas preguntas para hacerle. Además necesito que me ayude a conseguir nuevo equipo. El mío lo perdí adentro del Jurgenot.<br />-Vamos primero con las preguntas entonces…<br />-Quiero saber de mi padre.<br />-Él fue un gran hombre, es una pena pero él esta muerto. Fue hace dos años.<br />-¿Dónde?<br />-En Bakun, al sur de las Tierras Salvajes.<br />-¿Qué fue a hacer allí?<br />-Lo mismo que hizo en Nazur, tratar de expandir su mensaje. Los orcos tomaron a mal que los fueran a civilizar. Es una gran pérdida, no todos pudieron comprenderlo.<br />-Una pena realmente no haberlo conocido.<br />-Mucho de su espíritu vive ahora en usted. Él estaría orgulloso, como todos nosotros.<br />-Algunos, no todos.<br />-Yo por lo menos sí, y supongo que Iskander también.<br />Burgen le dijo a Sviden que cuando había estado adentro del Jurgenot vio como le disparaban balas de luz y que eso le hacía mucho daño. Shezabé le había dicho que la única forma de terminar con todo eso era destruyendo la espada y solo un arma con un espíritu elemental en ella podía hacerlo, como la lanza de Iskander. Sviden le dijo que Shezari le había dicho lo mismo, tenían que enviar a Vekna a otro plano y luego destruir la espada.<br />Mientras hablaban lo conducía a las catacumbas. Tomó unas llaves y abrió una puerta desvencijada. Los goznes chirriaron, hacía mucho que nadie la había abierto. Burgen vio que del techo colgaba una enorme espada, era negra pero se veían vetas rojas bajando del mango y cruzando el filo.<br />-¿Y esta espada?- le preguntó.<br />-Pertenecía a un gigante de Godham. A él le atribuyen las forjas del infierno. Es una espada de fuego.<br />-¿Es demoníaca?<br />-No.<br />-Se lo agradezco.<br />Sviden le señaló la vaina que colgaba de una pared. Burgen agitó la espada, parecía que adentro había lava moviéndose. Se la colgó cruzada a la espada.<br />-¡Ah! ¿Usted anda con el amigo Zug no?<br />-Sí.<br />-Cuando lo vea, dele esto- dijo y le entregó un martillo que cuando Burgen lo tomó pareció tronar- Y por favor avísale a Nike y a Jazir que tengo que hablar con ellos.<br />Ya no había nada más que decir así que Burgen fue a buscarlo a Zug.<br />-Un regalo de Sviden- le dijo a su amigo.<br /><br />Iskander había logrado salir del Abismo, llevando consigo a Jaria. Camino a Imerion pasó por Morwell y le pidió a Alessia:<br />-Ya que todo esto se originó solamente porque vos estabas aburrida y se te ocurrió abrir las puertas del abismo, te agradecería que nos des un par de elfos de los tuyos par arreglar tus mocardos.<br />-Está bien ¿qué querés?<br />-Lo que puedas ofrecer.<br />-Te podés llevar ciento cincuenta mil quimeras, aunque no creo que te sirvan de mucho.<br />-A esta altura toda ayuda sirve.<br />Cuando sobrevolaron Rittardast vieron que estaba incendiada, el paso de Firehorn era una visión realmente tétrica, había cadáveres sobre las paredes del paso. A lo lejos vio como el Jurgenot se acercaba irremediablemente a Imerion.<br />No muy lejos vieron una manada de caballos, pero venían por el cielo, eran asperis. Iskander había perdido su montura en la batalla una vez más, quizás no era una mala idea ir a buscar una.<br />-Sería mejor que bajáramos. La última vez que me vieron con esta forma yo era el Corruptor- dijo Jaria. Iskander sabía que ella tenía razón y descendieron. Ella volvió a tomar la forma de una hermosa mujer pelirroja.<br />Iskander se acercó a uno de los caballos, uno lo coceó y él le acarició el morro. El animal iba a dejar que lo montara.<br />-¿Preparado?- le dijo el caballo.<br />-Dale que va.<br />-Mirá que yo vuelo eh!<br />-Yo también.<br />Iskander y sus compañeros subieron a los caballos y el resto de la manada los siguió. Ahora tenían veinte mil caballos para hacer frente a las fuerzas de Vekna, quizás no parecía demasiado, pero toda ayuda en ese momento era vital, hasta los enanos habían decidido ayudar, habían llegado con Burgen y ahora se preparaban para combatir. Todos sabían que si perdíamos esa batalla era el final de Haradim.<br />Burgen fue a ver a Lile y a Shezabé. Ellas estaban en la torre de St. Cuthberth con los clérigos.<br />-Tengo una idea. Creo que podemos bendecir el agua del río y luego arrojarla contra el mar de no muertos, eso podría bajar sus defensas. No sé mucho de esto pero seguro ustedes lo pueden mejorar.<br />-No se preocupe General, nosotras nos vamos a encargar- le dijo Shezabé.<br /><br />Dejé a Goran con V’nef Aradiel y lo fui a buscar a Jazir, quizás ahora que ellos habían vuelto podía hacerlo entrar en razón, lo necesitábamos allí, no en Athos. Pasó algún tiempo hasta que logré dar con él y casi al mismo momento nos interceptó Burgen.<br />-Sviden quiere hablar con ustedes, creo que quiere entregarles algo- miré a Jazir, pero él tampoco parecía saber que podía ser.<br />Cuando llegamos a la sala del trono vimos que Sviden arrastraba una bolsa. Creo que en ese momento vi por primera vez su fragilidad. Él también era un mortal como nosotros después de todo. Cuando lo vio venir a Jazir le entregó la bolsa.<br />-Esto les va a servir. Ahora solo tienen que decir quién se va a quedar con qué.<br />Jazir vació el contenido sobre la mesa. Eran una espada y dos cimitarras. Levantó la espada, le faltaba la punta y los dragones labrados en la hoja brillaron cuando la sostuvo en alto.<br />-Es la espada de Nellens.<br />Jazir parecía fascinado con ella así que yo tomé las cimitarras. Eran livianas y parecían bastante mejores a las que había perdido.<br />-Son cimitarras fabricadas por los sirvientes de la diosa de la oscuridad.<br />Era un regalo demasiado grande, pero después de todo íbamos a pelear contra un Jurgenot, mejor que estuvieran con nosotros y no archivadas y olvidadas en algún sótano.<br />Lo fui a buscar a Goran, estaba con los warforged que le habían implantado un brazo metálico.<br />-Mirá lo que tengo ahora- me dijo sonriendo.<br />-Está bien, si sos feliz…- le sonreí.<br />-No te preocupes, no te voy a tocar con esto.<br />-Más te vale…<br />Cuando entró Burgen con le mostró a Goran su nueva espada, era un poco más chica que la fullblade, pero parecía tener lava adentro. Además le habían entregado otra armadura como la de los mirmidones negros. Goran tocó la espada con el brazo de metal, luego me tocó el brazo a mí, ahora estaba tibio.<br />-¿Qué te hiciste?- le preguntó Burgen.<br />-¿No te gusta?- dijo moviendo los dedos de metal.<br />-Dejalo, creo que es la primera vez que lo veo tan contento- le dije.<br />-¿Cómo que es la primera vez?<br />-Estoy seguro que lo habrás visto más contento- dijo Burgen y yo me reí.<br />-Goran- era una voz que lo llamaba directo a su mente.<br />-Iskander ¿dónde estás?<br />-Estoy llegando.<br />-Gracias a dios…<br />-Somos cuatro.<br />-¿Cuatro?- Goran sabía que solo habían partido tres.<br />-Vengo con Jaria, mi madre.<br />-Ya le digo a Zug que te fabrique un paso.<br />-Eh… venimos volando.<br />-¡Zug! Iskander viene volando fabricale un camino- Zug que no estaba muy lejos se dispuso a cumplir con el recado moviendo los cañones a la dirección que le indicó Goran.<br />-¿Está ahí Burgen? Burgen, que bueno saber que seguís ahí, estoy llegando- pero él si bien podía escucharlo, no podía responderle- No te preocupes ya vas a aprender.<br />-¿Viene Iskander?- les pregunté- Tengo que hablar con él cuando llegue.<br />-¿Qué tenés que hablar con él?- me preguntó Goran. Sí, tenía que asumirlo de una vez, era demasiado celoso.<br />-Es que… ustedes no saben… Iskander es mi hermano- creo que disfrutaba demasiado ver las caras de mis interlocutores cuando se los decía.<br />-¿Qué?- dijeron Burgen y Goran a la vez.<br />-¿Qué son sordos? Les dije que Iskander es mi hermano, hoy me enteré que mi padre fue Balder.<br />-¡Hola cuñado!- le dijo Goran a Iskander.<br />-¡No le digas!- no quería que nadie me arrebatara esa satisfacción.<br />-¿Qué decís?- le preguntó Iskander.<br />-Nada, ¿me repetís lo que pensás de los cadormen? No deberías pensar así, quizás ellos sean parte de tu familia…<br />Un ruido de cañones de luz blanca cubrió el cielo, era Zug que e estaba abriendo un paso a Iskander y a sus acompañantes.<br />-¿Quiénes son los que se están yendo?- preguntó Iskander.<br />-Mujeres y niños, los civiles- le respondió Goran.<br />-Supongo que todos los que pueden portar un arma están en la ciudad…<br />-Sí, preparate porque nosotros vamos a tener que entrar adentro del Jurgenot. Creemos que es la única forma de derrotar a Vekna.<br />-¿Este tipo siempre va a hacer entradas dramáticas no?- dijo Milo.<br />-No sería Iskander sino- le dijo Burgen.<br />Iskander bajó del caballo volador, había muchos más que fueron descendiendo detrás del primero. Portaba una nueva lanza de cristal y vestía una armadura extraña, parecía piel de dragón. A su lado estaban Eglas, Ejavra y una mujer de cabello rojo, muy bonita. Lo saludó a Burgen con la mano y le presentó a Jaria.<br />-Ella es Jaria, mi madre.<br />-Decile que mucho gusto- dijo el orco.<br />Saludo a Goran, a Zug y a mí no me saludaba.<br />-¿Hola no?- le dije moviendo mi mano frente a su rostro.<br />-Hola Nike.<br />-Dale decile, decile- dijo Goran, creo que ahora él lo estaba disfrutando más que yo.<br />-¿Qué le pasa? ¿Qué me tenés que decir?<br />-Quiere que te diga que somos hermanos.<br />No sé que habrá pensado pero su rostro tenía una expresión de asombro mezclada con incredulidad.<br />-¿Cómo se llama tu padre?- le pregunté.<br />-Balder… se llamaba, ahora está muerto.<br />-También el mío se llamaba Balder, así que sos mi hermano menor.<br />-Hola hermana…<br />-¿Vos lo conociste?<br />-Sí, era mi padre…<br />-Al menos vos sí lo pudiste conocer. Ya habrá tiempo para que me cuentes.<br /><br />Ya estaba oscureciendo cuando Burgen dio su discurso a todo el ejército:<br />-Pocos saben por qué estamos peleando. Los dioses que vienen a buscar esta puta espada, nada tienen que ver con nosotros y no nos concierne. Entonces ¿por qué pelean?<br />-Seguimos sin entender, señor- dijo uno de los soldados.<br />-Te reirías si supieras por qué peleamos- le dijo Iskander que lanza al hombro se dirigía hacia el palacio para hablar con Sviden, su maestro.<br />-En vez de entender… piensen en sus ancestros, en sus descendientes. Vamos a tener que pelear sin miedo, sin bronca, sin resentimiento, por una vez vamos a unirnos para terminar con todo esto.<br />Todos los soldados aclamaron sus palabras, cerca de él un chico rubiecito lo aplaudía. Estaba vestido con una armadura de metal blanco con el símbolo de Garrath en el pecho.<br />-¿Y usted es?- le preguntó Burgen.<br />-V’nef Aradiel, general de la tercera legión de Garrath. Sus palabras me han llegado. Lamento terriblemente lo que está pasando en sus tierras. Cuando todo esto termine recibirán nuestra ayuda. Mi padre le hizo mucho mal a esta tierra…<br />-No se preocupe, tiene tiempo aún para remediarlo.<br />Mientras Zug organizaba a los soldados en la muralla y Burgen terminaba de organizar al ejército, Iskander se disponía a charlar con Sviden. Cuando llegó frente a él se sentó en una silla, puso la lanza arriba de la mesa y exclamó:<br />-Llegué.<br />-Por fin…<br />-No era tan fácil, siempre me das las tareas más difíciles.<br />-Porque confío en vos. Y ahora vas a tener otra tarea más…<br />-Sí, algo me dijeron hay que entrar adentro del Jurgenot.<br />-Es la única forma de derrotar a Vekna, hay que enviarla a otro plano y después destruir esa espada.<br />-¿La espada? Ah… esa que habían ido a buscar Nike y Lile ¿quién la tiene ahora?<br />-Nike.<br />-¿Y después qué?<br />-Después… me llegaron estos documentos, el reino dejaría de existir, los distintos reinos se separarían.<br />-Vamos a hacer algo, necesitamos una nación consistente, pero bien creada. No tenemos fuerza para pelear contra Garrath…<br />-Cuando esto termine voy a retirarme.<br />-No te vas a retirar, por una vez vas a seguir órdenes.<br />-Mi tiempo terminó- dijo y sacó un libro y se lo entregó a Iskander. La cubierta rezaba “Tratado de política”- ¿Sabés por qué pasó todo esto?<br />-Por una estupidez<br />-Por la gente que se cree que puede decidir por los demás.<br />-La reina de Morwell dijo que hizo todo esto porque estaba aburrida. En fin, supongo que ahora vamos a tener que arreglarlo- Ah! Antes de irme, si me llega a pasar algo, por favor dale esto a Aiko- sacó un sobre y se lo entregó.<br />-¿Qué te dice que voy a sobrevivir?<br />-Sos un gnomo, los gnomos siempre sobreviven.<br /><br />Cuando Iskander volvió lo vio a Burgen entregándole el mando a Milo, él estaba casi llorando por al emoción.<br />-Ahora quedás a cargo de todas las fuerzas de Haradim.<br />Iskander llegó y le entregó su espada.<br />-Sería bueno que también llevaras esto, y uno de los asperis.<br />Todos los soldados en formación saludaron a su nuevo general.<br />“Tres hurras por Milo”<br />-Te lo merecés, sé que podrás hacerlo muy bien- le dijo Burgen. Anya va a ser la segunda al mando, por favor cuidala.<br />-Bueno, supongo que ahora tenemos que ir a pelear contra ese Jurgenot- dijo Iskander.<br />-Sería mejor que fuéramos mañana por la mañana- le dijo Goran.<br />-Entonces vamos a tomar unas cervezas- dijo palmeando a Burgen en el hombro, él pareció de acuerdo.<br />-¿Vamos?- le pregunté a Goran.<br />-Vamos.<br />-Mamá ¿venís?- le pregunté.<br />-¿Te parece?<br />-Si querés… por qué no.<br />Ella me miró asintiendo. Seguramente para ella también había sido difícil enterarse que yo era su hija. Si bien ahora era la misma Emme que yo había conocido, su actitud hacia mí era totalmente diferente.<br />-¿Vamos hermano?- le dije a Iskander.<br />-Vamos hermana- me respondió.<br />Llegamos a la taberna y nos sentamos en una mesa, no muy lejos mi madre y Jaria se habían puesto a tomar algo juntas. Quizás quisieran hablar de Balder, o de nosotros, no lo sé.<br />En la mesa principal estábamos Iskander, Goran, Zug, Burgen, Lile, Milo, Anya, Mael y yo, poco después se sumaron Jazir y Selene que venían muy abrazados. Goran levantó su jarra de cerveza y dijo:<br />-Mañana se terminará esta absurda guerra, vamos a acabar con ese Jurgenot- todos golpeamos los vasos. Esa podía ser la última noche de nuestras vidas, había que disfrutarla. Me subí a la mesa y tomé a Selene de la mano para que me siguiera y bailamos como tantos años atrás.<br />Los marauders eran incontables, el Jurgenot no tardaría en llegar a Imerion, estábamos a punto de luchar la batalla más difícil y aún así ese había sido el día más feliz de mi vida.</span>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-83201429387227624852009-03-12T15:13:00.000-07:002009-03-12T15:19:44.053-07:00Fecha 7: 01/03/09<div style="text-align: center;"><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyF0Crm0Ew7CmP1T5hThJy68Cl5iAwNmUc0oeXcEh97EI2sDU7F6hLw0Na-VrBPpfsEOXhnR921BlQzSGZqXk3OSIz0Ya9Ka0awOI-fnbIGopXOKL7d1098f23IeCKtkM3CB_ORzqokkd2/s1600-h/Emme3.jpg"><img style="margin: 0px auto 10px; display: block; text-align: center; cursor: pointer; width: 328px; height: 400px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyF0Crm0Ew7CmP1T5hThJy68Cl5iAwNmUc0oeXcEh97EI2sDU7F6hLw0Na-VrBPpfsEOXhnR921BlQzSGZqXk3OSIz0Ya9Ka0awOI-fnbIGopXOKL7d1098f23IeCKtkM3CB_ORzqokkd2/s400/Emme3.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5312429342339353762" border="0" /></a><br /><span style="font-weight: bold;">Emme</span></div><span id="postmessage_6809"><br />Burgen, Zug y Goran fueron hacia los barrios altos de Josper, su objetivo era buscar al que había enviado el sobre con el anillo de Nike.<br /> -General- lo saludó un soldado que estaba de guardia.<br /> -Vamos a pasar- dijo Burgen.<br /> -¿Necesita escolta?<br /> -No- dijo y siguió su camino.<br /> Goran se paró y dijo:<br /> -¿A dónde vamos?<br /> -A buscar al muchacho.<br />-Acabamos de pasar un puesto de guardia ¿no debimos preguntar? Está bien, no se llega a general de un día para el otro- y le palmeó el hombro al orco.<br />Burgen retrocedió para preguntarle si sabían dónde estaba el muchacho. Le dijeron que estaba en el puesto de guardia y le indicaron hacia donde ir. Llegaron a una antigua biblioteca, que ahora era un centro de mando.<br /> -¡¿Maximillian?!- dijo con su potente voz al entrar.<br /> -Está haciendo una recorrida ¿Qué puedo hacer por usted?- le respondió uno de sus compañeros.<br /> -Necesito hablar con él para saber quién lo envió a entregar una carta.<br /> -Espere que me fijo en nuestros registros…No, no figura que Maximillian haya ido a entregar nada, señor.<br /> Burgen le mostró el sobre con el sello de Vekna.<br /> -¿El sello lo reconocés?- le preguntó Zug.<br /> -No- le respondió.<br /> Zug se puso a investigar en los libros y empezó a buscar el sello.<br />-No creo que encuentres nada aquí, son libros bastante nuevos, tendríamos que buscar algo en las leyendas de la “Guerra del Caos”- le dijo Goran.<br />Pero Zug fue persistente y encontró un libro bastante antiguo donde estaba ese mismo dibujo. Ese sello correspondía a uno de los señores del infierno. Goran dijo que no lo nombre porque se dice que así se pueden personificar en la tierra.<br /> Poco tiempo pasó hasta que trajeron al muchacho Maximillian detenido y esposado.<br /> -Recluta, así que usted está desobedeciendo órdenes…- le dijo el que estaba a cargo del puesto de guardia<br /> -No… yo no…- dijo el muchacho temeroso por la reprimenda que iba a recibir, parecía un buen chico, no había maldad en sus ojos.<br /> -General- y lo miró a Burgen.<br /> -Maximillian, ¿quién te dio la carta que trajiste hoy?- le preguntó Burgen.<br /> -Me lo dio un mayordomo de una casa alta.<br /> -¿Qué casa?<br />-La de Lord Giberson. Me dieron dos monedas de oro… Disculpen, no lo volveré a hacer…- Burgen vio que el muchacho estaba realmente arrepentido por dejar sus funciones en favor de un beneficio personal.<br /> -Que sea la última vez- le dijo Burgen y le sacó las esposas.<br />Resultó que el hermano de este muchacho había prestado sus servicios en la guerra de Gaia y Burgen lo había conocido. Ahora descansaba en paz junto a los pocos muertos de esa batalla.<br /> <br /> -Goran, ¿vos sabés algo de Giberson?- le preguntó Zug. Si lo iban a ir a visitar mejor era estar lo más informados posible.<br /> -Sí, es uno de los hombres más ricos de la ciudad y del país.<br /> -¿Y cómo se hizo tan rico?<br /> -Traficando gente. Es un comerciante. Tiene vínculos en el imperio, apoyó y financió la inquisición.<br /> -¿Lo conociste?<br /> -Lamentablemente sí.<br /> -¿Cómo es personalmente?<br /> -Cómo cualquier inquisidor. Muy parecido a Broker.<br /> Zug dijo que debían ir a hablar con el tal Giberson, podrían decirle que necesitaban dinero para financiar alguna actividad.<br />-Podemos ir como devotos de St. Cuthberth. Podríamos decirle que queremos poner una iglesia en los nuevos reinos orcos- dijo Goran.<br />-Yo no hablaré- dijo Burgen. No le gustaba nada esa idea- Digámosle que necesitamos armas de asedio, hagámoslo más fácil- agregó.<br />Se encaminaron hacia la casa, era la más grande de todas. Alrededor había estatuas de mujeres, casualmente muy parecidas a Nike. Había demasiado dinero allí.<br /> Burgen golpeó y abrió la puerta un sirviente. Era el mismo hombre que había hablado con Nike el día anterior.<br /> -General de las tropas de Haradim, Burgen.<br /> -Zug.<br /> -Queremos hablar con Lord Giberson.<br /> -Él no se encuentra, pero pasen por favor.<br /> -Quizás podamos hablar con usted primero- dijo Zug.<br /> -¿Con quién tengo el gusto?<br />-Él es Burgen, el hombre más importante del ejército. Yo soy Zug. Necesitamos reconstruir las nuevas tierras orcas, y para eso necesitaríamos financiación.<br /> -Suena interesante… creo que a mi señor le puede interesar ¿Desean algo de beber?<br />Le pidió a una mujer que fuera a buscar bebidas. Burgen enseguida detectó que la casa exudaba mal por los cuatro costados. Lo miró a Goran y él le dijo en voz baja:<br /> -Estamos en la boca del demonio.<br /> Burgen vio pasar tarianos y lo miró una vez más como diciéndole “¿qué es esto? ¿también hay bárbaros aquí?”<br /> -Nos interesaría restablecer las tierras que fueron arrasadas por la guerra- dijo Zug.<br />-No creo que haya problemas, pero seguramente mi señor va a solicitar algunas concesiones comerciales. Podemos financiar… obviamente con algún intercambio.<br /> -Obviamente ¿cuándo lo puedo ver?- dijo Burgen.<br /> -Fue al sur por negocios, en un par de semanas estará de regreso.<br /> -Nosotros también vamos al sur, quizás podamos encontrarnos con él en el camino- mintió Zug.<br /> -Yo estoy hablando de más allá del mar. Les recomendaría que lo esperen aquí.<br /> -Dos semanas no- le susurró Burgen a Goran.<br /> El vino que trajo la muchacha comenzó a hacer efecto en Zug que se empezó a dormir y a hablar pavadas.<br /> -Es vino cadormen- dijo Goran- creo que le afectó.<br />La moza tomó las copas y al irse se chocó con el ayudante de Giberson. El traje quedó todo manchado. Él le hizo una seña para que se marchara, ella recogió todo rápido y se fue asustada. El hombre se resbaló por el vino y se cayó, finalizando con un patético espectaculo. Burgen se aguantó la risa, a Zug le costó bastante más.<br /> -No la culpe, todos pueden cometer torpesas- le dijo Burgen.<br /> -Ya les agendé la reunión con mi señor.<br /> -¿Algo más?- le dijo Burgen a Goran.<br /> -No, por mí nada más- dijo y le dio un codazo en el pecho a Zug para que no se riera.<br /> Al regresar Burgen dejó a Zug con los demás ingenieros en su tienda, estaba totalmente borracho.<br /> -Cuidenlo. Cuando esté mejor que me busque.<br />Burgen buscó a Milo y a Anya y les contó todo lo que habían visto, les dijo que estuvieran preparados y que armaran a los ejércitos. Anya le entregó el informe de Nuredum.<br /> -Hay nubes negras sobre la ciudad, y temblores debajo.<br /> -Es lo que vio Lile hace unos días…<br /> <br />Cuando Zug despertó después de algunas horas vio que los ingenieros miraban hacia Nuredum, las nubes negras cubrían las montañas.<br /> -¿Dónde está Burgen?- preguntó enseguida.<br /> -El warlord está con sus amigos humanos.<br /> -Primero mejor me visto.<br /> <br />Burgen fue a la casa de Nike y la encontró a Lile, el puño clavado en el suelo, el pelo blanco se le estaba cayendo de a mechones.<br /> -Lile no podés hacer esto, nunca más- le dijo- ¿Qué pasó?- dijo mirándola a Shanna.<br /> -Lile ayudó a un… uno como esta chica que vive acá.<br /> -A ver dejame adivinar… ¿le faltaba un ojo?<br /> -Sí.<br /> -Jazir. Lile ¿me escuchás?<br /> -Sí- le respondió.<br /> -Nos llegó una carta… de Lord Giberson.<br /> -No me sorprendas más.<br /> -En el sobre estaba el anillo de Nike.<br /> -¿Y el viejo está destruido no?<br /> -Sí, quiere ir a buscarla. Y hay algo más... ¿te acordás de la visión que tuviste? Bueno, está pasando ahora.<br /> -Dios…<br /> -No te mates.<br /> -Yo no hago más que lo que me piden que haga- le dijo ella.<br /> -No lo hagas más.<br /> -La única manera de ir allí, aparte de esta, es esa espada y no la tenemos.<br /> <br />Jazir estaba parado sobre un acantilado, a su lado una mujer que lo había ayudado a llegar hasta allí. Varios niveles lo separaban del fondo, habían personas allí siendo torturadas de las peores formas. La torre principal que parecía una aguja terminaba al mismo nivel en el que él estaba parado. Arriba el cielo era de un rojo tormentoso. Había fácilmente nueve kilómetros hacia abajo.<br /> -En cuento nos encuentren van a mandar ejércitos- le dijo a la mujer.<br /> -Tendremos que hacer lo posible para que no nos encuentren. Espero que estés a la altura, Baerne.<br />Bajaron y bajaron hasta que a Jazir se le cruzó un demonio que le salió al frente. Lo chocó adrede y él siguió caminando pero su contrincante no iba a hacérselo tan fácil. Le dijo que era un estúpido y lo provocó hasta que ya no hubo nada que hacer. Jazir se enfrentó a él. Entre él y la mujer mataron al agresor y a su compañero, pero ya los habían visto.<br /> -¿Vos no sabés volar no?- le dijo la mujer.<br /> -Lo puedo intentar…<br /> -Corré hacia el abismo y saltá.<br /> Él miró los pisos que aún quedaban por descender y por un momento dudó.<br /> -¿Confiás en mí?<br />Él saltó y en el aire lo atajó un murciélago, una criatura de las sombras que había invocado la mujer. Ambos comenzaron a descender pero en un momento ella se desconcentró y empezaron a caer.<br /><br /> Cuando llegaron donde los esperaba Goran él estaba leyendo un libro muy viejo. Parecía un mapa de los planos.<br /> -¿Es duro eh?- dijo Zug.<br /> -¿Es duro el vino cadormen no?- le dijo Goran.<br /> -¿Cuál es el plan?- le preguntó.<br /> -No sé cual será su plan, yo voy a bajar.<br /> -¿Y cómo vas a hacerlo?<br />-Una forma para poder bajar es muriendo a manos de un demonio o con un tratante que te pueda llevar. No hay muchos en el mundo. El único que puedo llegar a conocer es un viejo que se llama Corax… y Lile, pero ella es muy joven.<br /> -¿Qué estás recomendando?<br /> -Que me maten. Si estamos muertos podemos pactar con los señores de la muerte y sino buscar un tratante.<br /> -¿Cuánto tiempo llevará encontrar el tratante?<br /> Goran no sabía que decir o qué hacer, era la primera vez que lo veía así. Burgen, Lile y Shanna se unieron a ellos dos.<br /> -Bueno, ya estamos todos ¿Lile cómo estás?- le dijo Goran.<br /> -Calva, ciega y sin fuerza- le respondió.<br /> -Lo mandó a Jazir- le informó Burgen.<br /> -¿Cómo?<br /> -Él se lo pidió.<br /> -Jazir vino y me dijo que le abriera una puerta hacia… el abismo.<br />Goran puso su mano en el hombro de Lile y su pelo volvió a crecer, ahora era de un color muy negro. Pero el pelo de Goran ahora tenía más canas.<br /> -¿Goran qué estás haciendo?- le dijo Burgen.<br /> -Yo no puedo llevarnos al infierno, ella sí.<br />Antes de marchar Burgen habló con Milo y Anya, les dijo cual era ahora su misión, que iría al infierno. Les dijo que debían unirse todos, que se organizaran y que cualquier cosa hablaran con Torin.<br /> -No voy a dejar que Goran vaya solo.<br />Anya lloró ¿se podía regresar del infierno? Ella no lo sabía. Burgen le pidió a Témpano que cuidara de Anya, no podía llevarlo allí.<br />-Lile, cuidate, y gracias- Burgen ya desde el otro lado vio como a Lile volvía a formársele un nuevo mechón de pelo blanco- Saludos a Islander.<br /><br />*****<br /><br />Luego de ese beso Nike se vio transportada a un lugar que no podía ser otro que el infierno. Estaba sobre un camino, alrededor una enorme pared en forma circular que se alzaba nueve kilómetros hacia arriba. Parecía como si estuvieran dentro de un volcán.<br /> -Vamos, agarrate de mi brazo- le dijo Lord Giberson. Ella intentó resistirse pero no pudo hacerlo así que lo tomó.<br /> -Hijo de puta- le fue diciendo todo el camino.<br /> -Pero que modales su nueva esclava- le dijo un demonio que iba pro el mismo camino.<br /> -No soy esclava de nadie- dijo Nike, pero era evidente que sí lo era, Lord Giberson la dominaba como quería.<br />Por todos lados había humanos esclavos siendo utilizados de diversas maneras por sus dueños demonios. Nike vio una carreta tirada por dos de ellos y Lord Giberson la obligó a subir.<br /> -Vamos en carreta, será más rápido.<br />-No! No!- no quería viajar en eso, pero seguía sin poder resistirse a él. Su odio crecía más y más. Lo siguió insultando el resto del viaje, al menos le quedaba esa satisfacción.<br /> -Ahora vamos a ir a ver al Señor.<br />Cuando llegaron a la puerta al final del camino vio que la custodiaban dos horribles monstruos, ella solo les llegaba a las rodillas.<br /> -Vine a traerle unos regalos al rey.<br /> Ellos miraron a Nike.<br />-Parece buenos regalos- les dijo otro de piel oscura, barbilla en punta y cabello negro. Los ojos eran totalmente rojos, éste sí era de su misma estatura y parecía un sirviente de los importantes.<br />Los acompañó a una especie de sala principal en forma circular. Adelante sobre una escalera se hallaba el trono. Sentado sobre él un hombre (o esa apariencia tenía) de cabello rojo, piel muy blanca y ojos oscuros miraba con desdén a la nueva mujer que le habían presentado y la descartaba aburrido.<br /> Los condujeron hacia la explanada del trono y Giberson hizo una profunda reverencia, Nike no se movió.<br />-Su majestad, le traje un regalo- y la condujeron al final de la escalera. Él la miró y le extendió la mano. Nike pensó que si tenía que pasar toda la eternidad allí mejor que fuera con él. Le tomó la mano y él se la besó.<br /> -Eres la mujer más hermosa que vi tanto en el cielo como en el infierno. Mi nombre es Azmodeus.<br /> -Nike Baenre- ella ya estaba con él en la explanada del trono y le sonreía satisfecha. Abajo Lord Giberson clamaba:<br /> -Y tengo otro regalo más para usted- y presentó la espada.<br /> -Si quiere puedo ir a buscársela- le dijo Nike.<br />-Está bien- le respondió Azmodeus. Nike bajó las escaleras y tomó la espada que le extendió Lord Giberson, ahora sí le gustaba más la situación, no lo miró y volvió al lado de Azmodeus. Él la esperaba con la mano extendida.<br /> -¿Le molestaría que yo se la guarde?- le preguntó.<br /> -¿Quieres ser la custodia de la espada de los planos? Está bien, siempre y cuando accedas a ser mi esposa…<br /> -Sino le molesta que ya esté casada arriba, ah! Y que no lo ame…<br /> -¿Amor?- me dio riéndose.<br /> -Entonces hecho- dijo y se colgó la espada al cinto- solo pido dos condiciones.<br /> -¿Cuáles?- dijo con curiosidad.<br />-La primera, no quiero que me manipule mentalmente como lo hacía él- era algo que no le costaba nada pedir y él asintió. Parecía que tener ese hermoso cuerpo por una vez le había servido para algo más que obtener dinero- La segunda, mátelo- dijo señalando a Lord Giberson. Èl chasqueó los dedos y el que había sido el hombre más rico de Josper cayó muerto al suelo- Gracias, no lo aguantaba más- profirió.<br />-¡Escuchen todos!- dijo a los presentes en la sala- Les presento a Nike, mi esposa y señora de los nueve infiernos- Nike entendió por qué afuera había nueve domos, seguramente cada uno pertenecía a un señor del infierno, y ella se había casado con el líder de todos ellos. En fin, la espada la tenía ella y no él, eso era lo importante. Se sentó en el trono, le pusieron una enorme capa roja y una corona sobre su cabeza. Él se sentó a su lado.<br /> -Bueno, ahora sí podemos charlar.<br /> -¿Puedo preguntarle algo?<br /> -Sí- seguramente él se sorprendió de lo descarada que era.<br /> -¿Hay una persona aquí que responde al nombre de Emme o Shezari?<br /> -Ah, te refieres a tu madre, digo… a tu tía. No, ella no está aquí. Está en Estigia.<br /> -Mejor.<br /> -¿Y para qué quería hablar con ella?<br /> -Porque quería que me confirme algo. Quería saber por ella si es o no mi madre ¿usted lo sabe?<br /> -No lo sé…- o no quería decírselo- ¿Y quién es tu esposo arriba?- le preguntó cambiando de tema.<br /> -Eso no importa.<br /> -Sí, quiero saberlo para darle un “trato especial” cuando lo encuentre.<br /> -¿Para qué si después de todo vas a arrasarlos a todos?<br /> -No, no los voy a arrasar…<br /> -Los vas a esclavizar.<br /> Él la miró sonriendo, mientras movía la cabeza afirmativamente.<br /> -Entonces con más razón no necesitás saberlo.<br /> -Sí, quiero que sea mi esclavo.<br /> -Podría ser el mío.<br /> -Si tú lo deseas… Podemos traerlo ahora.<br /> -No, eso no sería divertido.<br /> El sonrió.<br /> -Me gusta esa forma de pensar. Tenés razón.<br /> Ahora Nike sabía que solo tenía una opción, retrasar la salida de los demonios el mayor tiempo posible.<br /> -¿Qué lindo día no?- arriba los rayos se arremolinaban en un cielo rojo y tormentoso.<br /> -Sí, están cayendo cosas- dijo Nike.<br /> -Ah! Parece que vienen invitados a nuestra boda.<br /> Nike vio a su tío Jazir y a una mujer encapuchada caer desde al boca del cráter.<br /> -No le hagas nada, es mi tío.<br /> Jazir miró a Nike, no entendía nada de lo que estaba pasando, la mujer misteriosa tampoco dijo nada.<br /> -¿Así que ustedes son familiares de mi mujer? Bienvenidos al infierno.<br />Jazir la miró sin comprender, no había por qué culparlo, él no sabía que ahora Nike tenía la espada. Cuando miró con detenimiento a su sobrina, vio la espada en su cinto. En ese momento Nike vio que en el centro del salón se abría un portal y de él salía Goran al frente, lo acompañaban Burgen y Zug. En un primer momento fue feliz de verlo allí, luego pensó que eso no había sido buena idea. Pero se tranquilizó, no había nada que temer aún, Azmodeus estaba tranquilo.<br /> -Ah! Más invitados a la fiesta…- y luego le preguntó a Nike- ¿Ellos también son familiares tuyos?<br />-Algo así…- le respondió, el tono de su voz seguía exactamente igual a antes. No podía mostrar su temor, no sabía como podía reaccionar su "nuevo esposo”.<br /> -No pierdan de vista a Nike- les dijo Burgen a sus compañeros.<br />En ese momento Nike vio como Goran sufría una transformación. Su cabello se volvió negro y sus ojos eran dos flamas, la armadura tomó el color rojo de la carne, ahora era... ¿un demonio? Tenía dos alas negras a su espalda. Nike no entendía absolutamente nada, pero continuó con su papel.<br /> -Los presento- dijo Jazir- la pequeña mole es Burgen… y su compañero Zug.<br /> -Voy a hacer una carga. Yo voy a ser el ariete- les dijo Burgen a Zug y a Goran.<br /> -Sería preferible que ella fuera el ariete- dijo Goran que había visto la espada.<br /> -Y él es…<br /> -Ya conozco a Goran- lo interrumpió Azmodeus.<br />Nike pensó “¿cómo puede conocerlo el rey de los demonios?” claro, no era tan difícil, Goran había pasado veinte años en el infierno.<br /> -Bueno, los presento formalmente: Goran, Azmodeus, los dos esposos de Nike- acto seguido se corrió para dejar pasar a Goran.<br /> Nike no podía creerlo, ¿cómo su tío le había dicho eso? ¿acaso estaba loco? ¡iba a matar a Goran!<br /> -Hola hermano- le dijo Goran, ahora ambos estaban frente a frente. Nike estupefacta los miraba desde el trono.<br /> -Así que viniste a mi boda, ahora ella es mi esposa.<br /> -Ahora yo me voy a llevar a ella y a la espada, y vos vas a morir.<br /> -Yo no me muero... a ver…<br /> -Bueno, por ahí tenés ganas de ir a conversar con Zariel, o con Danwe quizás…<br /> Nike no tenía idea de lo que él estaba diciendo. Vio que Jazir se estaba acercando a ella.<br /> -Quizás si matás a lo que voy a traer…<br /> Goran se hartó y lo levantó del cuello.<br /> -¿Qué te pensás que me podés poner adelante que yo ya no haya visto?<br /> El piso del infierno comenzó a temblar y Azmodeus creció hasta ganar el tamaño de un dragón de doce metros de alto.<br /> Nike le dijo a Jazir.<br />-Sino querés que use esto- dijo señalando la espada de los planos- prestame tus cimitarras- él traía además otra espada y una lanza que le parecía bastante familiar… ¿que no era la de Orión?<br /> -Tranquila, confiá en mí.<br />Cuando Nike vio esa horrible criatura se paralizó al igual que Zug. Burgen corrió hacia el otro flanco con la espada y pasó frente a él abriéndole una herida en el costado. Al otro lado Jazir le decía a su sobrina que tomara las cimitarras. Goran que estaba al frente lo golpeó con la espada y le cortó un diente que cayó al suelo haciendo un ruido que hizo eco en esa especie de anfiteatro.<br />Alrededor de la batalla no había quedado nadie, solo en pie estaba el dragón, el recinto principal estaba desierto. Nike vio que Jazir sacaba una espada que jajás le había visto usar, comenzó a hacer un zumbido extraño, como si estuviera silvando y la rodeó un aura negra. Jazir apuntó y un rayo de energía oscura impactó al dragón haciéndole severo daño. Todos vieron como unos fantasmas (o almas) que salieron de ella se metían en la herida del dragón y la iban abriendo. Azmodeus giró hacia Jazir y dejó su espalda descubierta, no debió hacerlo, Burgen usó su gran espada y le cercenó la cola. Un alarido terrible salió de sus fauces. El suelo comenzó a temblar una vez más y cuatro monstruos de cuatro metros de altura salieron a ayudarlo. La mujer encapuchada sacó dos ballestas y le disparó a dos de ellos. Zug la ayudó con las armas de sus puños.<br />Azmodeus volvió a su forma original y justo quedó de espaldas a Nike que le clavó las cimitarras por la espalda, él cayó arrodillado al suelo. **(Alto crítico saqué con mi sneak attack ^^)**<br /> -Que lástima que lo nuestro no funcionó.<br />Mientras Zug y la chica continuaban atacando a los cuatro monstruos Azmodeus nos arrojó una enorme bola de fuego y desapareció. Burgen lo cubrió a Goran y Nike pudo esquivar en parte las llamas, sus ropas quedaron bastante quemadas. Pero Jazir no lo logró y cayó muerto al suelo.<br /> -¡¡Tío!! ¡¡Tío!!- gritó Nike y lloró sobre su pecho.<br /> -Nike tenés que sacarnos de acá- le dijo Goran.<br /> Ella sacó la espada y se la entregó.<br /> -No sé cómo usarla…- aunque por alguna razón sabía exactamente para qué servía.<br /> -Yo tampoco.<br />“Habrá que probar” pensó Nike y probó haciendo un corte al aire con la espada de los planos y vio una rendija que se abría a otro lugar, era su casa de Josper, el primer lugar en el que había pensado.<br /> -¡¡Burgen vení!!- le gritó.<br />La mujer encapuchada había transportado a Zug hacia la grieta caminando por las sombras. Zug fue el primero en cruzar, luego Nike arrastró el cuerpo sin vida de Jazir.<br /> -¡Idiota! No me tenés que proteger- le dijo Goran a Burgen.<br /> -No quiero que ella llore más- le respondió.<br /> -¡Corran!- dijo la mujer que pretendía quedarse a cubrirlos, en ese momento se le corrió la capucha y Burgen vio quién era.<br /> -Vos venís con nosotros.<br /> -No puedo, estoy muerta.<br /> -Pueden revivirte.<br /> -Si rompo el pacto que tengo me va a costar muy caro.<br /> -Yo tomaré las consecuencias- y entre Burgen y Goran la arrojaron del otro lado.<br /> -¿Selene?- dijo Nike cuando la vio. Las lágrimas seguían rodando por sus mejillas.<br />La grieta se estaba cerrando, todavía Burgen y Goran no salían. Nike se paró y frenó la grieta con la espada. Burgen cargó a Goran sobre sus hombros y corrió, los dos salieron justo a tiempo. Un brazo de esas criaturas cayó en el suelo de la casa de Nike.<br /> Nike volvió con Jazir y Burgen le dijo a Goran:<br /> -¡Andá con tu mujer! La fuimos a buscar al infierno, ahora andá con ella. Voy a buscar a Lile.<br />Nike sintió una mano helada sobre su hombro. Era Selene. Ya había sentido ese mismo frío antes, en Josper quince años antes, en el rostro de Goran.<br /> -Goran, Josper está incendiada- le dijo Burgen. Él se asomó a la ventana y le dijo:<br /> -El tiempo en el infierno no pasa igual que aquí.<br /> A lo lejos cruzando el paso de Firehorn vieron al Jurgenot.<br /> Burgen salió y subió al techo, una vez allí gritó con todas sus fuerzas:<br /> -¡¡Lile!!<br /> Ella apareció a su lado sin demora.<br /> -Ya volvimos, pudimos rescatar a Nike, y tenemos la espada- Ella suspiró aliviada.- ¿Cuántos días pasaron?<br /> -Cinco, estamos resistiendo en Firehorn, tengo que volver a ayudar.<br /> -Primero tenés que traer a alguien…<br /> Cuando entraron Lile vio a Jazir, muerto en el suelo.<br /><br /> Jazir estaba ya en Estigia hablando con la reina cuervo.<br /> -Yo ya logré lo que quería, Selene está del otro lado. Además hay alguien que te está esperando…<br /> -Hermano ¿por qué tardaste tanto?- le dijo Emme.<br /> En ese momento sintió que lo arrastraban otra vez al mundo de los vivos.<br /> -¡¡No!!<br /><br /> Burgen y Goran comenzaron a planear que harían de ahí en más. Iskander todavía no regresaba, o eso parecía, según las noticias.<br /> -Primero que Lile reviva a Jazir.<br />-Esperen- dijo Goran y le puso la mano en el pecho a su amigo. Al instante éste revivió. El pelo de Groan ahora estaba totalmente blanco.<br /> -Te merecés un golpe- le dijo Burgen.<br /> -¿Por qué?<br /> Él le señaló.<br /> -Las canas.<br /> -¿Quién? ¿quién me trajo?- dijo Jazir. Fue Selene la que le respondió.<br /> -El viejo te trajo.<br /> -No tendrías que haberme traído.<br /> -¿Por qué?- le preguntó Nike. Sentó a su lado a Selene y le dijo- Ahora sí, empezá a hablar.<br /> Burgen parecía estar de acuerdo con eso.<br />-Tengo un trato con la reina cuervo, yo no había ido a buscarte a vos al infierno, no sabía que estabas ahí. Fui a buscar la espada.<br /> -¿Qué trato tenés con un deadlord?- le preguntó Goran.<br /> -Le iba a entregar la espada a ella para que no la obtenga Toldot. Él va a tomar parte en la guerra.<br /> -Sí, pero ahora la espada la tengo yo, y el que la quiera la va a tener que venir a buscar.<br /> -Ella quería que Selene estuviera afuera- agregó Jazir.<br /> -¿Por qué la trajeron?<br /> Selene le dio un golpecito en la nuca.<br /> -¿Qué no me querés acá?<br /> -¡No seas tonta! ¿Cuál es su objetivo con ella?<br /> -No lo sé. Estaba hablando con Emme cuando me trajeron... ella es tu madre…<br /> -Lo sé…<br /> Burgen habló con Goran mientras tanto y él se acercó para decirle a Jazir:<br />-Cuidalas, tienen que irse a Imerion, ahora- ya estaba decidido iría con Burgen y Zug a Firehorn- No te separes de esa espada- le dijo a Nike.<br /> Cuando él se dio vuelta para marcharse ella lo abrazó por la cintura.<br />-No te vayas, no te vayas, no te vayas- le repitió una y otra vez aún sabiendo que era inútil. Él la agarró de las manos fuertemente se dio vuelta y la besó. Al instante desplegó sus alas, agarró a Burgen y a Zug y remontó vuelo.<br /> Nike suspiró y se dispuso a seguir su charla con Jazir.<br /> -¿Cuándo lo supiste? ¿Quién te lo dijo?<br /> -Shezabé, hace algunos días.<br /> -¿Por qué me separaron de ella? ¿Quién fue?<br />-Tu abuela, a Emme le dijeron que su hijo había muerto, según mi madre no iba a ser un buen ejemplo y por eso te llevó al bosque con Shezabé. Todo lo que hizo Emme fue para ir a buscar a su hijo al infierno.<br /> -Ella no estaba allí, Azmodeus me lo dijo.<br /> -No, ella estaba en Estigia.<br /> Nike se preparó para usar la espada una vez más.<br /> -Voy a ir a buscarla.<br /> -Ella estaba viniendo hacia aquí cuando me trajeron.<br /> -No puede venir sin la espada ¿o sí?<br /> -No lo sé…<br />De repente alguien llamó a la puerta. Jazir abrió, era su hermana, y tenía una capa de plumas negras. Era la misma Emme que Nike había conocido y tenía otra vez su ojo derecho, al igual que Jazir luego de volver de la muerte. Volver a verla le resultó muy extraño. Tenía un brillo en los ojos cuando la miró ¿eran lágrimas?<br /> -Vamos, no podemos perder más tiempo- dijo y cruzó el umbral de la puerta. Nike guardó la espada y la siguió.</span>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-42195561292437279152009-02-25T17:01:00.000-08:002009-03-12T15:21:18.771-07:00Fecha 6: 22/02/2009<div style="text-align: center;"><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhH64SkKAZD8NdCYHBoha4l2xZXL3vnpHHCcLipidzohhyphenhyphenJOdEHV8qnqjRWe8DK4TuhPgYlbRv_xXAj4xorhgCtRxC91M5JiqXBI9AIV1ILJcjlrlQpCSliSDUMZcHsa3z2LJ_-tm_F4zzD/s1600-h/Josper.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5306905213864833090" style="margin: 0px auto 10px; display: block; width: 400px; cursor: pointer; height: 287px; text-align: center;" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhH64SkKAZD8NdCYHBoha4l2xZXL3vnpHHCcLipidzohhyphenhyphenJOdEHV8qnqjRWe8DK4TuhPgYlbRv_xXAj4xorhgCtRxC91M5JiqXBI9AIV1ILJcjlrlQpCSliSDUMZcHsa3z2LJ_-tm_F4zzD/s400/Josper.jpg" border="0" /></a><span style="font-weight: bold;">Josper</span></div><br /> Cuando Zug llegó al puesto de frontera lo recibió la guardia, no eran más de cincuenta o sesenta granjeros con armas demasiado viejas o inservibles, y a duras penas sabían manejarlas. Los arcos y las lanzas los apuntaron. Zug bajó del caballo con las manos levantadas.<br /> -¿Qué pasa orco?<br /> -Venimos por pedido de Iskander.<br /> -¿Quién?<br /> -Torin…- corrigió.<br /> -¿Torin lo manda a usted y a estos muchachos?- dijo no muy convencido…<br /> -Sí.<br /> -¿Y tiene algo que lo confirme?<br /> -No.<br /> -¿Y le tengo que creer?<br /> -No, tampoco. Hay un ejército muy grande de Taurans, venimos a preparar las lomas para que no puedan atacar.<br /> -Ahora trabajamos con orcos…<br /> -Nos ganaron, somos esclavos- mintió Zug, era lo más fácil en esos momentos en donde cada minuto era importante.<br /> -¿Esclavos? Bueno, está bien ¡abran la puerta!<br /><br /> Apenas Vekna desapareció Nike le dijo a Lile:<br /> -Lile, a Josper.<br /> Pero al instante notó que ella estaba exhausta, ella le dijo que no podía llevarlas. Nike pensó que entonces debían apresurarse a seguir el trayecto más lento. Caminaron por la ciudad hasta llegar a una taberna. El tabernero limpiaba un vaso con su saliva y un trapo mugriento.<br /> -¿Sí?...<br /> -Necesito alquilar dos caballos- le pidió Nike.<br /> -Son veinticinco monedad de oro por cada uno- la estaba estafando.<br /> -Entonces no, gracias- y salió afuera. Escuchó que le chistaban, era el niño que había visto en el templo.<br /> -¿Sí?<br /> -Yo puedo conseguirles un caballo. Espérenme allá.<br /> Mientras esperaban Nike le dio tres monedas de oro a Shanna y le dijo:<br /> -Shanna, andá a conseguir otro caballo- si tenía una espada como esa era evidente que podía cuidarse sola.<br /> Esperaron unos minutos y el niño llegó con el caballo.<br /> -Es el caballo de mi padre, les servirá- Nike vio que estaba un poco viejo pero serviría. Le dejó al niño tres monedas de oro, él las guardó en su bolsillo como si fueran un gran tesoro. La vio venir a Shanna, tras ella venía un hombre siguiéndola.<br /> -Listo- le dijo a Nike entregándole al caballo por la brida, mientras el hombre le decía:<br /> -¿Cuándo nos volvemos a ver?<br /> Quizás después de todo no había sido una buena idea enviarla sola. Nike agarró de la brida a los dos caballos y las dirigió hacia las afueras. Lile y Shanna subieron en el mejor caballo, ella subió en el del niño y partieron a Josper, si todo iba bien llegarían al amanecer. No había nada que hacer, era la única forma de llegar, esperaban que Vekna no llegara primero.<br /><br /> Iskander, Burgen y Ejavra estaban ante un peligro mucho mayor. Frente a ellos un enorme gusano negro de treinta y cinco metros de largo y diez de alto los esperaba listo para comérselos. Iskander se sacó el anillo que ocultaba su apariencia dracónica y se preparó para el combate. Cargó con su lanza hacia él pero solo la sintió vibrar, no había llegado a penetrar la piel. Burgen tuvo más suerte, el primero de sus golpes le hizo mucho daño y vieron como de la herida del monstruo manaba un horrible líquido negro.<br /> El monstruo contraatacó con un cono de frío hacia Ejavra, ella lo esquivó y le impactó con la espada pero solo rebotó contra su piel y la fuerza la arrojó al suelo. El siguiente en arremeter fue Iskander que al golpearlo notó que tenía una especie de barrera que lo protegía. Pero esto no era nada para Burgen que al siguiente golpe le arrancó un pedazo de la armadura. El gusano chilló y se retorció de dolor, de la nueva herida brotó más líquido negro y varios cadáveres de cadormens.<br /> Ejavra comenzó a recitar una oración en dracónico y un haz de luz salió de sus manos, al impactar en el gusano éste decidió que era mejor escapar. Lo siguieron por los túneles pero era muy rápido. Por donde pasaba las piedras se deshacían y quedaba un halo de energía negra. Lo siguieron por detrás mientras varias sombras los atacaron pero no eran nada para ellos tres. Mientras Burgen e Iskander estampaban a las sombras contra la pared Ejavra mantenía el haz de luz.<br /> Llegaron hasta un lago interno, de allí salían varios acueductos que llevaban agua al otro lado de las montañas, hacia el desierto. No podían permitir que esa cosa envenenara el agua. Iskander frenó a la bestia arrojándole una enorme piedra usando telekinesis mientras Burgen lo atacaba por detrás, pero el gusano no iba a dejarlos ganar tan fácil. Burgen vio como la cabeza del bicho salía por la cola y abría sus fauces para tragárselo, y lo logró.<br /> Ejavra insertó la espada dentro de su boca para abrirle un paso al orco y arrojó un rayo de luz adentro, pero solo logró que su mano quedara atrapada y perdió la espada. A Burgen la armadura comenzaba a corroérsele por el ácido. Iskander le clavó la lanza en la cabeza y Ejavra pudo soltarse y se tiró para atrás. Burgen recibió un baño de ácido al clavar la espada, pero al segundo golpe logró tajear la piel del bicho desde adentro. Ejavra le arrojaba flechas de luz e Iskander lograba recuperar su lanza cuando vieron al orco quebrar al gusano y abrirse un paso para salir. Estaba bastante malherido, sin armadura y su espada lucía mellada. El gusano se achicó hasta desaparecer.<br /> -Necesitas un baño- le dijo Iskander y se dispuso a curar sus heridas, pero Ejavra lo detuvo, el ácido aún podía dañarlos así que primero usó una onda para purificarlo.<br /> -Creo que se le cayó- dijo Burgen y le entregó su arma.<br /> -¿Estás bien pequeña?- le preguntó Iskander.<br /> -Sí- de su mano surgió una luz celeste y se curó sus heridas.<br /> Cuando dejaron las cloacas y subieron nuevamente a la fortaleza se encontraron con el capitán de los warforged y el warlord orco que les informaron que una división de Taurans se había separado del resto y ahora se dirigían hacia allí. El capitán orco le entregó a Burgen una armadura negra como la que usaban los mirmidones, era mejor que la que tenía antes, más cómoda y flexible en las articulaciones, eso sí, era más pesada. Burgen pensó que eso a su amigo Témpano no iba a gustarle mucho.<br /> <br /> Mientras tanto no muy lejos de allí Zug buscaba los mejores lugares donde instalar los cañones y armar trampas, buscó la loma más alta y se puso a trabajar.<br /> -Muy bien orco, apunte hacia allá- Zug se dio cuenta de que este soldado no tenía ni idea de lo que estaba diciendo.<br /> -Sí, claro- le dijo pero colocó todo a su manera.<br /> -Señor ¿qué es esto?- le preguntó un recluta, era un niño.<br /> -Zug- dijo como única respuesta, estaba ocupado para esas charlas.<br /> -Porque estaba pensando… ¿y si le armamos una empalizada primero?- continuó.<br /> -Sí, se podría hacer algo así… ¿tenés palos?<br /> -Sí, y también puedo traer gente a ayudar. No se preocupe, yo me encargo- finalizó.<br /> A las dos horas volvió a aparecer el niño, lo acompañaban hombres portando madera y herramientas. Todos se pusieron manos a la obra para armar una empalizada delante de las armas de asedio.<br /> Zug recibió una carta de Torin que le informaba que iba a meterse entre las dos divisiones de Taurans, la que iba hacia Agún y la que se dirigía hacia el puesto de frontera, iban a impedir que se reagruparan.<br /> Zug vio como llegaban más unidades de reserva, bastante inexpertas y comenzó a instruirlos para que aprendieran a cargar los cañones, y así ayudar a los ingenieros. Entre todos armaron un sistema bastante rápido y eficaz.<br /> <br /> Llegaron a Josper a las seis de la mañana, pero Nike sabía que no había tiempo que perder, quizás Vekna ya se había hecho con la espada, pero tenía que intentarlo. Cabalgaron hasta su casa, todo estaba exactamente igual que como lo había dejado, como mucho había pasado un mes desde que salió de Josper, pero habían pasado tantas cosas que parecía mucho más.<br /> -Esta es mi casa, quédense acá y descansen, yo voy a investigar y vuelvo en un rato.<br /> En la ciudad había visto banderas que no eran de Josper. Mostraban un dragón sobre un fondo verde y un número doce en el centro. Se parecían a las banderas de Ejavra, pero no podía estar segura de si eran banderas de Garrath enemigas o no. Decidió ir hacia su destino: la casa de Lord Giberson. Si había alguien con mucho dinero capaz de comprar una espada como esa era él.<br /> La ciudad estaba militarizada y se encontró con varios soldados en el camino, cuanto más se acercaba a la zona residencial, más guardias había. Caminó directo hacia la casa de Lord Giberson sin detenerse, cerca ya del lugar vio unas pequeñas casas de seguridad, había cadormens allí, pero no eran de Athos, sino de Firehorn, incluso vio algunas caras conocidas. A su encuentro salió un fusilero. Él le preguntó que deseaba allí.<br /> -Lord Giberson contrató mis servicios.<br /> -Ah bien, espere un momento aquí ¡Eh tú!- le llamó la atención a un recluta- acompáñala al palacio.<br /> -Sí, señor.<br /> El niño de no más de quince años la miró embobado pensando que el que tenía dinero podía conseguir lo que quisiera, ni sacó las cuentas de cuantos años de vida trabajando incansablemente serían necesarios para pagar sus servicios.<br /> -Hola- intentó sacarle conversación- yo soy un campesino ¿usted… de que trabaja?<br /> -Hola- le respondió pero en su cabeza solo había un objetivo, además no era muy difícil adivinar de qué trabajaba, tenía dos cimitarras colgando de la cintura y una armadura bastante llamativa -Soy bailarina- le dijo.<br /> -¡Ah! ¿Bailarina de taberna o de teatro?<br /> -Solamente bailarina.<br /> Cuando llegaron al palacio el niño le dijo:<br /> -Un gusto conocerla.<br /> -Gracias, un gusto.<br /> Cuando se acercó por la puerta de atrás la interceptó un guardia.<br /> -Señorita ¿a qué se debe su visita?<br /> -Vengo a ver a Lord Giberson.<br /> -¿De parte de quien?<br /> -Nike<br /> -¿y por qué asunto es para ir adelantándoselo?<br /> -Prefiero hablarlo personalmente.<br /> -El señor ahora está durmiendo, ¿no prefiere venir cerca del mediodía?<br /> -Estoy de viaje ¿podría esperarlo aquí?<br /> -Está bien, la llevaré a una habitación.<br /> Cruzando los pasillos llegaron a la sala principal, allí había dos hombres bastante desalineados, pero vestidos con ropas lujosas, Nike se dio cuenta de que eran bárbaros de Taras y los escuchó decir:<br /> -Esa no es…<br /> -Sí, es ella.<br /> La habían reconocido, pero eso no era importante por el momento, tenía que encontrar esa espada cuanto antes. Desde que había entrado en Josper había sentido una presencia extraña, ahora sabía que provenía de esa casa, algo había allí en las profundidades. La condujeron a su habitación, pero Nike siguió lo que tenía planeado, ni bien se marchó el hombre se introdujo en el mundo de las sombras.<br /><br /> Iskander comenzó a organizar la formación sobre la muralla. Burgen llamó a Témpano para reunirse a los orcos. Témpano lo olió.<br /> -Muchacho, vamos- le dijo y con mucho cuidado se sentó sobre la grupa, Témpano se acomodó, no parecía afectarle el peso extra de la armadura.<br /> Los Taurans estaban muy cerca y cuando estuvieron a rango los bombardearon con las catapultas. Salió la caballería orca con Burgen a la cabeza y detrás la línea de warforged. El capitán orco le dio su cuerno a Iskander antes de salir.<br /> -Creo que eso suena parecido a cuando entro en furia- le dijo Burgen.<br /> Cuando Iskander vio llegar a los kodos pidió que reacomoden las catapultas. A lo lejos vieron a acercarse a Goran con la caballería de Haradim que entraba por detrás de los kodos y los hacía caer uno a uno. Burgen se unió a la matanza junto a al caballería orca.<br /> -Cambio de planes, vamos a salir- dijo Iskander- ¿podés formarlos en posición de cuño?- le pidió a Uria.<br /> -Dame dos minutos.<br /> Mientras Iskander mandó a un mensajero a Burgen para avisarle del cambio de estrategia. Iba a salir con lo que quedaba del escuadrón orco. Cuando abrieron las puertas Iskander hizo sonar el cuerno y todas las reservas salieron de la ciudad. En cuarenta minutos ya no había más batalla. Los Tauran como última defensa los bañaron a flechas, Burgen ordenó a los mirmidones que se ubicaran detrás de los escudos de los warforged, aún así algunos cayeron.<br /> Eran las cinco de la mañana, Iskander vio como los últimos Taurans se rendían y ponían las rodillas en tierra, las manos detrás de la cabeza. Se dispuso a rematarlos pero Goran lo detuvo.<br /> -Iskander, no somos como ellos.<br /> Así fue como los tomaron prisioneros.<br /><br /> Del otro lado Zug vio indecisión en los Taurans que no sabían si atacar allí o retroceder, y el orco aprovechó la oportunidad. Todos los cañones fueron disparados a la vez, la primera línea se dispersó y dieron de lleno en la segunda que quedó diezmada.<br /> -¡Recargar!- ordenó el orco.<br /> Goran, Torin, Burgen e Iskander se unieron para ir a aniquilar el otro frente. La batalla solo duró seis horas en total. Muchas Taurans se suicidaron, los demás fueron tomados prisioneros. Solo unos dos mil Taurans habían sobrevivido la masacre.<br /> Zug miraba sentado arriba de su cañón.<br /> -Bastante bien orco- le dijo el capitán.<br /> -Sí- fue su única respuesta. Por suerte su intervención había sido corta.<br /> Iskander vio que a la distancia no se veían barcos, se preguntó que habría sido de Shezabe.<br /> -Como siempre un gusto volver a verlo- le dijo Burgen a Goran.<br /> Iskander saludó al warlord orco y volvió a decirle que firmarían el tratado para otorgarles las tierras al sur, mientras Burgen saludaba al capitán de los warforged. Iskander buscó a Ejavra, le curó las heridas recibidas en combate y le preguntó:<br /> -¿Vos seguís al servicio mío?<br /> -Sí…<br /> -Preparate porque vamos a ir al Norte.<br /><br /> Nike comenzó a recorrer las habitaciones una por una, y comenzó a bajar a las profundidades, llegó a una cueva bastante rústica, en el suelo parecía haber un hilo de luz azulada. Lo siguió, pero con precaución. En un momento el pasillo se bifurcó, el hilo seguía hacia la izquierda. Lo siguió un trecho más y vio como se despegaba del suelo e iba a dar a una enorme mata de pelo. No sabía que podía ser esa cosa, así que retrocedió lentamente, pero pisó algo y el monstruo se levantó. Era un enorme león de fuego. Corrió por el pasillo sin mirar atrás y escuchó como la criatura iba ganando distancia, había salido del mundo de las sombras y se dio cuenta de que no sabía como volver, había estado atravesando paredes y ahora estaba perdida.<br /> Una pared se interpuso en su camino y volvió a entrar al mundo de las sombras, así lo perdió. Había entrado al hall principal y lo vio a Lord Giberson como si fuera una llama, a su cintura brillaba un haz de luz plateada. “Maldito” pensó, la tenía con él en su poder. Estaba con el criado que la había atendido cuando llegó. No pareció que él la hubiera notado y se quedó a escuchar lo que decían.<br /> -Hemos triunfado, los Taurans fueron vencidos.<br /> -Muy bien, tendremos que acelerar las cosas entonces.<br /> Nike se preguntó si sus amigos estarían cerca de la ciudad, pero no podía arriesgarse tenía que intentarlo. Cuando el criado se fue se acercó a Lord Giberson por detrás para intentar arrebatarle la espada, pero cuando salió del mundo de las sombras para hacerlo él la vio y la frenó tomándola de la muñeca. Nike sintió que el lugar donde le estaba apretando le ardía como el fuego. Intentó sacar la cimitarra, pero él la frenó con su otra mano como si nada y calentó el arma a tal punto que Nike tuvo que soltarla.<br /> -¿Puede soltarme por favor?- le dijo ella, no podía hacer más que pedirlo amablemente. Él la soltó y le dijo:<br /> -Nike ¿A qué debo tu visita?<br /> -Venía buscar algo… pero ya no importa- él miró la espada y sonrió. Nike sabía que ya no iba a poder salir de allí.<br /> Él le tomó la mano y se la besó, ella no pudo resistirse.<br /> -A ver… ¿qué es esto?- dijo él.<br /> -¡¡¡No!!!- gritó Nike pero no pudo hacer nada, él le arrebató el anillo que la unía a Goran, y eso le dolió más que cualquier golpe que pudiera haberle propinado.<br /> -¡Maldito!- le gritó pero ya todo era inútil, su propio cuerpo no respondía sus órdenes.<br /> -¿Acaso no te acordás lo que te dije hace unos días?<br /> Ella recordaba que el día que había estado allí por primera vez, el día que había conocido a Leconte, le dijeron que no volviera a aparecer por ese lugar.<br /> -Te dije que no volvieras…- dijo y le acarició el rostro, y ella no pudo hacer nada por impedirlo.<br /> Pasaron tres días y Nike estuvo en un mundo entre el sueño y la realidad, no estaba dormida, pero tampoco estaba despierta. A medida que pasaba el tiempo notó que la marca que Lord Giberson le había dejado en la muñeca se extendía ahora por todo el brazo. Líneas rojas comenzaron a cubrir todo el lado de su cuerpo que había sido marcado, las venas de su ojo sobresalían horriblemente. Comenzó a ver monstruos y la posesionó la paranoia. Con sus cimitarras golpeaba una y otra vez a esas horribles criaturas del infierno. Lord Giberson fue a verla al tercer día y ella instintivamente intentó pegarle con una de las cimitarras pero él la derritió sin problema.<br /> -Siempre quise algo tan perfecto para que me acompañe- dijo él y la besó. Nike vio el infierno a su alrededor pero lo peor fue que ese beso le había gustado. Ahora además le atraía Lord Giberson. Poco quedaba ahora de la Nike que quería luchar por defender Haradim. En el fondo su alma estaba llorando.<br /><br /> Cuando se sentaron a descansar mientras todos festejaban el triunfo Iskander le dijo a Goran:<br /> -Voy a ir a Ellios a buscar a Jaria, por favor dejá a Aiko en un barco que la lleve a Hatori- acto seguido le entregó la carta de Sviden para que la leyera. Goran se rió de la situación a su vez le prometió:<br /> -La vamos a sacar de acá, suerte.<br /> -Todavía no me fui.<br /> -Cuando te vayas, pasá por Lessender.<br /> Burgen le preguntó a Goran por su padre y él le dijo:<br /> -Tu padre era una persona con ideales, pero vos lograste algo que él no, vivir entre humanos.<br /> -Todavía no lo logro.<br /> -Falta poco…<br /> -¿Goran no va a llamar un poco la atención?- dijo señalando su nueva armadura, después de todo tenían que entrar a Josper.<br /> -Ustedes son héroes…<br /> -¿Te enteraste de lo que había debajo de Agún?<br /> -Sí<br /> -No fue fácil matarlo<br /> -Lo sé, dicen que esa cosa se comió un dragón.<br /> Iskander redactó el documento que entregaba las tierras al sur de Gaia a los orcos. Todos los capitanes lo firmaron, iba a entregarlo en Josper para que dieran su última autorización. Al poco tiempo llegó al campamento un emisario de Josper que les dijo que Denova comandante de la 12º legión de Garrath los iba a recibir.<br /> -Lamain Ejavra de la 22º legión acepta la invitación- aunque no parecía muy dispuesta.<br /> Cuando se hubo ido el emisario Iskander le preguntó:<br /> -Aclarame una cosa… dijiste que había una pica entre las legiones… ¿no se levantan en armas no?<br /> -No todavía.<br /> -¿y por qué vienen acá a pelearse entre ustedes?<br /> -Nosotros venimos a acompañar a V’nef Aradiel, el hijo del regente de Garrath.<br /> -¿y él está acá?<br /> -En Imerion.<br /> -Con Sviden. Está criando un nuevo emperador de Haradim.<br /> -Esperemos que no- dijo Goran- si está acá es porque le molesta a su padre.<br /> Goran, Burgen y Zug estaban deliberando por dónde iban a empezar a buscar a Nike cuando entró un guardia y le entregó un sobre a Goran.<br /> -General, le mandan esto.<br /> En realidad Goran no tenía ningún cargo militar según los nombramientos de Sviden, obviamente no podía porque para el mundo él estaba muerto, y no solo eso, había sido un caballero de las sombras. Pero eso no impedía que los soldados le dijeran así igualmente.<br /> El sobre tenía un sello que Goran no alcanzó a descifrar. Cuando tocó el sobre éste le dio como una descarga eléctrica.<br /> -¿Reconocen esto?- les preguntó y le pasó el sobre a Zug.<br /> Burgen le hizo una seña al soldado para que se vaya, él sabía muy bien qué era ese símbolo.<br /> -Es el sello de Vekna- dijo en voz baja. Lo había visto cuando ella había intentado invocar al señor de la muerte.<br /> Cuando Zug abrió el sobre rodó un anillo, él lo levantó y se lo pasó a Goran: -¿Lo reconoce?- le preguntó. Los ojos de Goran se llenaron de lágrimas, era el anillo de Nike.<br /> -No te preocupes, la vamos a encontrar- le dijo Burgen.<br /> El orco salió de la habitación y le preguntó al mensajero.<br /> -¿Quién te dio esto?<br /> -Maximillian, un recluta.<br /> -Muy bien, vamos a ir a ver a este niño. Ya que Sviden me nombró General vamos a usarlo.<br /> Goran se dispuso a marchar con los dos orcos, iba sin armadura, los ojos le brillaban de un extraño color dorado. A Burgen no le sorprendió, después de todo él ya lo había visto desplegar sus alas.Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-12582445617690567282009-02-20T04:48:00.001-08:002009-02-20T04:51:18.252-08:00Fecha 5: 15/02/2009<div align="center"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgCV4iUtdNjaINHSZ1wdjlMaPGQX50LOkeWAQCp5eAYILf9llX4sEVGpaRLY3VZ2rRnZWgATBPaVQpmB-r8n43HiAc5_z6m0c3EWGkqvB3ge3oWFnpL90zuHjYkaEe5OaaJxAtdhgqfoHCk/s1600-h/stgernautxd5.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5304861189015947410" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; CURSOR: hand; HEIGHT: 273px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgCV4iUtdNjaINHSZ1wdjlMaPGQX50LOkeWAQCp5eAYILf9llX4sEVGpaRLY3VZ2rRnZWgATBPaVQpmB-r8n43HiAc5_z6m0c3EWGkqvB3ge3oWFnpL90zuHjYkaEe5OaaJxAtdhgqfoHCk/s400/stgernautxd5.jpg" border="0" /></a><strong> St. Gernaut</strong></div><div align="left"><br /></div><div align="left"><strong></strong></div><div align="left"> </div><div align="left"><strong>Firehorn – Un mes antes del inicio de Haradim I<br /></strong><br />Emme y Broker estaban charlando, y lo que comentaban sería de relevancia para los hechos futuros, pero ¿Qué significó esta conversación? Eso nuestros héroes no lo saben aún.<br />-No estoy convencida de lo que vamos a hacer…- le dijo Emme.<br />-¿Cómo que no estás convencida?<br />-No sé si es lo mejor…<br />-Tenemos que ir a Nuredum, ahora.<br />En Nuredum los recibió Kariel que los llevó muy debajo de la ciudad. En las profundidades los recibió una mujer con un parche en el ojo y una sola mano. Estaba sentada a una mesa, junto a un ser de piel roja y cuernos limados. Emme se quedó en la puerta y dudó, pero Broker la tomó de la mano y ella ingresó al recinto con él.<br />-Señor, ellos aceptaron la llamada.<br />-¿Saben las responsabilidades que van a tener?<br />-Sí señor- respondió Broker.<br />-Muy bien, usted servirá a Asgon, como su avatar en la tierra.<br />Y Vekna le entregó un anillo. Broker se lo puso y al instante unas horribles convulsiones lo azotaron. Cuando culminó él se levantó de suelo, con un brillo extraño en los ojos.<br />A Emme le tocó la cabeza, sacó una piedra negra y la insertó en su frente, mientras Emme lloraba. De ella surgió un aura negra con vetas plateadas, estaba hecho. Emme lo miró a Broker y le dijo:<br />-¿Contento? Listo, podemos empezar.<br /><br /><strong>Rittardast – Presente.<br /></strong><br />Al llegar a la fortaleza vieron a lo lejos llamas en la dirección de Aznor, a lo lejos Armellas ardía y las fuerzas de Haradim regresaban victoriosas con Torin a la cabeza, no habían pasado los seis días, y no habían respetado la tregua que Iskander había pactado con los orcos.<br />Zug y Nike se encaminaron hacia el ejército mientras Iskander iba hacia Aznor.<br />-¿A dónde va?- le preguntó un guardia.<br />-A buscar a mi esposa (1)<br />Burgen lo vio y se dispuso a seguirlo, pero Anya ya lo había previsto y se abrazó a él. Le preguntó a donde iba y luego de que el orco respondiera que se dirigía hacia Aznor con su capitán, ella decidió seguirlo. Subió a Témpano detrás de él y ambos salieron tras Iskander.<br />Zug se dirigió hacia Torin. Nike lo siguió y cuando llegó al inicio de la fila le apuntó al enano al cuello con su cimitarra.<br />-No respetaron la tregua- le dijo.<br />Milo le apartó la cimitarra, le dijo que mirara hacia Armellas, ella lo hizo y no vio ningún cadáver allí.<br />-No rompimos la tregua. El general nos vino a ver, nos propuso simular una batalla en el paso, no esperábamos una actitud tan civilizada por parte de los orcos.<br />-¿Simularon una batalla?<br />-Sí, el paso es nuestro otra vez, los orcos retrocedieron, dijeron que no estaban de acuerdo con esta guerra. Llegamos a un pacto, ellos van a proteger los pasos también desde el otro lado.<br />Aún así Nike lejos estaría de confiar en Torin. Zug fue hablando con el enano, Nike solo seguía camino a su lado y lo dejó hablar a él. Zug le dijo que había que reunir a los generales para volver a planear los pasos a seguir.<br /><br />Burgen llegó junto a Iskander, él le pidió que vea adentro de la casa con clarividencia, pero el orco estaba impedido de hacerlo a igual que él. Entró apuntando con la lanza y el escudo preparado para un eventual ataque. Ya no podía estar seguro de nada, Emme podía estar allí.<br />La vio salir a Aiko de la casa, los ojos brillando con una luz verde agua, jamás la había visto así, a su paso crecían las flores.<br />-Aiko, soy yo Iskander.<br />Al escucharlo ella se desmayó, él la sostuvo para que no cayera y la subió detrás de su caballo. Pero había alguien más adentro de la casa y no era Amelia que había salido poco antes. La vio salir a Shezabe, las venas de su cuello sobresalían extrañamente.<br />-¿Dama Shezabe? ¿Se encuentra usted bien? ¿Qué pasó?<br />-Mejor vayamos a la ciudad.<br />-¿Y Thelmos y Tolfas donde están?- esta pregunta solo tenía la intención de averiguar si se trataba de ella en realidad, o no.<br />-Descansan en paz…<br />-Es bueno saber que es usted- le dijo Iskander y bajó la lanza.<br />Burgen frenó el caballo de Amelia interceptándola con Témpano, ella cabalgaba con el niño y le dijo que debían regresar a Rittardast.<br />-¿Se encuentra bien?<br />-Podemos… Necesito llegar a Rittardast.<br />-Yo la escoltaré.<br />Shezabe tomó la forma de un águila y los siguió.<br /><br />Lile subió a la terraza de la fortaleza, a lo lejos vio venir a Iskander, Burgen y Anya, con ellos la reina Amelia, Aiko y Daisuke. Por el otro lado las tropas de Torin junto a Nike y a Zug. Pero había algo más llegando a la fortaleza de los jinetes.<br />Alized estaba con Lile pero no llegaba a ver por encima de la pared de la muralla y le dijo:<br />-No veo…- mientras se ponía en puntas de pie.<br />Lile se la subió al hombro y ella en un común muy limitado le habló.<br />-Banderas, son las banderas de mi familia.<br />Hacia el sur Lile vio un escuadrón, las armaduras que brillaban a la luz del sol, estaban comandados por una mujer de rojos cabellos. Lile no estaba segura pero parecían ser unos veinticinco mil soldados.<br />-¿Eso es bueno o malo?<br />-Eso es muy bueno- le dijo la niña.<br />-Se junta toda la familia- dijo Lile viendo que todos iban hacia allí.<br />-Parece que sí- le sonrió Alized- Viene mi prima.<br />-¿Está con el ejército?<br />-Es la general.<br />Lile vio que el pequeño contingente de Iskander y el ejército con Torin a la cabeza llegaban así que bajó a la plaza para recibirlos.<br />-No vuelvas a hacer eso.<br />-¿Qué?<br />-Trajiste a tres personas. No lo vuelvas a hacer- dijo refiriéndose al momento en que Lile resucitó a Luneth, a Anya y a Milo. Su cabello había quedado totalmente blanco después de esa acción, si bien muy bondadosa, para nada prudente.<br />-Recordaré que es parte de los designios de la naturaleza. Pero ahora tengo otra cosa que decirte- hizo una pausa y dijo- Viene un ejército.<br />-¿Qué? ¿Un ejército?<br />Lile le señaló hacia el sur, Nike subió rápidamente las escaleras y vio a lo lejos. El cuadro era impresionante, soldados emplacados en perfecta formación dirigiéndose hacia allí, las armaduras brillaban con los rayos del sol. No conocía ese estandarte.<br />-Dice Alized que son de los suyos.<br /><br />Nike vio aterrizar un águila en la torre cuando la misma se convirtió en Shezabe le apuntó con la cimitarra al cuello. (2) Ella se acercó adrede y Nike vio como un hilo de sangre bajaba por su garganta, aún así no apartó la cimitarra.<br />-No soy Emme- le dijo ella. Apartó la espada, le agarró su mano y de repente Nike se vio transportada a Estigia, su madre le estaba mostrando una imagen de lo que había pasado allí poco después de que le clavara la cimitarra a Emme en el pecho.<br />Emme entró al plano de Estigia, cuando su hermana Shezabe estaba a punto de cruzar el río con el barquero y la empujó hacia atrás, tomando su lugar.<br />-¿Emme te salvó?- le preguntó Nike confundida cuando volvió a la realidad. No podía creerlo.<br />Shezabe asintió.<br />Nike la miró a Lile y ella le dijo tranquilamente:<br />-Es ella.<br />Era lo único que quería escuchar, en su amiga Lile sí confiaba, era una de las pocas que quedaban en ese lugar en quien podía confiar.<br />Enfundó la cimitarra y abrazó a su madre, pero ese abrazo frío no se parecía en nada al abrazo que le había dado en el bosque cuando la consolaba por la muerte de Selene, y Nike dudó una vez más. Aún así pensó que de haber sido Emme muy probablemente ella ahora estaría muerta. Pero entonces… ¿quién la había abrazado en el bosque? De lo único que estaba segura era que no podía ser esa Shezabe, ese abrazo lo demostraba. ¿Entonces quien había sido? Se quedó pensando, pero no dijo nada al respecto.<br /><br />La legión de Garrat cruzó la puerta, Alized llegó corriendo hasta su prima y la abrazó. Ella la levantó en brazos.<br />-¿Con quien tenemos el gusto?- preguntó Iskander.<br />-Ella es mi prima Ejavra- le dijo Alized.<br />Cuatro guardianes custodiaban a Ejavra, estaban totalmente cubiertos por los cascos y las armaduras. Burgen la miró como pensando: “¿y vos quién sos?” y varios opinaban lo mismo.<br />-Esto es para usted- le dijo Ejavra y le entregó un sobre al capitán.<br /><br />En el sobre rezaba: <em>“No hay respuestas, pero las habrá”<br /></em><br /></div><div align="left"><br /></div><div align="right"><br /><em>14vo día de Firehorn, 60DBN<br /></em></div><div align="left"><br /></div><div align="left"><br /><em>Capitán Iskander, hijo mío:<br />Antes que nada debo pedirte disculpas por todo, por la vida que has vivido y por lo que te toca vivir ahora. Escribo esta carta junto con el pedido de arresto de S.M. Aiko Tamasaguro. Si te conozco como creo sé que no permitirás que la arresten y debo decirte que es un error. Nadie más que yo desea cuidarla y protegerla de los miles de enemigos que los acechan.<br />A esta altura ya habrás hablado con Kariel y él te habrá contado una historia bastante convincente de cómo todo fue un plan nuestro para gobernar Haradim. Aunque cierto en parte, no todo es verdad. Haradim era, o es, un hombre despreciable, sediento de poder y venganza, que solo deseaba hacerse del trono de Garrath y haría cualquier cosa por conseguirlo. Sí lo ayudé, sí fui su mano derecha durante muchos años, pero mi intención fue siempre mantener la justicia y evitar que las cosas se salieran de control. No lo logré y aquí estamos, en una guerra que no podremos ganar, contra un enemigo que no conoce límites. Por eso te pido un último favor.<br />En el Norte, más allá de todo lo conocido, se alza la cárcel de Ellios, erigida por los primeros Elandrines para contener a Toldoth, el corrupto, el señor de la muerte que creó Stigia. Hoy esa cárcel es la morada de la última esperanza del reino y quizás del mundo. Jaria, la última de los dragones está atrapada ahí. Reúne a tu gente de confianza, cruza el desierto de hielo y rescata a la Reina, tu madre.<br />No tienes por qué creerme, solo te he mentido toda la vida. Solo esta vez quiero que estas palabras sean sinceras, te crié con todo el amor posible, te eduqué para que distingas la verdad, para que seas libre en tus decisiones y para que tu espíritu no tenga manchas. Hasta ahora no he hecho más que fallarte y enviarte a la muerte una y otra vez. Esta no será la excepción.<br /></em><br /></div><div align="left"><br /></div><div align="right"><br /><em>Con todo mi afecto<br />Lord Sviden, regente de Haradim.<br /></em></div><div align="left"><br /></div><div align="left"><br /><em>PD: La portadora de la presente es un vastago del dragón y es confiable.<br />PD2: Por lo que más quieras no vayas a las profundidades de Nuredum y si lo haces no creas ni una palabra de lo que oigas. No eres un elegido, ni tú ni nadie.<br />PD3: Mis saludos a Goran y a Nike y dile a Lile que lamento sus pérdidas. </em><br /><br />Iskander terminó de leer al mismo tiempo que Burgen se quitaba la insignia de Haradim y le decía a un soldado:<br />-Fúndala.<br />Anya lo miró terriblemente enfadada.<br />-¿Qué estás haciendo?<br />-No quiero pertenecer a algo que no soy.<br />-Esa insignia representa nuestros ideales, los ideales no se cambian.<br />-No los cambiaré- le respondió el orco- pero no voy a llevar esa insignia.<br />-¿Entonces?<br />-No quiero llevar ese símbolo.<br />-Ese símbolo te hace más persona.<br />-¿Un símbolo te hace más persona?- dijo él aún más enfadado.<br />-Ante el mundo sí.<br />Iskander se sacó su insignia también:<br />-Funda la mía también- y guardó la carta de Sviden.<br />-Entonces ¿qué hacemos con esto?- dijo el orco.<br />Burgen sacó la piedra que le había dado Vekna y Lile se la pidió, cuando bendijo la piedra ésta se deshizo. Esa cosa era metal de Estigia. Lile les pidió a todos que se reunieran y dejaran las piedras en el suelo y los purificó a todos.<br />Lile miró hacia Firehorn, estaba guarnecido por soldados warforged de Sviden. Le avisó a Iskander que ese paso estaba protegido.<br />-Entonces solo quedan los taurans en el sur- dijo Zug.<br />-Tenemos que preparar un ejército para limpiar el sur- dijo Iskander- ¿Usted viene a darnos su asistencia?- le preguntó a Ejavra.<br />-Quedo a sus órdenes.<br />-¿A qué vinieron?<br />-A reforzar el ejército de Torin.<br />-¿Torin sabía que ustedes venían?- le preguntó Nike, aún desconfiaba de todos y cada uno.<br />-No, nosotros íbamos a estar del otro lado del paso.<br /><br />Un nuevo consejo de guerra tuvo lugar. Burgen ya estaba harto así que decidió ir a bañarse. El pobre hombre de Rittardast que ya había tenido que sufrirlo una vez cuando lo vio lo miró resignado.<br />Iskander le dijo a Uria que su comandante le había pedido las tierras al sur de Gaia y que por su parte se las podían quedar. Esto previa autorización de Alaia, la centauro. El puerto de Bloombay estaba rodeado de Taurans. “Toda flota tiene una desventaja contra tornados” dijo y le pidió a Shezabe que se encargara del asunto. Lile vio a una cadormen en el Norte junto a Alessia y a Luneth. No la conocía.<br />-¿Dónde está ese orco?- preguntó Iskander.<br />-Voy a buscarlo- dijo Nike.<br />-¿A dónde vas?- le preguntó Goran.<br />-A buscar a Burgen…<br />Pero Goran envió a un soldado a buscarlo en su lugar. (3)<br />-El problema de los Taurans es el alcance que tienen con esas armas- dijo Iskander.<br />-Y son uno de cada tres- agregó Goran.<br />-Bien Zug, tendrás que ir a Josper y preparar una defensa.<br />-¿Y cómo es este paso?- preguntó él.<br />-Es un puente sobre un río.<br />-¿Y si volamos también este paso?<br /><br />Lile había sentido una extraña vibración. Vio como los marauders empezaron a salir de Nuredum y la tierra comenzó a temblar.<br />-Lile, ¿Qué pasa?- le preguntó Nike.<br />-Nuredum.<br />-¿Qué está pasando allá?<br />-No sé, tengo miedo de ir.<br />-No te preocupes, yo voy con vos.<br />Lile le mostró lo que estaba viendo, era muy extraño, miró por la ventana y en dirección a Nuredum no parecía haber nada, ¿sería eso una visión del futuro?<br />-Iskander- lo llamó Nike, pero él no le hizo caso ocupado en el armado de la estrategia, entonces le dijeron a Burgen.<br />-Goran, por qué mejor no escuchan lo que acaba de decir Lile.<br />-¿Recuerdan a la diosa de la muerte? Tiene una ciudad llena de no muertos- dijo ella.<br />-Va a sacar al Jurguenot sino hacemos algo- dijo Nike.<br />-Pero nuestro problema ahora son los Taurans, no podemos hacer todo a la vez… Si esa cosa tiene patas se puede caer.<br />-Sí, pero si son patas cortas cae cerca- dijo Zug.<br />-Vekna es una diosa, se supone que es la regente de la muerte, pero si existe realmente es alguien que tiene poderes más allá de lo humano- dijo Ejavra.<br />-Yo soy orco- dijo Zug.<br />-Yo también- agregó Burgen.<br />-¿Qué quiere Vekna?- preguntó Nike- ¿Para qué quiere traer al Jurgenot?<br />-Debe estar buscando la espada de Zariel.- dijo Ejavra.<br />-¿Y si quiere una espada por qué no se la entregamos?<br />-Porque es una espada celestial y ella es la diosa de la muerte.<br />-Entonces vayamos a buscar esa espada, antes de que ella la encuentre primero.<br />-Un lugar purificado, debe estar en St. Gernaut- dijo Lile.<br />-¿Y qué estamos esperando? Vamos Lile- se apresuró Nike.<br />Y junto a ellas fue también Shanna. Las tres chicas se encargarían de buscar el arma que tanto quería Vekna. (4)<br />A la reunión se sumó Luneth quien les informó que habían recuperado Lessender. Iskander aprovechó para preguntarle:<br />-¿Qué formas hay de patearle el trasero a Vekna?<br />-Solo Kuman puede hacer eso.<br />-¿Y quién demonios es Kuman?<br />-La mano derecha de Vekna.<br />-¿Y cómo podemos ir a hablar con él?<br />-Yendo a Lennerkaus. Pero no tienen forma de llegar allí rápido.<br /><br />A Burgen le encomendaron la tarea de unirse a los orcos del otro lado de las montañas, así que se reunió con su líder.<br />-¿Sabe quien soy?<br />-Sí, Burgen hijo de Krugen.<br />-Le devuelvo la cortesía que tuvo con nosotros- le dijo y miró a Uria. Luego le entregó el mapa donde indicaba la estrategia a seguir, todo escrito en orco.<br />-Quería saber si disponemos de su ayuda- le preguntó.<br />-¿Nosotros que seríamos?<br />Burgen le señaló la línea en el mapa.<br />-Tendríamos que tomar Agún.<br />Y Burgen junto a Témpano fueron junto al capitán orco que montaba un gigantesco jabalí.<br />Cuando pasaron por Nuredum los wargos se pusieron nerviosos. Tenían miedo de ese lugar. Al llegar a destino, los recibieron las flechas de los cadormen.<br />Mientras Zug llegaba al lago, planeaba poner bombas en él con barriles para estabilizarlas, de eso se encargó junto a sus ayudantes.<br /><br />Nike, Lile y Shanna aparecieron en St. Gernaut. La ciudad estaba en llamas y todo era un caos. A la estatua de St. Cuthberth le faltaba la cabeza. La gente se había sublevado, se estaba vengando de todas las atrocidades cometidas en ese lugar en nombre de a diosa. Muchos habían aprovechado para saquear los lugares santos.<br />Corrieron hacia el altar principal a buscar la espada. Un niño pasó corriendo frente a Nike y ella lo agarró de la muñeca:<br />-¿Dónde está la espada?<br />-¿Qué? Yo no sé, alguien se la habrá robado.<br />Vio que había una pequeña puerta detrás del altar, estaba abierta. Vio a Vekna que había ido a buscar lo mismo que ellas.<br />-Si buscan la espada aquí no está, deberían buscar en algún lugar donde haya más dinero.<br />¿Habían vendido la espada? Eso no le sorprendía. Vekna desapareció y antes de marcharse Lile dejó ese lugar santificado.<br /><br />Iskander habló con Aiko antes de marchar nuevamente hacia el sur. Se sorprendió cuando ella le dijo que Emme les había dado la libertad. Ahora cada una de las cuatro naciones iban a tener su propio gobierno, Sviden no iba a regirlos más.<br />-Me conmovió, yo no sabía lo que quería ella.<br />-¿Qué quería?<br />-Emme quería estar con su marido original.<br />-¿Broker?<br />-No, Balder.<br />-Que “casualidad” se llama igual que mi padre…- pero él prefirió no saber nada más al respecto ¿su padre había estado con Emme?<br />-¿Vos estás bien?- le preguntó.<br />-Sí, ¿cómo está Daisuke?<br />-Está corriendo por el castillo ¿qué te pasó en los ojos?<br />-No soy Aiko Tamasaguro.<br />-No entiendo ¿entonces quién sos?<br />-Según las viejas de mi pueblo a mí me tocó el don de hablar con los espíritus, ellos me dan poderes- luego agregó- Yo firmé los documentos, ahora el reino va a quedar a nombre de Goran, para que instale una democracia. (5)<br />-Ahora debo irme, cuando estés bien te vendré a buscar.<br />-¿Vas a venir conmigo?<br />-Si la situación lo permite lo haré.<br /><br />Iskander se encontró con un scout orco que le dijo que el campamento Tauran era mucho más grande de lo que esperaban y que los cadormen habían tomado Agún. Así Iskander partió con los warforged a unirse a Burgen, mientras el resto del ejército siguió camino hacia el sur. A lo lejos vio a los Taurans cargar contra los cadormen y pensó “Mejor que se maten entre ellos”. Pero también le dispararon a su contingente.<br />-¡Quiero hablar con su líder ahora!<br />Un cadormen se asomó a la muralla.<br />-¿Quién es?<br />-¡Iskander de Lessender!<br />Pero los cadormen continuaron disparando, se cubrieron con los escudos y comenzaron a ingresar a la ciudad. Pidió hablar nuevamente con su líder y le señalaron una torre. Camino allí vio a Orión muerto y empalado en una plaza. Buscó el aura más poderosa de ese lugar y la encontró abajo, decidió tomar por las cloacas.<br />-No vengo a matarlos aparezcan- dijo Iskander, pero no obtuvo respuesta.<br />Burgen sentía que algo andaba mal.<br />-¿Doy la orden?- le dijo el capitán orco.<br />-Abran la maldita puerta. Como sea.<br />Burgen cargó sobre sus hombros a Ejavra y ambos se dirigieron a buscar a Iskander.<br />-Siempre tardás una barbaridad de tiempo- le dijo Iskander- odio profundamente a casi todos los cadormen.<br />-¿Qué ocurre?<br />-Parece que abajo están llamando a alguien.<br /><br />Y así culmina una aventura más, Iskander y Burgen yendo a las profundidades de Agún. Burgen ya conocía las cloacas, pero Iskander jamás había pisado ese lugar. Los acompañaba Ejavra, no por decisión propia, el orco la había llevado sobre sus hombros hasta allí.<br />Nike, Lile y Shanna estaban en búsqueda de la mítica espada de Zariel que desapareció de St. Gernaut, no tenían idea de que pudo haber sido de ella, aunque Nike parecía saber donde empezar a buscar. Si había alguien con el suficiente dinero para adquirir un objeto como ese era Lord Giberson, tendría que regresar a Josper. Lo importante era que evidentemente Vekna tampoco la había conseguido, tenían que encontrarla antes o no podrían hacer nada contra ella y su deseo de “ir al cielo” para cumplir quien sabe que odioso objetivo.<br />Zug intentaba detener el avance de los Taurans, por ningún motivo debían pasar por Josper, las montañas eran su última defensa natural.<br />Y todos a esta altura se preguntaban “¿Dónde demonios está Jazir?”<br /><br />(1) ¿Desde cuando Iskander está casado con Aiko? :P<br />(2) Sí, estaba medio paranoica, qué quieren, le dijeron que había matado a su propia madre XD.<br />(3) Como si Nike nunca hubiera visto un orco desnudo XD. Es su pasado oscuro, no pregunten jajaja<br />(4) –“Voto para que el soundtrack de esta parte sea ‘Las chicas solo quieren divertirse’” (Gonza dixit)<br />(5) Hay que avisarles que está comprobado que no funciona XD</div>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-52902225289469804692009-02-12T09:08:00.001-08:002009-02-12T09:10:46.653-08:00Fecha 4: 08/02/2009<div align="left"></div><div align="center"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEil5bn-fV1q9XiJIIYczIknZQnKI_eG7o_0b0C5GEtOCZB4yzTKZpVlPNeaXSvWkDJrXVANg64CZRqZWADE6Tt4GYEQXXO_5jFN1YZjtVD0VbTR4axfOT6jS-Ls0ARnkfKbbyCpYbgK5xr-/s1600-h/lylefb7.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5301959012735364066" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 283px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEil5bn-fV1q9XiJIIYczIknZQnKI_eG7o_0b0C5GEtOCZB4yzTKZpVlPNeaXSvWkDJrXVANg64CZRqZWADE6Tt4GYEQXXO_5jFN1YZjtVD0VbTR4axfOT6jS-Ls0ARnkfKbbyCpYbgK5xr-/s400/lylefb7.jpg" border="0" /></a><strong> Lile</strong></div><div align="left"><br /></div><div align="left"></div><p>Shezabe abrazó a su hija, ella lloró desconsoladamente luego de enterarse de la muerte de su amiga en Agún. El regreso a Rittardast fue triste. Iskander y Burgen tuvieron que lamentar la muerte de Milo y Anya, dos caballeros de Haradim que habían caído en Armellas.<br />Iskander envió scouts, con Mael a la cabeza, a investigar; los informes fueron llegando, Armellas ahora estaba ocupada por setenta mil orcos. Iskander vio a los Taurans, eran unos ciento cincuenta mil descansando en Nuredum. Los orcos de Agún se dirigían inevitablemente hacia Van, mientras que en el Norte, treinta mil orcos y ciento veinte mil no muertos habían tomado Hemdial y se dirigían a tomar Lessender. Iskander aún no entendía porque Torin había permitido que tomaran el paso. Sus órdenes habían sido bien claras.<br />Burgen tomó la punta de flecha que le diera Anya y la enganchó con una cadena a la espada. Miró hacia Armellas y caminó hacia allí, solo. Lo menos que podía hacer por sus amigos era ir a rescatar los cuerpos.<br />Habían pasado tres horas de la muerte de Emme. Lile ayudaba a los heridos, pero eran demasiados, no había la estructura suficiente para tratarlos a todos. Nike estaba aún con su madre, ella le dijo:<br />-No debes llorar, a Selene no le hubiera gustado…<br />-Lo sé, ella me diría que siga adelante, pero no es tan fácil…<br />-Yo sé lo que es perder a una amiga, lo que es perder a un esposo…<br />-Yo también lo sé.<br />-Y a una hija.<br />Nike no podía responder a eso pero pensó que tenía que combatir por todos los que habían muerto, incluida Selene, le dijo a su madre:<br />-Voy a ir a hablar con Iskander, hay que ir a buscar a las reinas.<br />-No te preocupes por eso, yo me encargo de las reinas.<br />Cuando Goran llegó a la sala del consejo Iskander miraba el mapa de Haradim, sobre él movía piezas como si de un tablero de ajedrez se tratara.<br />-Todavía nos queda una frontera natural, solo tendrían dos pasos, Firehorn y Josper.<br />-Sería bueno saber quién es su líder ahora.<br />-Aún están en pie los no muertos, hay alguien más controlándolos…<br />-Menospreciamos a los orcos.<br />-No, no los menospreciamos. Lo que quiero ahora son nombres, quiero saber quién está controlando a los no muertos.<br />-¿Demonios?<br />-Probablemente… Ahora fuera de la misión… ¿qué pasó con tu mujer que me llamaste llorando?<br />Él lo miró mal, pero a su vez le contó lo que había pasado en Agún y de cómo Nike había desaparecido para irse con el tal Orión D’zees. Aunque también admitió que era bueno en combate. Iskander se preguntó si debían esperar que alguien más aparte de los cadormen y los orcos intentaran invadir su tierra.<br />-¿No te molesta que solo deje viva a tu mujer y haga un genocidio de cadormens?<br />Goran obvió el comentario.<br />-Debe haber otra fuente… quizás en Nuredum.<br />-Pero cómo… Hubiéramos visto algo tan grande- le dijo Iskander.<br />-No lo sé, pero allí tiene que haber algo más.<br />-Hubiéramos ganado en Hemdial de no haber sido por los no muertos. Entonces hay que ir a Nuredum… yo iré hacia allí. Te dejaré a ti o a Burgen a cargo del ejército. Si voy solo voy a tener más movilidad.<br />-Nuredum está infestado de Taurans.<br />-Sino me voy a llevar a la pendeja, a Lile.<br />-Yo preferiría dejarla acá. Mejor reuní a tu grupo.<br />-Tendría que llevarme a tu mujer…<br />-Yo también voy a ir.<br />-¿Dónde estará ese orco?<br />-Burgen está yendo hacia el campamento enemigo en Armellas.<br />-Voy a buscarlo.<br />Nike vio a Iskander y a Zug salir de la fortaleza y les preguntó:<br />-¿A dónde van? ¿Dónde está Burgen?<br />-Burgen se dirige al campamento orco de Armellas, vamos a ir a buscarlo. Te estaba buscando tu marido, dijo que iba a matar a un tal Orión…<br />Ella lo miró seria, sabía que eso no era verdad.<br />-En fin, era para sacarte una sonrisa- le dijo el capitán. Ella sonrió pero él no alcanzó a verla, ya estaba ocupado en atar un pañuelo blanco a su lanza.<br /><br />Cuando Iskander y Zug se acercaron al campamento vieron como los orcos apilaban cadáveres, a Iskander eso le recordó cuando tuvo que hacer lo mismo en Rittardast, hacía pocos días. Vio que los sobrevivientes se ayudaban entre sí y se tendían las cantimploras. Les salió al cruce un oficial orco.<br />-Iskander de Lessender, estoy buscando a uno de los míos, no está muerto.<br />-Zug, estoy con él. Estamos buscando a uno de nuestro campamento que creemos vino a parlamentar- le dijo Zug.<br />-¿Uno de ellos?- dijo el orco señalando a los heridos.<br />-No.<br />-¿Y cómo era?<br />-Un orco verde, con una espada gigante y un escudo con un fénix.<br />-Entonces debe ser ese que va a allá.<br />Iskander vio a Burgen y cabalgó hacia allí.<br />-¡Eh! Grandote ¿Qué vas a hacer?- le preguntó a su amigo.<br />-Vine a hacer lo que es necesario, buscar los cuerpos de nuestros amigos.<br />Burgen buscó a alguien importante, había allí un clérigo de Orogun. Iskander y Zug lo siguieron.<br />-No vengo a buscar pelea, vengo a buscar a mis amigos, no quiero pelear con ellos como no muertos. Aquí tiene mi espada- dijo y la clavó en el suelo.<br />-Pase- le dijo el clérigo- hay cosas más importantes por lo que preocuparnos.<br />Zug entró junto a Iskander y Burgen. Armellas era un cementerio entre piedras, se escuchaban aún los gritos de dolor, había gente viva debajo de enormes piedras. Humanos, orcos, todos por igual. Los cuervos revoloteaban ya sobre lo que había sido el campo de batalla, los perros comían de los cadáveres. Una escena dantesca.<br />Burgen buscó con clarividencia los cuerpos de Milo y Anya, estaban en la sala principal. Vio pilas de orcos en semicírculo atravesados por las flechas. Anya había caído sobre el cuerpo de Milo. Burgen los cargó sobre sus hombros y marchó, además pudieron llevarse los cuerpos de otros bermellones, la guarnición de caballeros de Haradim que habían peleado hacía ya muchos años en Agún. Iskander emitió una plegaria, Burgen jamás lo había visto hacer eso.<br />Cuando salió tomó la espada y le agradeció al orco que le había permitido el paso. Iskander quería quedarse un rato más y dejó los cuerpos sobre los caballos, Burgen los llevó a la fortaleza y Zug se quedó junto a él para ofrecerle de traductor.<br />-¿Le puedo preguntar quién es su líder? Me gustaría hablar con él.<br />El orco los dejó pasar y les indicó el camino. Llegaron hasta una carpa más grande que las demás.<br />-¿Sí?<br />-Venimos a conferenciar con su líder- dijo Iskander y Zug tradujo.<br />-¿Quién se quiere reunir con el señor?<br />-El capitán de la orden de Haradim.<br />-¿No es un enano el general?<br />-Él es el segundo.<br />El orco entró a la tienda y salió un rato después con dos mujeres orcas muy bonitas.<br />-Mi señor los va a recibir.<br />-¿Tenemos que entregar las armas no?- Iskander dejó todas sus cosas allí al igual que Zug, y entró a al tienda. Iskander hizo una reverencia al líder de los orcos negros.<br />-Iskander de Lessender.<br />-Lord Hardkom. Capitán de la orden del Fénix.<br />-Estamos en una guerra, desconozco los detalles pero creo que tiene que ver con “la tierra prometida”…<br />-Tiene que ver con deudas impagas. Vamos a ser francos, nuestro objetivo es salir del desierto.<br />-¿Y no hubo alguna otra forma de solucionar las cosas?<br />-Nunca tuvimos noticias favorables, nuestros emisarios jamás regresaron.<br />-He de reconocer que tuvimos líderes deplorables.<br />-Es lo que hemos podido realizar.<br />-Hay algo que no encaja acá, los no muertos no son del ejército suyo ¿ustedes estaban bajo las órdenes de Emme?<br />-Mis líderes también tuvieron diferencias, ahora nosotros no sabemos cómo volver atrás. Y según sabemos se han liberado demonios en el trayecto.<br />-¿Cuántos demonios se han liberado?<br />-No lo sé. Los Taurans fueron los que pactaron con los demonios.<br />-Si siguen queriendo atacarnos vamos a tener que defendernos.<br />-Pero ahora los líderes han cambiado- dijo Zug.<br />-Yo tengo que cumplir órdenes- dijo el orco señalando el símbolo de Orogun.<br />-Se hará lo que se tenga que hacer, me interesa más el asunto ese de los demonios, en eso podríamos compartir información.<br />-Las respuestas a eso tienen que buscarlas en la ciudad maldita.<br />-¿Podemos dejar todo en calma hasta entonces?- dijo Zug.<br />-Si quieren una tregua que así sea, tienen seis días.<br />El orco se despidió y le entregó un libro a Iskander, él no sabía leerlo, pero dijo que buscaría un traductor.<br />-Uria es una de nuestras sacerdotisas- dijo mientras salían de la tienda- ella como yo no apoya esta guerra, llévenla con ustedes.<br />Iskander le besó la mano.<br />-Muchísimas gracias por vuestra ayuda- le dijo al orco y los tres se encaminaron hacia Rittardast.<br />Nike vio que Burgen regresaba con los caballos solo, corrió hacia la puerta temiendo lo peor, Orión y Goran la siguieron. Pero lo que le dijo el orco no fue lo que esperaba.<br />-Burgen ¿qué pasó?<br />-Cadormen ¡A un lado!<br />Nike se quedó callada, ella no tenía derecho a decirle nada a Burgen, su familia era en gran parte culpable de todo lo que estaba pasando. Las palabras del orco la hirieron más de lo que hubiera deseado. Se quedó pensando en eso durante bastante tiempo. Goran ayudó a Burgen con los caballos, ella se quedó en la puerta, inmóvil.<br />Lile se encontró con Burgen y él le dijo que había ido a buscar a sus amigos, que no era su intención pelear con ellos como no muertos. Lile le dijo que los podía traer, y él le mostró el mechón de pelo blanco que se le había teñido al traerlo a él nuevamente desde Estigia.<br />-Voy a necesitar a Témpano- le dijo- Ahora está en Lessender.<br />Ella entendió lo que le estaba pidiendo y en un abrir y cerrar de ojos llegaron a la ciudad. Estaban en el medio de una guerra. Luneth estaba defendiéndola, pero no parecía que iba a durar mucho más en pie.<br />-Vine a buscar a mi montura, con permiso.<br />-Dejame que yo me quedo acá- dijo Lile y se paró a arrojar rayos al lado de Luneth. Una disparaba rayos azules, la otra, rayos rojos, y los no muertos caían, pero allí donde caían parecían surgir más.<br />-¡Témpano!- gritó Burgen al verlo, estaba mordiendo unos horribles perros, o lobos, estaba rodeado de orcos rojos, que Burgen supo que los llamaban así porque se bañaban en la sangre de sus víctimas. Témpano estaba parado sobre cuatro de ellos.<br />Burgen se subió a su montura y le ordenó:<br />-Muchacho, cono de frío.<br />En su camino hacia Lile se encontró con Ulfen y algunas Valkirias. Una de ellas estaba herida y Ulfen la subió al wargo de Burgen, en ese momento, lo atravesó una lanza por la espalda, y cayó.<br />Burgen se metió a la ciudad, llegó a la terraza y vio como los no muertos se abrían paso y penetraban las defensas, no terminaban de llegar, y llegaban hasta donde llegaba el horizonte, eran demasiados. Vio como las Valkirias se abrían paso y le dijo a Lile:<br />-Lile, limpia eso, ayuda, hay que traerlas.<br />Él salió y cargó con el wargo hasta llegar a ellas y ayudarlas a regresar a la ciudad, Lile le ayudó a abrirse camino. Lile y Luneth paradas arriba de un Kodo comenzaron a arrojarles meteoritos desde el cielo, pero ya no había nada que hacer, la ciudad se perdería. Los barcos comenzaron a cruzar el lago y llegó un momento en que solo quedaban tres barcas.<br />-Hay que replegarse- dijo Burgen.<br />En ese momento llegaron las quimeras de Alessia, la guardia púrpura de Morwell, pero así como llegaron así también su luz se apagó, enseguida los no muertos los encerraron y sus vidas se perdieron.<br />-Llévensela.<br />-No te podés quedar- le dijo ella.<br />-¡¡No!!<br />Pero Lile ya lo había transportado otra vez a Rittardast. Iskander lo vio aparecer a Burgen, subido a Témpano y cubierto de sangre.<br />-Fui a buscar a Témpano, evacuaron Lessender, cayeron los caballeros púrpura. Lile se quedó con Luneth.<br />Iskander intentó buscarla con clarividencia pero no la encontró. Vio que Lessender se había perdido.<br />-Tenemos seis días de paz- le informó su capitán- Tenemos que ir a Nuredum.<br />Iskander fue a buscar al resto y lo vio salir a Goran de la sala del consejo, estaba furioso. Entró y lo vio a Torin fumando de la pipa, jamás lo había visto tan enfadado.<br />-Mirá estamos mal- le dijo al enano- así que organizá las defensas mientras yo me encargo de otras cosas más importantes. Si te tranquilizás y empezás a mirar el mapa quizás puedas hacerlo mejor.<br />-Estamos rodeados de idiotas- le dijo Goran cuando habían salido de allí. Se reunieron todos en otro salón y Burgen le susurró a su capitán.<br />-Me dijo Lile que quería traerlos.<br />-¿Revivirlos?<br />-Yo no se lo pedí, ella se ofreció.<br />Cuando fueron a buscar a Lile ella había comenzado ya el ritual. Luneth, Milo y Anya estaban ahora en una especie altar, ella tenía los ojos fijos al frente y cuando volvió en sí su cabello estaba completamente blanco. Los tres despertaron violentamente. Anya lo vio a Burgen allí y se tiró encima de él, lo abrazó y lo besó llorando.<br />-Bienvenido otra vez- le dijo Iskander a Milo- Dijiste que ibas a aguantar en Armellas y te moriste. Es bueno tenerte de nuevo entre nosotros.<br />-¡Tonta me asustaste!- le dijo Nike a Lile y la abrazó.<br />-Alguien tenía que hacerlo- fueron sus palabras.<br />Pero el precio de esas dos vidas había sido muy alto. Lile miraba a todos fijamente, su mirada era muy extraña, había estado en Estigia, dos veces en los últimos dos días. Eso no podía tener buenas consecuencias.<br />Iskander dejó a cargo a Milo en Rittardast y le dijo que vigile las acciones de Torin, después de todo había sido él el que no fortificó bien el paso.<br /><br />Otra vez el mal parecía anidar en Nuredum, una vez más tendría que pisar esa tierra de muerte, parecía que todo siempre los llevaba hacia ese cementerio. Nike había sugerido una entrega de prisioneros luego de enterarse de que el lugar seguía infestado de Taurans, pero eso era muy peligroso. Goran sugirió tomar nuevamente el paso de Hidden Forest por debajo de las montañas, el mismo que algunos del grupo ya habían tenido que recorrer más de una vez. A Nike no le hacía ninguna gracia tener que volver a ese lugar, además le traía demasiados recuerdos que no quería que afloraran. Cabalgaron hasta allí y cuando llegaron a la entrada que Goran ya conocía bien, les dijo:<br />-Aquí tendremos que dejar las monturas.<br />-Cuídalos, si se complica la situación, regresa- le dijo Burgen a Témpano. Él pareció entender a su compañero porque no se movió cuando avanzaron.<br />Caminaron sobre la nieve, algunos se hundían en ella y se retrasaban. Zug pidió que lo ayudaran con la carga de explosivos que había llevado con todas las intenciones de volar lo que quedaba de Nuredum. Burgen y después Iskander se ofrecieron para ayudarlo. Lile iba mirando fijamente al frente, parecía que no pestañaba.<br />-Lile ¿estás bien?- le preguntó Nike una vez más. La veía cada vez más extraña. No había sido una buena idea que entrara al “otro plano” a buscar a Milo, a Anya y a Luneth. Seguramente eso era lo que temía Eglas cuando le decía que no utilizara su poder. Pero ahora ya no había nada que hacer, estaba hecho.<br />-Ahí abajo hay algo muy malo- le dijo Lile. Nike pensó que cómo habían podido ser tan tontos como para que se les escapara un faro tan evidente como el que parecía sentir su amiga.<br />-¿Cómo pudimos dejara pasar esto?- dijo Goran que también parecía sentirlo.<br />-¿Viste? Hablábamos de que Rittardast no destruyó las madrigueras y ahora mirá esto- le dijo Iskander.<br />-No se hagan problema, cuando vea esa cosa la voy a destruir- Lile estaba completamente desquiciada, o eso parecía. Nike pensó que tanto poder iba a enloquecerla ¿pero qué podía hacer ella? Siguió avanzando, lo único que importaba ahora era destruir lo que fuera que estuviera allí abajo.<br />Continuaron descendiendo, más y más. Pasaron varias horas y se detuvieron a descansar en un refugio, aquel mismo que habían usado quince años atrás. Había muchos recuerdos allí, y faltaba Selene… Nike se sentó al lado de Iskander. Él no parecía querer dormir y ella tampoco iba a poder hacerlo.<br />-Siempre terminamos en el mismo lugar- le dijo ella.<br />-Perdoname si te dije muy duramente lo de Selene.<br />-No te preocupes, cualquier forma hubiera dado igual. Sería bueno que duermas un rato, te puedo relevar.<br />-No voy a dormir.<br />Nike recordó las palabras de su tío, se había firmado una alianza o algo de eso entendió y ahora Jazir era el “tutor” legal del supuesto hijo de Iskander.<br />-Nuestras familias son un desastre.<br />-No considero que mi familia sea un desastre, ni siquiera conocí a mi madre…<br />-Yo tampoco, a mí me abandonaron a los dos años, no conocí a mis padres y ahora se supone que tengo algo que ver con una casa de Garrat.<br />-Yo también tengo que ver con Garrat, mi madre es Jaraven, quizás hasta seamos parientes.<br />-No me parece extraño- le dijo sonriendo.<br />-Pero vos ahora tenés a tu madre.<br />-Lo sé, y vos la tenés a Aiko y a tu hijo.<br />-Daisuke no es mi hijo…<br />-Por favor, es evidente, el niño se abrazó a tu pierna cuando Aiko llegó. Y cuando estábamos juntos ella se ponía demasiado celosa. Además no importa si él es tu hijo o no, él te quiere a vos.<br />-¿Con él también?- dijo Goran que llegó a donde estaban ellos y la abrazó.<br />-Cuando estuvimos de viaje, Aiko se ponía celosa cuando hablábamos.<br /><br />Goran les dijo a todos que debía dormir debían estar listos para el día siguiente, lo iban a necesitar. Durmieron algunas horas y prosiguieron, había que seguir bajando. Llegaron a un pasillo que daba a la muralla de Nuredum. El pasillo estaba levantado unos quinientos metros sobre el nivel del suelo, debajo corría un arrollo y vieron pasar más y más Taurans. Avanzaron con cuidado, primero cruzó Goran y Nike lo siguió. A Zug y a Burgen se les complicó un poco por la carga pero lograron pasar sin problemas. Pasaron por una reja y siguieron bajando hasta llegar a una pasarela enrejada, toda retorcida por el calor. Abajo había doce pisos de tumbas, varios cables salían de ellas parecían una fuente de alimentación.<br />Ese lugar seguía siendo igual de tétrico. Cada vez que bajaban más Nike veía a Goran más raro.<br />-Goran ¿estás bien?- él no le respondió- Goran…<br />Él la miró confundido.<br />-Sí, estoy bien, me duele mucho la cabeza…- Era evidente que esa cosa, fuera lo que fuera lo estaba dañando. Ella caminó a su lado a partir de entonces.<br />Cuando llegaron al final de ese horrible edificio vieron que era de roca sólida. Pero Iskander escuchó ruidos de lo que parecía ser un corazón. Zug y Jazir también lo escucharon.<br />-Hay algo vivo aquí, creo que estamos adentro.<br />Lile estaba rasguñando la “pared” y le arrancaba pedazos.<br />-Lile, no lo despiertes, esperemos hasta llegar al centro.<br />-Podemos dañarlo desde aquí- dijo y le hizo un tajo a la pared de la que comenzó a salir un líquido verde. Nike recordaba eso del domo que habían destruido pocos días atrás. Lile ya estaba bañada en esa cosa, agarró lo que parecía una “vena” o “cable” y lo rompió. El líquido verde se empezó a cristalizar.<br />-¿Por qué no buscamos un lugar estratégico donde colocar las bombas?- sugirió Zug, pero la realidad era que no sabían en que parte del cuerpo de esa criatura se encontraban. Iskander usó clarividencia para ver hacia abajo. Vio miles de no muertos, otros estaban más humanizados. Cuando bajó más sintió una energía que golpeó directo a su mente y lo dañó.<br />-Abajo está lleno de bichos- y relató lo que había visto- Hay un sello con forma de estrella de cinco puntas, y muchos no muertos como con los que peleaste en Hemdial- le dijo a Burgen.<br />A medida que bajaban más con las sogas, Zug escuchó unos ruidos extraños, eran unos horribles gusanos que comenzaron a salir de las paredes. Jazir los apresuraba para que fueran más rápido. Muchos de estos gusanos comenzaron a entrar, hacia abajo Iskander vio un destello de luz blanca, como la de los gusanos que se estaban preparando para atacarlos.<br />-Esos son unos gusanitos no muy gratos, me parece que ya saben donde estamos- lo miró a Burgen- ¿vamos?<br />-Vamos. Goran ayudanos con telekinesis.<br />Burgen se tiró e Iskander fue tras él. El escudo al frente, la fullblade hacia delante, Iskander tras él con la lanza sobre su hombro y como si fuera poco también llevaron a Zug. Todos cayeron por el agujero. Lile llevaba a Luneth y Jazir convocó a un murciélago del plano de las sombras. En las sogas solo quedaban Goran y Nike. Ella se abrazó a él con un brazo, y con el otro desenfundó una cimitarra.<br />-¿Confiás en mí?<br />-Sí- le respondió ella sin dudarlo.<br />Goran saltó, pero se desbalanceó y golpeó contra una de las paredes, y se vio obligado a soltar a Nike. Ella entró al plano de las sombras, decidida a llegar antes que el resto al fondo.<br />-¡Nike!- gritó Goran, ya no podía verla y voló hacia el techo a enfrentarse a los gusanos, sus alas doradas desplegadas. Jazir entró al mundo de las sombras, para seguir a su sobrina.<br />Cuando Nike llegó al fondo, casi al mismo tiempo que Jazir, vio a una mujer morocha de ojos verdes que recitaba sobre el sello que había visto Iskander. Se acercó a ella y le dijo:<br />-¿A quién estás trayendo?<br />-¿Quiénes son ustedes?<br />-Te pregunté a quién estás trayendo.<br />Nike sintió una fuerte energía que la arrojó contra una pared- al menos ella había dejado de convocar a lo que sea que estuviera llamando.<br />-A un señor de la oscuridad, no creo que entiendas lo que es eso.<br />-¿Para qué? Ya es suficiente con todo lo que nos está destruyendo como para agregar algo así.<br />-Es la única opción que nos queda para detener todo esto.<br />-¡No! ¡No lo traigas!<br />Cuando llegaron Lile y Luneth, vio que la elfa estaba pálida.<br />-Lo siento Luneth, ellos no quieren esto, no quieren que lo traiga.<br />Usó su báculo y destruyó el sello. En ese momento los demás llegaban al fondo.<br />-¿Usted convocó a ese ejército de no muertos?- le preguntó Iskander.<br />-Ese ejército no lo convoqué yo.<br />-¿Entonces quien fue?<br />-Debe haber sido su líder…<br />-Emme.<br />-No puede haber sido ella, yo la maté- dijo Nike.<br />-¿Están seguros?- dijo la mujer. Iskander se quedó pensando.<br />-Yo la vi morir frente a mis ojos- continuó Nike.<br />-¿Y sino era Emme? ¿No hay acaso alguien igual a ella?<br />-¿Estás queriendo decir que matamos a Shezabe?- le dijo Iskander.<br />Ella lo miró confirmándoselo. No había otra razón de por qué seguían en pie los no muertos. Nike miró a Jazir, él parecía creer que era posible.<br />-Eso significa que Emme está ahora con las reinas- Iskander se puso a reír de impotencia. Nike lloró, todo lo que había intentado contenerse después de lo que había pasado con Selene desbordó. No era posible, y si lo era, ella había matado a su propia madre.<br />La mujer les dijo que al parecer los “pluma de plata” quería acabar con Garrat. Garrat, todo llevaba allí. “Aquellos que nacen marcados son los que van a traer balance al mundo”. Acto seguido les entregó unas piedras y les dijo que si las llevaban con ellos, al morir su alma quedaría atrapada allí para siempre, no verían Estigia, sino que vivirían junto a los guardinales.<br />Nike no tomó la piedra cuando ella se la dio, solo pensaba en esos momentos “¿Maté a mi madre?”. Decidió que ya no podía seguir pisando esa tierra de intrigas y traiciones, ya no quería sufrir más, ya había sido suficiente. Si nadie podía darle una respuesta, si ya no podía confiar en nadie, solo había una opción. Era momento de irse de allí, iría hacia Garrat. Pero antes iba a decírselo a la única persona que le importaba que lo supiera.</p>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-91722558607695023262009-02-04T11:31:00.000-08:002009-02-12T09:11:58.275-08:00Fecha 3: 01/02/2008<div align="center"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlK4VJqXZbVR9CMx-9p_00LyRxaJJ4WJfxjUiIiHPEm7vCTzzeItikMBvbefwRvGPNry2PAHs7Frm0t9TCgkdEoj-nTIuOrN09Ljh1t6mnzbYAVaMHwFtDcJrOmOgXWF7VhCzmrg_YmH2a/s1600-h/seleneou5.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5299028185292933122" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; CURSOR: hand; HEIGHT: 301px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlK4VJqXZbVR9CMx-9p_00LyRxaJJ4WJfxjUiIiHPEm7vCTzzeItikMBvbefwRvGPNry2PAHs7Frm0t9TCgkdEoj-nTIuOrN09Ljh1t6mnzbYAVaMHwFtDcJrOmOgXWF7VhCzmrg_YmH2a/s400/seleneou5.jpg" border="0" /></a><strong>Selene</strong> </div><div align="left"><br /></div><div align="left"></div><div align="left"><br /></div><div align="left">Torin llegó a Rittardast y sin demora convocó a un consejo de guerra. Zug fue uno de los primeros en hablar:<br />-Antes de todo, organicémonos un poquito… ¿qué pasa acá? ¿qué es lo que sabemos?<br />-Entonces empecemos a planificar- dijo Iskander- ¿Quién atacó Agun? No lo sé, pero están controlados. Según Goran querían a uno de los nuestros y ya lo tienen. Lo iremos a buscar pero no es ahora la prioridad. Creo que lo que van a hacer es entrar violentamente por Armellas o entrarán por el Norte, por Morwell. Lo primero que tenemos que hacer es enviar exploradores.<br />-Entonces preparemos todo, la idea es que cuando llegue la información ya tengamos todo listo.<br />-Enviaremos a Mael. Por lo demás tendremos que ver que hacer con Agún.<br />-Definamos los puntos a defender para empezar a mover las armas de asedio.<br />-Tenemos la chance de llegar antes que ellos a cualquier lado. Salvo que usen trucos sucios. Lo lógico militarmente es que vuelvan a tomar Armellas. Por otro lado podrían intentar entrar por Nuredum, por eso habría que cerrar también ese paso.<br />Zug le dijo a Iskander que estaban mandando lo pesado al Norte. Burgen y él sabían que los Taras habían enfilado hacia el Norte hacía ya cuatro días. El grueso de las armas de asedio y lo pesado estaba camino a Nuredum.<br />-Podríamos enviar cincuenta armas de asedio para reforzar Nuredum y el resto al norte para mantener el paso.<br />-¿Estás de acuerdo Torin con el plan del orco?<br />-Sí, habría que enviar unidades para que los asistan.<br />-Yo voy a ir al Norte, tenemos que avisar en Lessender. Considero prudente que vayas con tu gente más capacitada a Nuredum. Enviarás tu brazo derecho a Armellas y nosotros iríamos al Norte. ¿Podrías encargarte de todo el ejército con Torin?- le preguntó Iskander a Burgen.<br />El orco estuvo de acuerdo. Se decidió que Burgen comandaría a la escuadra de wargos que se dirigirían hacia Hemdial a reforzar a Eglas. Aún así no debían olvidar qué podía llegar a pasar lo que todos temían, que aún así los orcos podían entraran a Haradim.<br />-¿Qué tan grande es la muralla de Imerion?- preguntó Burgen.<br />-Si se cortan los puentes, nadie va a poder entrar. Además según lo que sé hay una legión de garratianos allí. Aún así se podría atacar por aire, los tarianos por ejemplo.<br />Imerion era la última defensa, esperaban no tener que usarla.<br /><br />Goran vio sin poder hacer nada como Nike subía detrás de Orion y se marchaban con el ejército delante de la formación de striders. Cabalgaron nuevamente hacia Van. Nike fue callada todo el camino, hasta que hicieron un alto y decidió conversar con su nuevo anfitrión.<br />-Ya que estoy aquí… me gustaría saber hacia donde vamos.<br />-Honestamente no lo sé.<br />Nike pensó “esto va a ser difícil”.<br />-¿No se supone que sos el líder de todo este ejército?<br />-Este ejército me obedece solo porque mi padre les ofreció una buena suma a nuestro regreso. No me tienen demasiado cariño.<br />El cadormen que le hablaba parecía de buena familia, no se parecía demasiado a los cadormen que habitaban en Firehorn, sí en cambio tenía una cierta similitud a su tío Jazir.<br />-¿De dónde vienen? ¿y qué quieren conmigo?<br />-Venimos de Athos. Mi padre me envío con la misión de buscar a la heredera y casarme con ella.<br />-Ok… primero ¿eso donde queda?<br />-Al sur, cerca de Candara.<br />Ella parecía conocer mejor esa localización, era demasiado lejos hacia el sur.<br />-Pero… por lo que sabía había dos herederas…- continuó Orión.<br />-Ah sí, supongo que te referís a mi tía. La que en estos momentos está del otro lado de las montañas con los orcos queriendo invadir mi tierra.<br />-¿Están en guerra con ella?<br />-Sí… y digamos que mi tío me dijo algo de nuestra familia recién ayer.<br />-Jazir…<br />-¡Ah! ¿también conocés a mi tío?<br />-Nos criamos juntos. Mi padre es su tío.<br />-Esto se pone mucho más complicado…- mientras pensaba “¿me tengo que encontrar con un desconocido para que me cuente cosas de mi familia?”<br />-Sí, somos familia.<br />-Entonces ya entendí, vos querés casarte con mi tía (o conmigo) para poder acceder a mi “trono” sea el que sea…<br />-Después de eso mi padre va a matarnos para quedarse con él.<br />-Ah! Tu padre es un hijo de puta.<br />-¿No conocés mucho nuestra sociedad no?<br />-Conozco a Firehorn… ¿y cuál se supone que es “mi trono”?<br />-Debido a tu ascendencia tenés lugar en una de las casas de Garrat, y con eso derecho a ser emperatriz.<br />-Garrat, ni siquiera sé donde queda eso…<br />-Supongo que sabés que descendés de un dragón.<br />-¿Qué?- Nike empezó a hilvanar varias cosas- Esto es mucho más complicado de lo que creía…- su tío no le había mencionado ese “pequeño” detalle.<br />-Tu abuela era la hija de Nellens, hijo de Bahamut.<br />Nike se quedó pensando un rato, no sabía que decir, era demasiada información junta.<br />-Entonces ¿A dónde vamos?- volvió a preguntar.<br />-A dónde usted diga, mi ejército es su ejército.<br />-¿Me vas a regalar un ejército?<br />-Siempre y cuando tenga su mano…<br />-Ah… eso se puede arreglar… (1)<br />-¿Entonces?<br />-Volvemos a Agún.<br /><br />Todo esto se volvía demasiado complicado. Athos, Garrat, un lugar para acceder al trono de los dragones… pero ahora esa no era la prioridad, Nike iba a usar ese ejército para defender Haradim. Pero hubo algo que se le escapó de las manos… Cuando Goran la vio venir sobre un strider salió a su encuentro con el caballo.<br />-Volviste… y trajiste otra vez a los dragones.<br />-Te presento a mi nuevo ejército.<br />Él la miró muy mal. Después vio que detrás de ella se plantaba Orión D’zees. Antes de que alguno dijera nada ella se adelantó:<br />-¿Podemos entrar?<br />Goran ordenó a los fusileros que bajaran las armas, y el ejército de Agún abrió las puertas para recibirlos, no de muy buena gana.<br />Orión se presentó ante Goran y Nike pensó “¡No le digas nada!” pero aún así ya era demasiado tarde, y ella sabía las consecuencias. Todo se volvió mucho más complicado cuando entraron al salón del consejo. Solo estaban ellos tres.<br />-Creo que lo mejor va a ser dirigirnos a Rittardast. Iskander iba a llevar al ejército allí según los últimos planes.<br />-Como usted diga, su majestad- le dijo Goran. Nike lo miró y le dijo a Orión.<br />-¿Me permitís un segundo?- y lo sacó a Goran de la habitación.<br /><br />-Yo te puedo explicar… (2)<br />-Eso me gustaría.<br />-Resulta que Orion vino a buscar a la “heredera” y se encontró conmigo por casualidad en Van. Además me dijo que se supone que soy la descendiente de un dragón…<br />-Sí ¿y?<br />-¿Ya lo sabías?<br />-Sí<br />-¿Y por qué no me dijiste? Bueno, no importa.<br />-Y te fuiste con él.<br />-Me fui para que no destruyeran Agun y mataran a todos, incluyéndote- le dijo remarcando esta última palabra.<br />-¿Qué te pidió a cambio?<br />-¿A cambio? Eh… Eso no importa ahora tenemos una prioridad, defender Haradim, el resto viene después.<br />-¿Qué te pidió a cambio?- repitió.<br />-Te dije que eso no importa. Agún está a salvo y nos van a ayudar contra Emme.<br />-Hay solo dos opciones, y si no van a unirse a Emme eso significa que vas a empezar a decirle “mi amor”. Muy bueno lo tuyo- Goran estaba demasiado enfadado para continuar y se marchó. Nike se tomó la frente. De las sombras apareció su amiga Selene exclamando un “Uuuuh!” (3).<br /><br />A Nike la situación ya la había superado ¿por qué él no podía entenderla? Como si a ella le gustara todo eso, de buena gana hubiera dejado todo y se hubiera ido con él a cualquier lado de no tener que combatir en ninguna guerra, y sin embargo él la dejaba sola otra vez. Cuando vio a su amiga, ni siquiera le importó que los estuviera escuchando y le pidió:<br />-Selene ¡ayudame!- le dijo y la abrazó desesperada.<br />-Tranquilizate, yo te voy a ayudar.<br />La condujo hasta un cuarto para hablar a solas y Nike le dijo:<br />-Dejá, no podés hacer nada igual…<br />-Sí, puedo, te puedo sacar a ese de encima, que por cierto está bastante bueno.<br />-Ah… no lo había pensado de esa forma- le sonrió.<br />-Escuchame, estuve pensando que tenemos que sacar a las reinas de acá, no pueden estar en la línea de fuego, y el que más me preocupa es el nene.<br />-Sí, estoy de acuerdo ¿qué proponés? ¿Rittardast?<br />-Aznor, es una pequeña ciudad cerca de Rittardast. Allí van a estar a salvo.<br />-Sí, creo que ese es un buen lugar, por ahora. Hay que enviar scouts, tenemos que saber dónde está Emme del otro lado de las montañas.<br />-Pensá como Emme y lo vas a saber…<br />-No es tan fácil…<br />-¿Si fueras ella qué harías?<br />-Si fuera ella, entraría por donde todos puedan verme para ser la gran diosa que destruyó Haradim… y sería una tarada, no va a hacer eso.<br />-Pensá como Emme- me repitió.<br />-No puede entrar por Armellas, tampoco por Nuredum, Agún sería una buena opción… y quedan las madrigueras… y… dios, va a entrar por el bosque.<br />Ella me miró asintiendo. Emme iba a entrar por donde nadie esperaba que lo hiciera.<br />-Ahora yo me encargo de las reinas, pero primero voy a tranquilizar al capitán.<br />Nike se preguntaba qué haría sin su amiga, ella siempre estaba ahí para ayudarla, mucho más que su propia familia, y la entendía como nadie.<br />Cuando Selene se fue, Nike se quedó pensando. Ahora tenía un ejército de cinco mil cadormens a su disposición, pero no tenía al único hombre que le interesaba tener. Tenía que ser fuerte, por él, por sus amigos y los que estaban sufriendo por culpa de su familia.<br /><br />Burgen habló con Milo y con Anya y los dejó a cargo en su ausencia, y se dispuso a ir hacia Hemdial, debía buscar a Eglas y ayudar con los orcos a proteger el paso del Norte. Milo le dijo que no se preocupara que él iba a encargarse de Armellas.<br />-Anya- le dijo Iskander a solas- vigilá las acciones de Milo, está nervioso y no quiero que haga ninguna locura. Nos vemos pronto.<br />Antes de marchar Iskander le dio a Burgen una carta para Eglas.<br />Zug marchó hacia el sur junto a sus tropas. Bordearon las montañas hacia Nuredum. Al llegar vieron una ciudad enorme, hundida en parte, en el centro un gran domo con el techo destruido. No había nadie, el viento arremolinaba las cenizas y no dejaba ver a mucha distancia, el olor a muerte se sentía en el aire. Muchos sintieron miedo pero juntaron coraje para seguir. Hacia abajo doce pisos de catacumbas, Nuredum era un gran cementerio.<br />Zug estableció la base antes de entrar a la ciudad y mandó scouts a que le informen sobre la situación. Dependiendo de lo que le dijeran iba a formular el plan.<br />Los scouts a su regreso le dijeron que la ciudad era una gran ruina y que había zonas muy inestables De lo que sí estaban seguros era que la avenida principal era el único lugar macizo que tenía la ciudad por donde podía llegar a cruzar un ejército. Esta avenida se bifurcaba más adelante. Zug mandó a los scouts por las dos desviaciones para que le informaran si por el camino ya se visualizaba el enemigo.<br /><br />Burgen llegó a Hemdial, hacía bastante frío pero ya habían ido preparados. Igualmente a los orcos les afectaba ese clima, estaban demasiado acostumbrados a las altas temperaturas del desierto.<br />Una chica rubia, en reluciente armadura dorada se acercó a Burgen.<br />-Orcos por aquí…<br />-Mi nombre es Burgen, caballero de Haradim. Vengo a hablar con Eglas- dijo y le tendió la carta de Iskander. Ella abrió el sobre y leyó.<br />-Valiria Orin, general de las valkirias- se presentó y agregó- Tienes suerte orco.<br />Burgen vio que se empezaron a levantar hombres que estaban ocultos en la nieve. El paso comenzaba justo donde había una casa vikinga de madera, alrededor estaba todo el campamento y las piras donde se quemaba a los guerreros muertos en combate. A Burgen le pareció extraño que al ingresar allí no los miraran mal a diferencia de los haradianos, eso le sorprendió. Lo vio a Eglas sobre la muralla, mirando hacia el sudeste. Tenía puesta una armadura de cuero negra, los cabellos casi blancos se mecían con el frío viento del norte.<br />-Eglas, el capitán…<br />-Sí, Burgen caballero de Haradim. Espero que no me guarde rencor.<br />-No suelo guardar rencor por nadie.<br />-Veo que trajo refuerzos, los vamos a necesitar.<br />-Los orcos nazurianos se nos han unido, tenemos entre ellos un ingeniero de gran calibre, un gran refuerzo- sacó el sobre y se lo entregó- De Lord Iskander.<br />-Veo que tiene un wargo blanco…<br />-¿Qué pasa con eso?<br />Pero Eglas tampoco parecía dispuesto a responderle, Burgen ya estaba harto de que nadie le explicara sobre Témpano.<br />Descansaron allí y se prepararon para recibir al invasor. Burgen habló con los generales, entre ellos Ulfen que por fin le respondió a su duda.<br />-Así que usted tiene un wargo blanco.<br />-Así es.<br />-Solo por eso confiamos en usted.<br />-Disculpen, no entiendo… a ver… en un momento hubo una reunión y un orco me entregó esto- le señala la insignia.<br />-No me diga nada, él lo eligió a usted.<br />Así Burgen le relató como Témpano se le unió en la batalla llegando a Rittardast, como había abandonado a su dueño y se había puesto a su servicio.<br />-Desde entonces Témpano me sigue.<br />-Los lobos blancos no son wargos. Según los antiguos los lobos blancos son los que mantienen la sangre del Fenris, el espíritu elemental que nos dio la civilización. Que un lobo blanco lo elija significa que usted será un ejemplo para su raza.<br />-¿Qué hacía allí? ¿Con los orcos?<br />-Algunos lo usan como líder de escuadrón.<br />-Creo que este era el caso.<br />-Su wargo daría la vida por usted y espera lo mismo. Según las leyendas no son wargos, son espíritus. Pero bueno, son solo mitos.<br /><br />Iskander llegó a Lessender, nevaba y hacía mucho frío. A lo lejos vio la Torre de los Tempest, y no flameaba en su mástil la bandera de Morwell. La ciudad había crecido desde la última vez que la vio, ya llegaba prácticamente hasta el lago. Llegó a su vieja casa y tocó la puerta. Le abrió una nenita.<br />-Hola. No sabía que había alguien viviendo aquí. ¿Hay alguien mayor con quien pueda hablar?- le preguntó.<br />-¡Mamá!- la llamó la niña. Lo atendió una señora mayor que tenía dos hijos.<br />-Aquí vivía mi padre Balder.<br />Ella lo invitó a pasar.<br />-No sé si te acordás de mí… soy Hilda- él solo recordaba que de chicos se habían reído de él así que le dijo:<br />-No, no recuerdo.<br />-Tu papá me vendió la casa y se fue al Norte.<br />-Lo imaginé.<br />-Ahora la ciudad es independiente de Morwell, desde que vino Luneth. No sé por qué los elandrines le dejaron el trono.<br />Ella comenzó a preguntarle sobre lo que estaba ocurriendo en Haradim pero él le dijo que todo eran rumores sin fundamento. Decidió que iría a ver a la nueva regente.<br />Al llegar a la Torre lo recibió el capitán Adrin.<br />-Soy Iskander de Lessender, vengo a hablar con la señora.<br />-¿Y a qué se debe su visita?<br />- Vengo a informarle que Haradim está sufriendo un ataque de los orcos. Creo que es una noticia importante.<br />Él lo llevó hasta la sala del trono donde estaba Luneth y su séquito. Ella le tendió la mano e Iskander se la besó. Iskander fue directo al punto. Le dijo todo lo que estaba pasando y le informó que había dejado un regimiento de diez mil hombres en Hemdial, pero que si los orcos cruzaban por allí seguramente Lessender sería la siguiente ciudad en ser atacada.<br />-Nuestra ciudad no cuenta con más de cinco mil efectivos. No nos dedicamos a la guerra y no la deseamos.<br />-Comprendo mi señora.<br />Además le dijo que su intención era seguir camino hacia Hellios a buscar a su madre.<br />-Hay cosas que si se buscan no se encuentran, pero si no se buscan pueden encontrarse más fácil. Si los orcos logran pasar, Lessender va a quedar indefensa.<br />-Por qué no solicita asistencia de Morwell.<br />-No creo que Alessia se meta en esto.<br /><br />Zug puso cañones en los pasos donde se bifurcaba la avenida principal para bombardear a los que ingresaran por allí. Iba a bombardear también la ciudad cerrando pasos. Tenía que comprar tiempo para bloquear el paso. Pero los enemigos comenzaron a llegar, y la grita que logró formar no fue lo suficientemente grande. Envió de inmediato mensajeros al sur y a Rittardast.<br />Nike estaba mirando sobre la muralla cuando vio a un elfo de Hidden Forest subir hasta donde estaba ella. Era muy ágil porque subió a los saltos.<br />-Señora…- jadeaba y estaba exhausto, parecía que había corrido hacia allí.<br />-¿Qué pasó?<br />Él le entregó una carta, era de Zug. Decía que estaban resistiendo en el paso de Nuredum, pero que necesitaban ayuda. Los orcos y los Taurans se estaban abriendo paso y ellos no eran demasiados. Si no enviaban refuerzos iban a perder el paso. Nike reunió a Selene, a Orion y a Goran en el salón del consejo y les comunicó la “feliz” noticia.<br />-Están entrando por Nuredum, tenemos que ir a reforzarlos.<br />-Como usted diga su majestad- le dijo Goran haciéndole una reverencia. Era obvio que todavía estaba cegado por los celos, pero Nike se controló (4).<br />-Orión ¿venís con nosotros?<br />-Como usted diga mi señora.<br />Goran no dijo nada y se quedó esperando órdenes.<br />-Por qué me mirás así, yo no estoy al mando- Bueno, parecía que él estaba empecinado en seguir haciéndola sufrir- Venís con nosotros- dijo por fin. Selene te quedás a cargo en Agun.<br />-No te preocupes.<br />De inmediato partieron hacia Nuredum a reforzar a las tropas de Zug.<br /><br /><br />Iskander vio Taras volar sobre Armellas, allí estaba Milo. Hacia Hemdial se dirigía un ejército impresionante, miles y miles de no muertos y orcos intentarían cruzar el paso. Burgen miró a Témpano a los ojos y le dijo:<br />-Sino vuelvo, llévale esto a Anya- era la punta de flecha que la mujer le había entregado antes de que se fuera de Rittardast. Le había pedido que se la regresara él mismo pero Burgen no sabía si iba a salir de esta- Témpano, hoy no habrá batalla.<br />Al wargo no pareció gustarle la directiva y gruñó.<br />Todos los vikingos se prepararon para la batalla entonando un canto mirando hacia su ciudad Asgard.<br />-Será un honor contarlo entre nosotros- le dijo Ulfen.<br />-Acompaña a mis mariscales, guía a los wargos- le pidió a Témpano. Él iba a tener una misión más importante, Iskander lo había contactado para que reuniera a Lile y a Eglas, iban a ir a matar a Emme.<br />La visión era impresionante, había fuego en Armellas, en Nuredum y en Hidden Forest. Hemdial era un hormiguero. Torin había rodeado Rittardast, pero los cañones no eran suficientes.<br />Luneth había proporcionado su ayuda para la defensa, dos mil quinientos hombres arribaron sobre tigres blancos, del otro lado de las montañas, Emme traía a su ejército de medio millón de no muertos.<br /><br />Cuando llegaron a la ciudad subterránea se dieron cuenta de que los orcos ya habían tomado gran parte del paso. Zug estaba en retirada. Goran apremió a su caballo, lo obligó a saltar sobre los hombres de Zug y cargó contra el enemigo. Orión lo seguía de cerca. Obviamente Nike tenía pensado otra cosa, entraría por el costado y les asestaría un golpe por detrás. Cuando entró vio que Zug reacomodaba los cañones para disparar hacia la ciudad, sobre dos de las torres vio a los magos de Orogun que se encargaban de las enormes sombras de veinte metros convocadas por los cadormen. Rayos comenzaron a llover sobre el destruido domo y las sombras se desvanecieron. Nike caminó por las sombras y apareció justo a la espalda de uno de los magos y le clavó la cimitarra en su espalda y la misma atravesó su pecho. En ese momento Zug cañoneaba a la torre. Nike tomó una soga y salió justo a tiempo. Caminó sobre la cabeza de un kyloon para dirigirse directamente hacia la otra torre donde estaba el segundo mago. Pero esta vez Zug fue más rápido y tiró abajo la torre primero. Nike salió disparada por los aires y vio como debajo de donde estaba por caer estaba lleno de Taurans. Desenvainó las cimitarras en el aire, el Tauran donde aterrizó cayó muerto, pero ahora estaba rodeada. Corrió hacia la salida y vio a Goran y a Orion que peleaban espalda contra espalda. No había nadie más allí, tenían que retirarse, pero al frente estaba la enorme grieta que había dejado Zug para dificultar el paso al enemigo, no podían cruzarla saltando, tenía ya doce metros de largo y veinte de profundidad. Escuchó que Goran dijo a Orión:<br />-Protégela- y se dirigió hacia el grueso del enemigo, cimitarras en mano. Orión convocó una especie de sombra voladora y la obligó a subir.<br />-¿A dónde van?- le preguntó Zug a los cadormen que abandonaban la ciudad.<br />-Salvamos nuestras vidas. Ya no podemos hacer nada más aquí.<br />Nike y Orion se dirigieron hacia fuera y vieron a Zug escapando con los pocos que quedaban. Nike miró hacia la ciudad y una gran explosión iluminó el cielo. Solo alcanzó a ver un pequeño punto de luz blanca que ascendía al cielo. Tenía la esperanza de que hubiera sido Goran.<br />Orión estaba muy malherido.<br />-Zug, ¿podés hacer algo por él?<br />-Solo puedo estabilizarlo.<br />-Está bien, por favor, llevalo a Rittardast y ayudá a fortalecer la ciudad, si Iskander está allí Armellas no va a caer. Yo voy a ir hacia el bosque.<br /><br />Iskander se dirigió hacia el paso de Hemdial, allí lo esperaba Burgen.<br />-Burgen, voy por ustedes. Reuní a Lile y a Eglas.<br />-Cuando quieras- le respondió- Lile, cerca.<br />Un ejército de miles y miles de no muertos se acercaba al paso, no sería suficiente ni con la ayuda de los soldados de Ulfen. Solo había una forma de ganar; acabar con Emme.<br />Iskander llegó al cruce de caminos y le dijo a Luneth:<br />-Bien, mi señora, aquí nos separamos. Vamos a ver que pasa, iré a luchar por mi pueblo- Iskander se sacó el anillo que ocultaba su verdadera apariencia frente a ella y remontó vuelo. A lo lejos vio un punto de luz, y se dirigió hacia allí. Lo último que vio fue una columna de fuego destruyendo a los kyloons cortesía de Luneth.<br />-Dejenme abrirles camino- dijo Lile y arrojó un rayo de luz divina al ejército de no muertos. Varios se desintegraron pero eran demasiados.<br />Burgen en el fragor del combate sintió un tremendo golpe en el pecho. El que le había pegado con su gran martillo era un hombre, muerto hace mucho tiempo. Burgen sabía que esos seres no podían ser derrotados con cortes de la espada así que plegó la full blade y la usó para golpear. Fue una lucha de titanes, hasta que por fin Burgen logró derrotarlo y sintió en ese momento una garra que lo levantaba en el aire.<br />-Agarrá a Lile- y él le hizo caso a su capitán. Lile desde el cielo siguió arrojando haces de luz pura a los no muertos. A lo lejos vieron que sobre Hidden Forest llovía fuego. Iskander se llevó también a Eglas y dificultosamente puso marcha hacia allí.<br />(5)<br />Al llegar escucharon gritos de auxilio.<br />-¡¡Ayudenme por favor!!- enseguida Iskander enfiló hacia allí. Era Shezabe que utilizando un escudo de energía verde se protegía de los furiosos ataques de su hermana. A su paso la vegetación se pudría. Una vez cerca de tierra Iskander arrojó a sus compañeros y cargó contra Emme (6). Ella centró su ataque en él, pero Iskander era resistente y la golpeó con su lanza. Ella lo miró con un profundo odio. Un segundo ataque esta vez de Burgen, dio en el blanco.<br />-¡Estás muerto!- le gritó al orco y por un segundo Burgen vio el plano de Estigia, todo el lugar estaba cubierto de fuego, los árboles se transformaron en columnas de metal y vio muchos muertos. (7)<br />Burgen rugió y Emme cayó por la segunda carga de Iskander.<br />-Hay que terminar con esto- dijo Lile y comenzó a orar, el fuego se apagó y rayos de luz divina comenzaron a caer desde el cielo. Un ángel de metal cayó con fuerza en tierra y todo tembló. El ángel usó su enorme espada y atravesó a Emme de lado a lado y ella se retorció de dolor.<br />-Cumplido mi lady- le dijo el ángel dispuesto a marcharse.<br />-¡Cumplido nada!- gritó Emme y atravesó el cuerpo del ángel con su brazo y la absorbió toda la vida. El ángel desapareció y fue el turno de Eglas que intentó pegarle con el martillo. Ella lo esquivó y lo levantó por el cuello y volvió a hacer lo mismo que con el ángel. Eglas quedó inconsciente sobre el suelo. Iskander volvió a cargar desde el aire con la lanza y ella recibió un nuevo golpe del semidragón que dio un rodeo para volver a cargar. Lile viendo lo que le había pasado a su tío se enfureció y comenzó a drenar energía del suelo. Sus ojos comenzaron a brillar y en el cielo las nubes se arremolinaron sobre ellos. Tanto Zug desde Rittardast como Nike del otro lado de las montañas lo vieron. Una columna de fuego se estrelló directamente sobre Emme, y quemó toda su piel pero aún así la calavera se reía, poco después la piel se regeneró, parecía que el fuego no le había hecho daño.<br />Burgen la volvió a golpear y ella gritó:<br />-¡Orco!<br />-¡Orco no! ¡Burgen!- le gritó él. Pero Emme lo besó y Burgen esta vez entró al plano de Estigia y todos vieron como Burgen cayó muerto sobre el suelo. ( 8 )<br /><br />Cuando Nike y Goran llegaron donde estaba Emme vieron a Burgen en el suelo, su madre también estaba allí y Emme estaba rodeada por todos sus amigos. Decidieron unirse a ellos y esta vez la atacaron entre todos. (9) Ella no merecía seguir viviendo en Haradim, muchas personas habían muerto por su causa. Ya había sido suficiente.<br />Emme quedó tendida en el suelo, herida, ya no tenía resto físico para hacer nada. Nike sintió que una de sus cimitarras volaba de su mano hacia la de su madre que estaba arrodillada en el suelo, al lado de Emme. Pareció que iba a cortarle la cabeza, pero envainó la espada.<br />-Esto no es para mí, no puedo hacerlo. Es de ustedes.<br />Nike se acercó a su tía y la apuntó con la cimitarra, ella le dirigió una última mirada como suplicando piedad para confundirla, pero ella ya estaba decidida.<br />-Voy a tener con vos la decencia que no tuvieron conmigo, te voy a enviar con él- le dijo y le clavó la cimitarra en el pecho. Ahora podría ir junto a Broker, el amor de su vida.<br />Luego corrió hacia Burgen y lo sacudió:<br />-¡Burgen, Burgen!- pero él no le respondía.<br />-Me parece que no hay nada que hacer- le dijo su madre.<br />Burgen vio como le iban sacando todas sus pertenencias, la espada, el escudo y unos extraños seres le dijeron “Ahora vas a ser uno de los nuestros, vas a ser un óbolo”. Pero Burgen vio una luz, más rayos se acercaron y vio como las columnas de metal se convertían en árboles.<br />-¡Él es mío!- gritó Lile y Burgen sintió como lo empujaban “Volvé” le dijeron.<br />-¡Tonto! Me asustaste- le dijo Iskander luego de que el orco abriera los ojos. Burgen sabía que por unos segundos, o minutos, había estado muerto.<br /><br />Iskander comenzó a ver lo que estaba pasando en Haradim, los orcos habían entrado por Armellas, los jinetes de Trenton se replegaban hacia la fortaleza, Zug los cubría con los cañones pero eran demasiados, la fortaleza de Rittardast se perdería. Luneth se replegaba hacia el Norte, seguramente a terminar de evacuar Lessender, los no muertos estaban pasando por Hemdial, Nuredum ya era un hormiguero y a pesar de la grieta que había dejado Zug pasaron sin problemas. Y también, habían pasado por Agún…<br />Nike vio la cara que puso Iskander y le preguntó.<br />-¿Qué pasó?<br />-Tomaron Agun, Selene está muerta.<br />Y los ojos de Nike miraron hacia la nada, las lágrimas comenzaron a rodear sus mejillas, Selene, ella la había dejado en Agún, era su culpa. Sintió que los brazos de su madre la rodeaban, era la primera vez que sentía que la abrazaba tan fuerte.<br />-Hija, ahora entiendo que hay que pelear ¿lo hacemos juntas?<br />-Yo ya empecé a pelear- le dijo y lloró por la muerte de la que había sido su mejor amiga, la única que la había querido cuando todos los demás la miraban extraño, la única que no había cuestionado ninguna de sus decisiones, la única que había arriesgado su vida para que ella pudiera seguir el camino que deseaba seguir. No había ningún consuelo para eso. Ni siquiera la muerte de Emme era suficiente.<br />Burgen le agradeció a Lile. A la distancia lo vio a Ulfen cargando a Témpano sobre sus hombros. Estaba herido, pero había hecho exactamente lo que el orco le había pedido. Había peleado en primera línea de fuego, dirigiendo a los wargos.<br />-Estamos complicados- le dijo Iskander a Goran.<br />-Mucho, pero estamos vivos y todavía podemos tener esperanzas.<br />-Están entrando por todos lados, solos nos queda una opción, replegarnos a Imerion.<br />Y en Rittardast Torin le decía a Zug exactamente lo mismo mientras las fuerzas enemigas se acercaban irremediablemente a la ciudad.<br /><br /><br /><br />(1) Salvo por un pequeño detalle, Nike ya está casada y con el hombre que ama, pero bueno, una pequeña mentirita no le hace mal a nadie…<br />(2) “Yo te puedo explicar” jajajaja En la realidad nunca tuve que usar esa frase, fue buenísimo usarla en una mesa XD<br />(3) Y bueno, Nike no aprendió de la mejor manera que su marido resultó ser alto celoso<br />(4) ¡Como se atreve a decirme su majestad! ¬¬ (Nike ya iba teniendo ganas de cagarlo a golpes).<br />(5) En algún momento antes de llegar al bosque los atacó una cadormen que tenía los ojos vendados, creo que era la misma que conoce mi tío Jazir. Sé que les tiró algunas flechas pero como no me acuerdo bien no lo escribí.<br />(6) Lile los hizo caer lentamente porque sino…<br />(7) Sacó crítico en fortaleza ^^<br />(8) Pifió la tirada de fortaleza XD<br />(9) Y ya se iban haciendo las nueve y había que terminar la mesa que fue re-larga :P</div>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-74772540736907507182009-01-30T10:14:00.000-08:002009-01-30T10:17:54.190-08:00Fecha 2: 25/01/2008<div align="center"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjw9ztvY-6cO_wKCY9W4xwkiUOJqLGccK8_tgKmKHK8oxri-PomGMAdP7ny-8Izm7-5M4dxYaDVOcjVBACrTNhbly9_FUfkFihj9NnZYjogwbGBzltxEFnG9jIAyIBSR7HBFsXxS2TVOqpR/s1600-h/Elgart.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5297152428164109650" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 260px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjw9ztvY-6cO_wKCY9W4xwkiUOJqLGccK8_tgKmKHK8oxri-PomGMAdP7ny-8Izm7-5M4dxYaDVOcjVBACrTNhbly9_FUfkFihj9NnZYjogwbGBzltxEFnG9jIAyIBSR7HBFsXxS2TVOqpR/s400/Elgart.jpg" border="0" /></a><strong> Elgart</strong><br /></div><div align="left"><br />Los orcos compañeros de Zug comenzaron a revisar bajo la nieve debían encontrar cual era el mejor lugar para instalar la carga. A lo lejos comenzaron a escucharse los chillidos de las criaturas voladoras de los Taras y no pasó mucho tiempo hasta que dieron con ellos. Cuando se acercaron Jazir ensartó a tres con sus flechas, dos fueron contra Thelmos, que los remató. También atacaron a Zug que enseguida se puso en guardia con sus martillos. Lograron alcanzarlo con las lanzas al grito de “¡¡Muere maldito orco!!” y las mismas se quebraron dejando las puntas clavadas en el cuerpo del orco, pero Zug contraatacó. A uno de ellos lo golpeó con el martillo tan fuerte que lo hizo caer por el barranco, al otro le partió las costillas al propinarle un golpe con ambos martillos en el pecho.<br />Jazir creyó matar al último pero uno más venía en carga y aferró a Thelmos de los hombros con sus garras, lo levantó y lo arrojó a los pies de Zug. Los Taras tenían rodeado al orco y al quedarse sin lanzas sacaron espadas largas. Zug notó que eran viejísimas y de muy mala forja, vio como un Taras atravesó el cuello de Thelmos que estaba muy malherido sobre el suelo y la nieve se tiñó de rojo bajo él. Un Taras volador se arrojó sobre Zug y Jazir le dio con sus flechas que silbaron cerca de los oídos del orco. Zug esquivó las garras de la criatura y vio como descuartizaba a uno de los Taras que había dejado inconsciente.<br />Thelmos en un último acto heroico tomó la cadena, la agitó varias veces y la sujetó a las patas de la criatura voladora.<br />-Buena suerte- fueron sus últimas palabras mientras se arrojaba al barranco y las cuchillas de su cadena cercenaban las patas de la montura que chilló por el dolor.<br />En ese momento Zug escuchó:<br />-¡Lo tenemos jefe!<br />Zug calculó que tenían veinte minutos más o menos, o hacían explotar todo ahora o buscaban lugar para una carga más. Decidieron seguir buscando y encontraron otros dos posibles lugares. Zug dejó a un ingeniero a cargo de ese lado del paso y él fue a detonar la carga sobre el otro lado. Pero cometieron un error, había un Taras llorando sobre su montura muerta y sea por negligencia o piedad no lo mataron. Él sacó una espada para quitarse la vida, o eso creyeron, porque lo que tenía en sus manos era un cuerno, y lo hizo sonar.<br />Las montañas comenzaron a plagarse de monturas negras de Taras. Ya no había tiempo y tuvieron que detonar los explosivos. Por el paso en ese momento cruzaban tres kyloons con armas de asedio. Habían cruzado ya las unidades livianas de orcos azules, la caballería pesada y la liviana. Los orcos negros vestían armaduras completas, llevaban espadones y escudos con púas o “rompe escudos”.<br />Jazir les indicó a sus acompañantes que luego de la explosión se refugiaran en el bosque y así lo hicieron. La explosión del lado de Zug bloqueó el paso, pero la del ingeniero orco no explotó del todo, si bien logró sepultar parte de la caballería. Zug se dirigió al bosque como habían acordado pero Jazir había desaparecido. Los Taras sobrevolaban el paso, ahora bloqueado.<br /><br />Jazir se quedó cerca del paso y los Taras lo vieron. De una de las monturas descendió un hombre al que reconoció como Lord Giberson, un adinerado comerciante de Josper que había comerciado con su madre Calista, conocido opositor de Sviden y aliado incondicional de la Inquisición de St. Cuthberth.<br />-No lo puedo creer, Jazir Baenre ¿a qué se debe el placer de que nos explote el paso?<br />-Ah… ¿eso fue el ruido? Yo solo pasaba por aquí… (1)<br />Pero no iba a lograr engañarlo tan fácilmente. Él sacó una flecha de uno de los muertos y le dijo:<br />-¿Esto es una flecha cadormen no?- y se la tendió.<br />-Sí… puede ser…<br />-Puede ser que alguno de sus hermanos haya estado por aquí.<br />Obviamente lo subieron a una montura y lo llevaron prisionero al desierto. Pasó sobre el campamento orco, muchos vestidos con pieles y cascos con cuernos bajo un estandarte rojo. Se acercaron a los tres kyloons de la retaguardia. Sobre la terraza lo esperaba Emme, luciendo dos cuernos y unas impresionantes alas rojas de murciélago que la cubrían como si fuera una capa. A su lado estaba Jovian, su fiel servidor.<br /><br />Iskander y Burgen aceleraron el paso. Uno de los hombres de Rittardast le dijo a Trenton:<br />-Principe, vimos movimiento de Taras sobre Armellas, hay humo allí.<br />Trenton envió a un pájaro a que le informara sobre el asunto y el ave pareció confirmarlo.<br />Justo cuando se acercaba a hablar con el general Iskander escuchó que Burgen decía: “Estos son nuestros hermanos de armas. Yo también soy un caballero de Haradim”<br />Trenton vio a Iskander sentado sobre una roca, la lanza sobre sus rodillas y el semblante pensativo. Estaba visualizando el terreno a la distancia con clarividencia. Enseguida llamó a Burgen y a Trenton y les dibujó el mapa en el suelo con su espada.<br />-Vamos a hacer lo siguiente: sugiero preparar una carga de caballería con escudos en alza. La idea es romper sus filas. Necesito una escuadra de los mejores arqueros para destruir las armas de asedio, pero lo primero va a ser destruirles la infantería. Yo voy a comandar a la caballería, una vez que hayamos quebrado sus filas, Burgen va a destruir a sus arqueros orcos.<br />-Entonces yo me encargo de las armas de asedio- dijo Trenton.<br />-Antes de destruirlas fijémonos si podemos recuperar algunas para utilizarlas contra ellos. Ahora levantemos el campamento, vamos a descansar más adelante.<br />Alaia le dijo a Iskander que se adelantaría con los centauros hacia Rittardast, ese era un buen punto de defensa, y partió con su escuadrón.<br />Iskander habló con su amigo Mael, él estuvo muy feliz con la misión que le asignó su capitán:<br />-Vas a tener una tarea única y específica, cada arma de asedio que veas: “blum”.<br />Él lo miró emocionado, con una sonrisa de oreja a oreja, no había otra misión que le hubiera gustado más.<br />-Deberías casarte, te calmaría un poco tanta tensión…<br /><br />-¡La orden de Burgen!- escuchó Iskander gritar y se unió al grito orco.<br />-No, la orden de Burgen no- dijo él.<br />-¿Y cómo quiere que nos llamemos? Ahora no tenemos una tierra con la que podamos identificarnos.<br />-Ya tendremos otra tierra. Hey- le llamó la atención a Trenton- ¿por qué demonios tengo una armadura con un fénix en el pecho?<br />-Es un tesoro de nuestra familia, es el símbolo de la casa de Aris- como si Burgen supiera lo que era eso- Siempre estuvo en la familia.<br />-Entonces seremos ¿la orden del fénix?… (2)<br />-La orden de Burgen suena más orco.<br />Pero había algo más que Burgen quería saber, por qué lo había elegido Témpano.<br />-Bueno, como quieran- finalizó.<br /><br />Lile sabía que en Agun había matado fácil treinta mil enemigos ella sola, era demasiado poder, recordó las palabras de su tío Eglas, él era ahora la única familia que le quedaba así que decidió ir a buscarlo. Antes de esto había ido a ver a Goran, su amiga Nike le había pedido que por favor lo ayudara.<br />-Que bueno sería tener a Eglas con nosotros ahora, me pregunto donde estará- le dijo él.<br />-Está en Asgard- y pensó “Sí, iré a buscarlo”.<br />De camino le pidieron que lleve a Jazir, Zug, Thelmos y dos orcos más que tenían la misión de volar el paso de Armellas. Solo fueron unos segundos. Dejó a sus compañeros y desapareció para llegar a un pueblo de montaña, justo frente a la casa principal. Era toda de madera y ostentaba los característicos cuernos vikingos. Afuera estaba nevando copiosamente y hacía mucho frío. Vio que no muy lejos, en la montaña, había una especie de arcada y se dirigió hacia allí. Mientras iba caminando los campesinos la saludaron. La ladera estaba sembrada de tiendas de pieles, parecía un ejército esperando órdenes.<br />Cuando abrió la puerta lo primero que vio fue una gigantesca osa polar parada en sus dos patas traseras, vestida con una túnica larga de color blanco. Esos últimos días había visto muchas cosas, pero eso fue lo más extraño.<br />-Ah! Te estaba esperando Lile, pasa por favor- le dijo.<br />Ella pasó mirándola fijamente. Al fondo del salón había un trono vacío, lo custodiaba un ejército de valkirias, mujeres con armaduras doradas al mando de Odin. Al fondo vio a su tío Eglas, a su lado una niña muy bonita que portaba una espada, era el colmillo de Fenris, y era más grande que ella. A su lado la custodiaba Hakkan, su guardián y más allá un anciano con una túnica de plumas negras, su nombre era Corax.<br />-Soy Barrai, la Madre Oso.<br />-Mucho gusto- le respondió Lile.<br />-Este es mi templo, y ese es tu trono.<br />-Elabore un poco más la respuesta- le dijo sorprendida.<br />-Tu tío nos habló de tu pasado, nos dijo que eras la hija de Gwen. Ella representó a la deidad de la naturaleza en la Tierra, a Danwe, como antes lo había hecho Luna, y ahora es tu turno.<br />Ella todavía no se sentaba en el trono. Su tío Eglas le dio una palmadita en la cabeza.<br />-¿Y qué pasó con la justa retribución? ¿Cómo naturaleza?<br />-Tu madre, y ahora vos, son las enviadas de Danwe a la Tierra. Sos prácticamente una diosa.<br />Shana la niña del colmillo parecía bastante asustada, y se paró al lado de Lile.<br />-Sigo subiendo la escalera en vez de bajar…- dijo Lile.<br />-Yo no entiendo mucho de esto tampoco- le dijo Shanna.<br />-¡Shanna!- le llamó la atención su guardián.<br />Al fin Lile se sentó en el trono y las valkirias golpearon lanza contra escudo, todos se inclinaron ante ella.<br />-¿Y cómo encaja Broker en todo esto?<br />-El nacimiento de la enviada señala el inicio de una nueva era. Empezó con Luna, luego con Gwen en la segunda Guerra del Caos y ahora con vos. Pero al no haber más esencia los dioses no pueden volver, tú no eres la diosa pero sí tienes un vestigio de su poder, suficiente para considerarte una diosa. (3)<br />-Necesitás descansar- le dijo Eglas- Odin me cedió a su ejército para asistir en la defensa de Haradim.<br />-Van a tener batalla, venía a buscarlos para eso.<br />-¿Qué van a hacer los demás?<br />Lile pidió un mapa, pero se dio cuenta que aún así no podía explicar la estrategia.<br />-Si mal no recuerdo el enano quería hacer una muralla aquí para encerrar a Emme. Habían ido a cubrir el paso de Armellas.<br />Decidió que sería mejor ir a buscar a Zug. Le tomó un segundo llegar a su lado.<br />-¿Tú sabes de estrategia? ¿conoces el plan?<br />-No…- Lile no lo podía creer (4)- Nos íbamos a encontrar en Rittardast. Además falta Jazir…<br />-¿Cómo que falta Jazir?- dijo mirando a un lado, luego al otro.<br />-No volvió después de la explosión. Nos íbamos a encontrar en el bosque.<br />Lile decidió que era mejor volver, no se podían quedar ahí mucho tiempo, los Taras estaban cerca, decidió que después iría a buscar a Jazir.<br />Cuando llegaron, Eglas se presentó.<br />-¿Lile?<br />-Él es el ingeniero Zug, creo que sabe el plan mejor que yo…<br />-Se equivocó, no sé el plan- dijo quitándose las puntas de las lanzas. Madre oso apoyó su pata en el costado del orco y dejó de sangrar. (5)<br />Zug les contó que la parte del plan que a él le correspondía era volar el paso de Armellas, de allí debería reunirse con el capitán en Rittardast. Al volar el paso habían ganado unas veinticuatro o treinta y seis horas hasta que lograran recuperarse.<br />-Aún pueden cruzar el paso de Hendial, al Norte- informó Eglas.<br />-Volemos ese paso también, si hay recursos…<br />Eglas le señaló a Lile.<br />-Ah! Usted se refiere a una forma mágica. Yo le puedo indicar donde debe ser el impacto- Decidieron que iban a hacer eso y Lile se lo comunicó a Iskander.<br />-General.<br />-Pendeja, disculpe, sacerdotisa ¿dónde estás?<br />-En Asgard. Encontré a mi tío, pero ni Zug ni yo nos acordamos del plan.<br />-Trataremos de tomar el paso. Solo dennos más horas.<br />-Tengo un ejército aquí.<br />-¿De qué estamos hablando exactamente?<br />-Muchos vikingos furiosos y dispuestos a morir.<br />-¿Cuántos?<br />-¿Cuántos tío?<br />-Cuarenta y cinco mil.<br />-Una cifra nada despreciable- dijo Iskander- escuchame Lile ¿qué chances hay de destruir el otro paso?<br />-Estamos en eso ahora con Zug.<br />-Saludos al ingeniero (6) ¿Qué pasó con Jazir? ¿Pudo encargarse de su hermana?<br />-Desapareció.<br />-¿Murió?<br />-No, murió Thelmos- al capitán Iskander esta noticia no le hizo nada de gracia.<br /><br />Nike iba camino al lago de Cyro junto a la división de Leconte, Davon se separó de Eneas y retrocedió para hablar con Goran. Cuando comenzó a hablar Nike no entendió ni la mitad de las cosas que estaba diciendo. ¿Que Sviden era un “pluma de plata”? ¿qué demonios era eso y qué tenía que ver con la pluma que les mostrara su tío Jazir? Además se enteró que Sviden era un esbirro de Vekna, todo le hubiera cerrado más si hubiera sabido quien era ella. Pero Goran parecía saber más. Mencionó también que él y el padre de Goran pertenecían a la orden de caballeros de Alexia ¿y esa quien era? En fin, lo único que pensaba en esos momentos era que debían ir a Imerion a hablar con Sviden. Nike le preguntó a Davon qué quería su antiguo maestro pero él no supo qué responderle.<br />Goran le preguntó qué iban a hacer.<br />-No sabemos nada, primero me gustaría saber dos cosas, número uno: quiénes son nuestros enemigos, número dos: quiénes son nuestros aliados.<br />-Pregunta fácil la tuya…<br />-No dije que fuera fácil. Me gustaría saber qué quiere Sviden, si nos va a ayudar o no.<br />Llegamos al pueblo, no era muy grande, había pocas casas de madera, y había que descansar un poco hasta seguir viaje a Imerion, o allí pensó Nike que se estaban dirigiendo.<br />-Deberíamos descansar aquí, creo que nos merecemos un descanso ¿no?<br />-Sí- Nike le sonrió. El escuadrón se dirigió hacia Van a las orillas del lago de Cyro. Todo el pueblo se preparó para darles comida y alojamiento porque con ellos iba Eneas, sumo sacerdote de St. Cuthberth.<br />-Lo que puede hacer el poder- comentó Nike mientras comían.<br />A ellos dos le dieron una habitación y se fueron a “dormir”.<br />-Al fin solos- dijo Goran y sirvió dos copas de vino. Pero lo que parecía que iba a ser una noche de pasión terminó siendo una noche de terror. Caricia va, caricia viene y luego de un beso apasionado Goran de repente miró por la ventana. (7)<br />-¿Qué pasó?- le preguntó Nike- ¿Qué viste?<br />Ella se aprestó a mirar hacia el ocaso y vio la imagen de un enorme esqueleto sobre las colinas al sur. Poco a poco una enorme criatura de veinte metros de alto fue apareciendo, eran cuatro en total. Escucharon gritos afuera y ambos se apresuraron a colocarse las armaduras y tomar las cimitarras, eso no podía ser nada bueno.<br />Cuando salieron vieron a Davon y a Eneas preparados para el combate, frente a ellos los fusileros de Josper preparando los rifles. Dispararon a las primeras sombras y las atravesaron como si fueran agua. Al final de la fila un hombre con armadura completa, casco y lanza los dirigía. Nike alcanzó a ver un mechón de pelo blanco y pensó: “cadormens”.<br />Goran la agarró de la cintura y la besó, luego desenvainó las cimitarras que habían pertenecido una vez al padre de Nike y se dispuso a combatir. Davon arrojó un rayo de luz blanca que disipó las sombras. Nike sintió malestar en la vista, pero no le importó ahora tenía un único objetivo, el líder. Para llegar hasta él cruzó por las sombras, hasta ahora no se había atrevido a usar esta habilidad, pero el peligro que corrían lo justificaba. Todo estaba completamente oscuro y vio dos puntos de luz, eran Goran y Davon. Pero el cadormen que los dirigía la vio como si nada y también entró al mundo de las sombras. Nike llegó donde estaba el líder que bajó de la montura y le hizo señas para que se acercara a combatir. Ella lo atacó sin pensarlo pero no logró hacerle daño, sin embargo él sí la dañó y el golpe hizo que se desconcentrara y saliera abruptamente del mundo de las sombras. Ahora ya estaban rodeados. No vio más a Goran y a Davon pero a lo lejos estaban centrando el ataque en un punto. Temiendo por su marido corrió hacia allí mientras veía como en el cielo comenzaban a arremolinarse nubes negras, pero no pudo marcharse. El cadormen la golpeó con la lanza, una, dos, tres, cuatro veces y la dejó muy herida sobre el suelo. Ella intentó salir de su rango pero no pudo hacerlo. Cuando iba a rematarla vio que le detenían la lanza a su enemigo. Era Goran que brillaba con una luz dorada y tenía dos pares de alas a su espalda. “¿Alas? Los únicos seres que pueden llegar a tener alas son los Aasimar” pensó.<br />Pero eso era lo de menos, él la había salvado una vez más.<br />Golpeó al cadormen con la cimitarra y logró dañarlo pero él le clavó la lanza en el medio del pecho. Nike miró la escena con terror. Desesperada intentó volver a atacarlo pero ninguno de sus cuatro ataques dio en el blanco. (8)<br />-Andate, ahora- le dijo Goran.<br />-No voy a irme- como si pudiera volver a cometer ese error otra vez.<br />-Tenemos que irnos ahora.<br />Goran la tomó de la mano y corrieron entre los enemigos mientras Davon y Eneas los cubrían. Cabalgaron hacia Agun, no había más opciones, Imerion aún estaba muy lejos. Atrás vieron a los striders que los perseguían. Los caballos exhaustos los dejaron a las puertas de Agun. Nike notó que Goran parecía triste por algo.<br />-¿Qué pasó?<br />-Davon está muerto- ella lo abrazó. Juntos subieron a la muralla. Ya estaban allí, un mar de cadormens dispuestos a aniquilarlos. Eran siete mil contra cinco mil. No era demasiada diferencia en número, pero sí en poder. Los fusileros de Leconte disparaban inútilmente a las sombras, parecía que no habían aprendido nada en el pueblo de Van.<br />El lider de los cadormen se plantó al frente del ejército y solicitó:<br />-¡Entreguen a la heredera!<br />Goran escupió sobre la muralla, no iba a dejar que se la lleven. Pero Nike desde ese momento supo lo que tenía que hacer.<br /><br /><br />El ejército descansó en Rittardast, la gente del pueblo los alimentó con lo que tenía. Iskander le dijo a Trenton:<br />-Llevate a tu gente, que los civiles evacuen la ciudad- y Trenton se dispuso a cumplirlo.<br />Allí estaba Anya, caballero de Haradim que había peleado con Iskander en Gaia.<br />-Señor, soy un caballero de Haradim y pretendo ir con la unidad.<br />-Está bien, siempre tendrás un lugar aquí, vas a ir con los arqueros de Trenton ¿entendiste como es el plan?<br />-Sí- le respondió ella.<br />En Armellas estaban usando grúas para subir los cañones. Burgen e Iskander buscaron a los orcos para saber su posición, pero no pudieron hacerlo, Emme les estaba bloqueando la “visión”.<br />Jazir fue conducido hacia el kyloon de su hermana y la vio mirando hacia Armellas, sus ojos totalmente rojos, un aura del mismo color rodeándola.<br />-Vos contra mí ¿te atrevés pendeja?- la desafió Iskander.<br />-Algún día Iskander, algún día.<br />Cuando llegaron al punto donde se suponía debía estar el ejército enemigo, el lugar estaba desierto. Trenton miró hacia las montañas había movimiento allí y en los kyloons había mucha gente. Iskander también vio a toda la fuerza dividida en las montañas.<br />-Es bueno lo que hacés, pero vas a tener que salir algún día- dijo Iskander.<br />-¿Qué pasó?- le preguntó Alaia.<br />-Están todos en las montañas, mandá un mensaje a Torin.<br /><br />Zug no sabía mucho de magia, así que decidió averiguar un poco más, volar un paso no era tarea sencilla.<br />-¿La idea es volar ese paso no? Contame la explosión que podés hacer- le preguntó Zug.<br />-Yo te explico- le dijo Shanna- Va a tirar un rayo del cielo.<br />-¿Qué tan preciso es?<br />-Puede colocar el rayo exactamente donde usted indique.<br />-¿Con uno por lado te alcanza?- le preguntó Lile.<br />-Sí<br />-Los va a ver a mucha distancia.<br />-Eso no importa ahora, ¿Cuánto tiempo entre cada uno?<br />-Diez segundos.<br />-Dame media hora para ir a investigar y te digo donde colocarlos.<br />Cuando llegaron Zug observó el terreno y comenzó a colocar varas de madera donde era más conveniente. Lile esperó y a su orden descargó dos columnas de rayo que bajaron desde el cielo hacia la montaña. Hubo un temblor y las piedras que cayeron bloquearon completamente el paso. Lile escuchó una voz que le decía:<br />-Ah! Por fin alguien que puede contra mí.<br />-Emme, tanto tiempo.<br />-¿Con quien hablás?- le preguntó Zug.<br />-Con nuestra archienemiga.<br />-¿Te puedo dar una idea?- le sugirió Emme.<br />-¿Involucra palancas?<br />-Juntate con tu amigo Iskander, te va a necesitar. Ah! Y te voy a mandar un regalito.<br /><br />Jazir vio a su hermana desde el cielo, allí lo llevaron Lord Giberson y sus hombres.<br />-¿Qué hacés acá? ¿qué querés?<br />-Vine a hablar con vos…<br />-No te quiero más conmigo, no soy más tu hermana- y con un movimiento de su mano lo hizo volar sobre las montañas.<br />Lile vio caer a Jazir del cielo e invocó a un ángel para que lo llevara a tierra. (9)<br />-Andá con Iskander él te necesita más.<br />-Necesito que me lleves a Agun- le dijo Jazir.<br />-¿Viste? Las obligaciones que vienen con el poder.<br />-Callate puta- la insultó.<br />Al instante le mandó un mensaje a Eglas.<br />-Tío cambiaron los planes, voy a llevarlos a estos con el general. Nos pueden encontrar allá.<br />-Nos vemos allí entonces.<br /><br />Iskander decidió preguntarle a Trenton.<br />-Necesito saber si entre tu gente hay algún clérigo…- en ese momento recordó que allí estaba Jesavé, la madre de Nike, así que Burgen y él fueron a visitarla.<br />-Dama Jesavé.<br />-Capitán.<br />-Hemos venido a pedirle un favor. Involucra matar a su hermana- le dijo fríamente.<br />-Yo ya no tengo hermana. Si está hablando de ella cuente conmigo para lo que sea.<br />-Necesitamos ir hacia el campamento ¿puedes darnos un escudo para que no nos vea? Sino bajamos a Emme esta guerra se perderá.<br />-Tengo miedo de que ella tenga más poder que yo.<br />-Tendremos que arriesgarnos. Aquí Trenton relizará una maniobra de distracción, ya que su hermano ha fracasado en detenerla lo haremos nosotros.<br />-Puedo hacer algo… transformarlos en pequeños animales. Dos moscas no le van a molestar en anda. Tres moscas…<br />-¿Usted vendrá?<br />Ella asintió. Antes de marchar Burgen se acercó a los mariscales y les dijo que iría en una misión junto a Iskander.<br />-¿Es necesario que vaya usted?<br />-Es necesario. Debo matar a una maga, es Emme, creo que escucharon hablar de ella. Ayuden a proteger a la fortaleza.<br />-A sus órdenes.<br />Iskander le dio la misma misión a Milo y a Anya.<br />-Nos vemos al rato.<br />Jesavé activó el sortilegio y tres moscas volaron hacia el campamento orco.<br />En ese momento llegó Lile junto a Zug y a Jazir.<br />-¿Dónde está Iskander?- pregunto Jazir apremiante.<br />-¿Dónde está mi guardaespaldas?- dijo Lile<br />Trenton les explicó el plan y preguntó a Zug cual sería un buen insulto para que los orcos salieran de las montañas.<br />-¿Por qué no vamos con un cañón? Después confiemos en las moscas…<br />-Decidieron que iban a usar las catapultas y les arrojarían banderas de Orogun incendiadas. Se pusieron en marcha y no pasó mucho tiempo hasta que los orcos furiosos comenzaron a armar los cañones y a descender de las montañas montados en criaturas parecidas a dinosaurios. Cuando comenzaron los cañonazos, los caballos se encabritaron y Trenton ordenó la retirada. Aún así había logrado el objetivo, las moscas habían llegado a su destino. Jesavé los volvió a su forma normal, buscaron a Emme pero ella no estaba por ningún lado.<br />-Puedo hacerme pasar por ella- les dijo, y era verdad, eran prácticamente iguales. Jesavé ordenó- ¡Que están haciendo pedazo de inútiles!- les gritó- Los que vuelven son el enemigo ¡aniquílenlos!<br />Los orcos se miraron confundidos y comenzaron a atacar a sus propios compañeros.<br />-La fortaleza es de ustedes.<br />Iskander estaba furioso, Emme se había escapado, pero ahora el paso de Armellas volvía a estar bajo su control. Tendrían que buscar otro paso para cruzar, estaba Nuredum, o Agun, o las madrigueras. Se preguntó por qué habían sido tan estúpidos de no bloquearlas “Ese es problema de Rittardast” su antiguo rey era un idiota.<br />-Lile ¿dónde estás?- le preguntó Iskander.<br />-Mirando como cañonean a los orcos.<br />-¿Podés decirme donde está Emme?<br />-¿Dónde está Emme?<br />-¿A quién le preguntaste?<br />-A Jazir, me lo regalaron.<br />-¿Dónde está tu hermana?<br />-Muy atrás de todo el ejército- le dijo el cadormen.<br />En medio de la confusión Trenton y las tropas de Burgen atacaron a los orcos en retirada e hicieron una masacre.<br />Los orcos comenzaron a irse por el paso, Emme ya había ordenado la retirada.<br />-Vamos a buscarla- le dijo Iskander a Jesavé.<br />-Tranquilo, lo de hoy fue un golpe de suerte. Ganamos solo una batalla, no la guerra.<br />-Ahora nosotros deberíamos contraatacar. Nosotros no vamos a salir, pero ellos van a entrar, cuando ellos se muevan nosotros también nos moveremos. Ella es la principal amenaza, necesitaremos su ayuda.<br />-Yo ya estoy cansada de la guerra. No tengo ganas de seguir. La guerra me quitó a mi esposo, a mi hija, a mi gente.<br />-Entonces huya cobardemente y vaya a esconderse a su bosque.<br />-Le recuerdo que usted se ocultó en nuestro bosque. No me moleste más, mate a quien tenga que matar.<br />Jesavé se marchó, pero Burgen tenía una pregunta más:<br />-Puedo hacerle una pregunta ¿de dónde salió esto?- dijo señalando su armadura.<br />-Yo no se la di, fue Amelia.<br />-¿No tiene idea entonces?<br />-No.<br />-Suerte en su camino, que no pierda a nadie más.<br /><br />Nike estaba sobre la muralla cuando escuchó al cadormen. Era evidente que iban por ella. Vio como los fusileros de Josper de Leconte intentaban inútilmente atravesar con sus balas a las sombras una vez más sin hacerles ningún daño.<br />¿Por qué tenía que ser justo ella la heredera a no sé que casa de Garrat? Ni siquiera sabía donde quedaba eso.<br />El único que podía hacerles algo era Goran que con su espada les arrojaba ataques que eran destellos de luz. No eran demasiados más que ellos, pero desde la fortaleza no podían dañarlos. Si seguían esperando así, como mucho aguantarían el paso un día y no podía permitir que eso sucediera. Nike sabía que no podía hacer más que comandar a las tropas desde lejos, sus habilidades no podían hacer nada contra las sombras, como tuvo que sufrirlo en el pueblo de Van. Sabía que solo había una opción. Agarró a Goran de la mano y lo besó como si fuera la última vez.<br />-No te preocupes por mí. Nos vemos a mi vuelta- y en ese instante desapareció de su lado para aparecer frente al general enemigo. Él se sorprendió al verla.<br />-Detengan el ataque a la fortaleza, si lo hacen, me iré con ustedes.<br />El general se arrodilló ante ella, al igual que los demás cadormen que lo seguían. Todos exclamaron un grito de triunfo.<br />-Orion D’zees- se presentó el jefe de los cadormen y le tendió la mano.<br />-Nike Baenre- dijo ella y la tomó.<br />En la fortaleza Goran vio como detenían el ataque y Nike se iba con ellos. Al instante se contactó con Iskander y Burgen.<br /><br />-Hay que saber primero sus movimientos, enviemos un grupo de scouts. Si hay algo que no soporto es la cobardía- ese día Iskander estaba realmente enfadado- Justo huir cuando la mano está a favor nuestro. Burgen, ayudame a buscar.<br />Cuando vieron sobre Agun, los sorprendió el ejército de cadormens a sus puertas, en ese instante escucharon a Goran…<br />-Iskander, Burgen- los contactó desesperado.<br />-Goran ¿Qué está pasando allí?<br />-Se llevaron a Nike.<br />-Calmate- le dijo- ¿ella se fue por propia voluntad?<br />-Si…<br />-Bien, alguien que sí piensa.<br />-Como “bien” ¡es mi mujer y se acaba de ir con el enemigo!<br />-¡Andá a custodiarla entonces! Si yo pude acostarme con la reina, tú también puedes hacerlo.<br />Burgen ya lo sabía, pero Lile lo miró con sorpresa. Todos lo habían escuchado.<br /><br /><br />(1) ¡Qué excusa más vieja y barata! ^^<br />(2) “¿Qué sos, Harry Potter?” XD (Draften dixit).<br />(3) Para más información consultar los archivos de “Haradim, la Guerra del Caos” que aún no termino de escribir :P<br />(4) Y toda la mesa se mató de risa.<br />(5) “Ah! ¿Estabas herido?” (Lile dixit).<br />(6) “Decile que esos orcos amigos suyos están todos borrachos” (Draften dixit)<br />(7) y no faltaron comentarios como “Y bueno, es la vejez” “los años no vienen solos” o “Te juro que es la primera vez que me pasa” XD<br />(8) Sí, ¡saqué unas tiradas de mierda! (y además una la pifié, soy horrible).<br />(9) “¿Tiene que ser de nivel 9? Espero que tu vida lo valga” XD (Gonza dixit).</div>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-26742780002935498102009-01-21T05:40:00.000-08:002009-01-21T05:46:58.370-08:00Fecha 1: 18/01/2008<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3DmNE5-zVGzkvvtq-4ckkS0KpyeOetZnbMmnEl0zdTjraLKwCAFQBkMj7EVMBFDLJ1otdakO4zafxN5GqK6UmaTi2xwJrtruv-EP9_DyRZh4tW4iZdZE8ImHB96i4LjIuhlc2YmWo96N4/s1600-h/haradim001162tu9.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5293743091847444178" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; CURSOR: hand; HEIGHT: 298px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3DmNE5-zVGzkvvtq-4ckkS0KpyeOetZnbMmnEl0zdTjraLKwCAFQBkMj7EVMBFDLJ1otdakO4zafxN5GqK6UmaTi2xwJrtruv-EP9_DyRZh4tW4iZdZE8ImHB96i4LjIuhlc2YmWo96N4/s400/haradim001162tu9.jpg" border="0" /></a><br /><div><strong></strong></div><br /><div><strong></strong></div><br /><div><strong>Haradim II – El regreso de los héroes.</strong><br /><br /><br />Un nuevo amanecer despuntaba en el Paso de Agun, no era la primera vez que los rayos del sol enrojecían el campo de batalla.<br />Iskander estaba al mando de un ejército de cuatro mil enanos dispuesto a no dejar caer la muralla, miró a su derecha, luego a su izquierda y ningún caballero de Haradim lo acompañaba. La brisa que se desató del este peinó sus rubios cabellos y le trajo un recuerdo de su infancia, caminaba por las calles de Lessender de la mano de su padre, un bardo cantaba una canción. Era un canto de honor y gloria relatando una batalla épica en la que los caballeros de Haradim habían sido los protagonistas y vencedores.<br /><em>“¡Papá, papá! Yo quiero ser un caballero de Haradim cuando crezca”.</em> Y ahí estaba él ahora, esperando a un contingente orco que los superaba cincuenta a uno... por la gloria.<br />Nike vio que era inminente la caída de la primera muralla y ordenó la retirada. Había decidido combatir en primera línea en lugar de Thelmos, ahora tenía algo que proteger y no le importaba morir por eso. Cuando vio que los orcos estaban a punto de alcanzarla miró hacia la muralla, allí estaba lo único que deseaba ver antes de morir. Pero en ese momento vio que su tío ordenaba el impacto de una de las catapultas en su dirección y los cuatro orcos que la perseguían se hundieron bajo la gigantesca roca. Vio a Iskander que abría paso y supo que aún viviría un tiempo más.<br />Atrás Burgen estaba impaciente por salir, no podía esperar más, su capitán estaba delante de la segunda muralla y a él lo había dejado relegado junto a la caballería. Alaia la centauro estaba junto a él.<br /><em>“Acá empezó todo… ¿Te das cuenta no?”</em> Él ya había tenido que vivirlo. Esa era su casa.<br />Goran estaba en la muralla junto a Jazir, disparando al grueso del contingente orco mientras el cadormen daba cuenta de los que pasaban, pero en un momento ya fueron demasiados. Vio a lo lejos a Thelmos que tiraba una flecha y dos bandos orcos se separaron y comenzaron a combatir entre sí. La misión suicida había sido un éxito, habían matado a los clérigos de Orogun. Los orcos de Nazur empezaron a empujar a los orcos azules, rojos y negros lejos de la muralla. El caos se apoderó del ejército orco.<br />Iskander enseguida ordenó que abrieran las líneas de defensa y dejó pasar a la caballería, Burgen y Alaia a la cabeza cabalgaron sobre el mar embravecido de orcos. La maniobra de avance y retroceso terminó de alejar al desierto las oleadas orcas. Mientras, los pocos que habían logrado penetrar la fortaleza, eran muertos por los arqueros. Y él océano comenzó a retroceder hacia el Norte.<br /><br />Zug marchó con los orcos de Nazur. Él era un ingeniero y comenzó a escuchar rumores de su gente en el campamento.<br /><em>“¿Cómo nos podemos estar asociando con esta gente?”</em> y Zug recordaba lo despiadados que habían sido los taurans cuando habían combatido contra ellos. Era verdad que todos creían en el mismo dios del desierto que les pedía conquistar las tierras del otro lado de las montañas, pero esto Nazur no lo compartía. En los últimos veinte años, Nazur había pasado de ser una pequeña ciudad a una metrópolis con granjas, habían comenzado a comerciar y se había instalado la primera universidad. Zug había sido uno de los primeros egresados junto al warlord que los dirigía actualmente. Además se habían encontrado ríos bajo tierra por lo que ya no era una necesidad básica para Nazur “ir a conquistar las tierras del oeste”. Y el general al mando le dijo a Zug:<br /><em>“Mayor, evite disparar, iremos en la retaguardia, el warlord no está convencido de seguir esta campaña”.<br /></em>No pasó mucho tiempo hasta que vieron en erupción al volcán de Nazur, que literalmente se estaba tragando a la ciudad. Los diques de la presa que contenía la lava explotaron y muchos orcos retrocedieron para ir en ayuda de sus familias. Un nuevo rumor corrió entre los orcos de Nazur: <em>“¿Y si los hacemos perder? Ellos nos hacen avanzar mientras desprotegemos nuestra ciudad y la destruyen ¡Mayores conmigo!” </em>Todos se presentaron ante el warlord diciéndole que su plan era perder y que iban a permitir al enemigo matar a los clérigos de Orogun. En ese momento vieron venir volando a un dragón que cargaba a dos personas entre sus garras, era Iskander. Todos estaban heridos y fueron a estrellarse directamente en Agun.<br />“Ese es el general de ellos” les informó y la orden siguiente fue<em> “No intenten detener a los que quieran matar a los clérigos de Orogun”.<br /></em>En plena batalla y en el fragor del combate, Zug alcanzó a ver a dos elfos infiltrándose entre los orcos. Uno de ellos lo miró y siguió su camino. Zug como habían acordado hizo como si no hubiera visto nada. Poco tiempo después vio caer la bandera blanca de Orogun. El Caos, sin riendas que lo contuvieran se apoderó de las líneas orcas.<br />Zug observó como la caballería salía de la fortaleza, al frente, un orco sobre un wargo blanco, cargaba junto a los centauros, su armadura brillaba a los primeros rayos del sol que iluminaron el fénix sobre su pecho.<br />Burgen tuvo que maniobrar para detener a Témpano, tal era el nombre que había puesto a su nueva montura, cuando llegó junto a Zug, él estaba sentado sobre su cañón y ambos se miraron a la misma altura. La boca del cañón era más grande que la cabeza del wargo.<br />-Burgen, caballero de Haradim- se presentó.<br />-Zug- obtuvo como única respuesta.<br />-¿Qué se supone que es eso?<br />-Un cañón.<br />-Muy bonito, él es Témpano ¡saluda muchacho!- le dijo palmeándolo sobre el lomo- ¿Qué estás haciendo?<br />-Tomando sol, esperando.<br />-¿Qué harás con el cañón?<br />-Con suerte lo desarmo y lo llevo a casa, si es que queda algo de ella.<br />-Bueno, esa fue mi casa muchos años- le dijo Burgen, de la fortaleza de Agun se veían ascender columnas de humo de las explosiones ocasionadas por las armas de los taurans.<br />La caballería retrocedía y Burgen se apresuró a seguirla, no sin antes invitar a Zug a ir con él. Los orcos de Nazur eran recibidos en la fortaleza. Se escuchó la orden de movimiento y los kyloons comenzaron a avanzar. El general le dio a Zug la orden de desarmar los cañones.<br />-Burgen, hijo de Krugen- se presentó ante el orco que comandaba la escuadra.<br />-Qué interesante- dijo él mirándolo con sorpresa.<br /><br />Cuando la batalla culminaba el heredero al trono de Nazur, que había llegado con el contingente de Lile, se asomó a la muralla. Allí estaban aún Jazir y Goran.<br />-¿Qué paso?- preguntó.<br />-Los kyloons de Nazur despliegan banderas blancas- le respondió el cadormen.<br />Y efectivamente el príncipe vio como el ejército de Nazur ingresaba a la fortaleza secundado por los centauros de Gaia.<br />Era momento de atender a los heridos, y de purgar todos los despojos de la guerra, se apilaron armas por un lado y cadáveres por el otro, tantas vidas perdidas.<br />Los generales llegaron a la ciudad y fueron recibidos respetuosamente por Iskander:<br />-Soy Iskander de Lessender, capitán de la orden de Haradim, sean bienvenidos. Tenemos a vuestro príncipe hemos salvado su vida cuando el demonio Broker atacó su ciudad. Lamento que haya quedado dañada.<br />-Son solo piedras, se puede volver a construir. Sepan que cuentan con lo que queda de nuestras fuerzas.<br />Jazir bajó junto al príncipe orco con Iskander. Pasaron algunas horas hasta que decidió ir a hablar con su amigo Goran. En el pasillo vio como su sobrina Nike salía de una habitación y cuando la cruzó ella ni siquiera le dirigió la mirada, su prisa hacía parecer como si la hubiera estado persiguiendo el mismo demonio.<br />Cuando entró lo vio a Goran malherido y con todo el pecho vendado. No tardó en darse cuenta de que su amigo estaba en las malas, aunque parecía reponerse lentamente. Jazir sacó un objeto y se lo mostró a Goran.<br />-¿Sabés qué significa esto?<br />-La respuesta a tu pregunta está al sur. Es una pluma de plata, es la insignia de un grupo de magos que imponían el orden entre Bellizard y Garrat hace mucho tiempo. Esta organización tiene poder más allá del que podemos imaginar. Ellos crearon la magia cuando dejó de existir la esencia.<br />-Esto puede ser la respuesta a lo que está pasando. El tema es saber a quien pertenece. Gracias, mi viejo amigo era todo lo que necesitaba saber- dijo poniéndose de pie.<br />-Y decile a tu sobrina que voy a estar bien.<br />-No me va a hacer caso- Jazir ya sabía lo testaduras que eran las mujeres pertenecientes a su familia.<br /><br />Burgen estaba confundido, luego de que había dicho que era el hijo de Krugen los orcos comenzaron a reverenciarlo y había algunos que comenzaron a seguirlo, custodiándolo, ya el capitán le había entregado la insignia del escuadrón de wargos. Burgen estaba demasiado irritado, él era un caballero de Haradim no un orco de Nazur, y mucho menos, era su padre. Juró que al próximo orco que le hiciera una reverencia iba a recibir un golpe.<br />-Sé lo que significó mi padre para los humanos, pero me gustaría saber que significó para ustedes los orcos.<br />-Hace quince años a Nazur llegó un hombre que nos mostró muchas cosas, nos abrió la cabeza, nos enseñó. Gracias a él tenemos una universidad y ya no vivimos en chozas. Él fue uno de los primeros egresados de la universidad y la ingeniería orca es una muestra de que somos una raza similar a los humanos, solo nos queda abolir esa religión de la “tierra prometida”.<br />-¿Dónde está él ahora?<br />-Hace dos años que partió al desierto, y no supimos nada más de él.<br /><br />A la fortaleza se acercaban las legiones del rey Goradim que llegaba, tarde, pero llegaba. A las puertas de la fortaleza lo recibió el líder de a resistencia de Agún, el capitán Iskander, con una reverencia que podría haberse considerado un insulto. A su vez desde Rittardast llegaba el ejército de la reina Amelia, junto a ella cabalgaba Aiko la reina de Haradim.<br />-Capitán Iskander ¿qué pasó?- El rey vestido con su armadura dorada deslumbrante bajó de su caballo y esperó que sus sirvientes dispusieran su trono.<br />-Los enemigos no pudieron pasar, buena planificación anterior.<br />-Anóteme condecorar a los héroes de esta batalla- le pidió a su asistente- Veo que tienen prisioneros…<br />-Aquí no hay prisioneros.<br />Iskander narró el papel que habían cumplido los orcos en la batalla y además le informó quien era en realidad Broker y cómo había terminado:<br />-Eneas alberga demonios bajo su hombro, casualmente Broker era un inquisidor de St. Gernaut- El rey miró a Eneas de una forma que él mismo no esperaba. Jazir estaba cerca ante cualquier eventualidad, se había colocado estratégicamente detrás del sumo sacerdote de St. Cuthbert.<br /><br />Nike buscó a Lile desesperadamente, Goran se estaba muriendo y había envejecido. Ella tenía la esperanza de que su amiga pudiera ayudarlo. Cuando la encontró Lile estaba acurrucada en el suelo, llorando. Nike se arrodilló junto a ella y la abrazó, le acarició el pelo e intentó consolarla. Se sintió la persona más egoísta del mundo, pero no había pensado en nadie más que en él.<br />Escucharon el cuerno que clamaba la llegada del rey, y Lile dijo que iría a hablar con Eneas.<br />-Lile, por favor, necesito que ayudes a Goran- y su voz fue casi un susurro.<br />-No te preocupes, yo voy a encargarme de él. Ahora vamos.<br />Cuando estaban por marcharse a Nike le llamó la atención que Leconte se reunía a los recién llegados a las puertas de la fortaleza. Desde la altura donde se encontraba logró distinguir como un fusilero de Josper le entregaba un royo de papel, él lo desenrolló y observó su contenido, al terminar de leerlo dio instrucciones mediante una señal y siguió al contingente. Nike decidió que iba a seguir a Leconte, sin que nadie la viera.<br /><br />El rey se instaló en su trono y esperó la llegada de su esposa, el primero en entrar a la sala fue el pequeño Daisuke, que corrió hacia Iskander y se abrazó a su pierna. El rey miró con odio a su capitán. La reina cruzó las puertas y Jazir distinguió como lentamente tomó el katar, oculto a su espalda. Cuando el rey creyó que iba a saludarlo ella le clavó el arma en el estómago. La sangre bañó sus pies y el suelo escarlata recibió sus restos. El rey había muerto. Todo pasó muy rápido entonces. La reina levantó en brazos a Daisuke y dijo:<br />-¡Arrodíllense ante el nuevo rey de Haradim!<br />Iskander fue el primero en plantar su rodilla en tierra y varios más lo siguieron.<br />Leconte irrumpió en la sala, los fusileros de Josper rodearon a la reina y le apuntaron. A su lado Iskander había logrado romper el círculo y Jazir había tomado por el cuello a Eneas y lo había utilizado de escudo para entrar al círculo con ellos.<br />Nike que había entrado detrás de Leconte se preparó para matarlo ante cualquier movimiento sospechoso.<br />-Su alteza, queda detenida por alta traición.<br />-¿Bajo qué cargos?<br />La respuesta a esa pregunta era obvia, todos lo habían visto. El general Leconte respondía ahora al nuevo regente de Imerion y sus órdenes eran llevar a la reina a la capital para que fuera juzgada, pero se olvidó de un detalle, Iskander no iba a permitirlo.<br />-¡Preparen el escuadrón!- gritó y Burgen que escuchó su llamado le pidió a Milo y a Alaia que lo hicieran. ¿Él seguía siendo un caballero de Haradim ahora? ¿Qué era sino? Esa pregunta dominaba su mente.<br />-No hay nada que discutir- clamó Iskander- el rey ha muerto, tenemos un nuevo rey.<br />-General Leconte, esto se puede solucionar de otra manera- sugirió el maestro Davon.<br />-Aquí tenemos una confesión de puño y letra de la reina Aiko, en la misma dice claramente que iba a matar al rey.<br />-A ver… muéstreme eso.<br />Leconte le entregó el royo e Iskander lo rompió en varios pedazos.<br />-No hay evidencia- concluyó.<br />Ahora Leconte pertenecía al bando de Sviden, no había mayores dudas. Lo habían ascendido de cargo y su primera orden había sido detener a la reina Aiko.<br />-Podés soltarme- le dijo Eneas a Jazir.<br />Burgen ya estaba en la puerta junto al escuadrón y los fusileros no tuvieron más remedio que bajar las armas. En ese momento Jazir soltó a Eneas.<br />-Ahora tenemos el problema del Norte- le dijo Iskander al elfo- espero que no estés del lado de Broker.<br />-Ahora que estamos todos más tranquilos… creo que es momento para que alguien de una explicación- dijo Jazir y le mostró la pluma de plata a Davon y a Eneas.<br />-¿Podemos ir a la sala del consejo? ¿A una habitación con un mapa?- el que habló fue Torin el enano y su practicidad enseguida se contagió al resto.<br />En la sala se encontraban Iskander, Burgen, Zug y el príncipe orco, la reina Amelia, Davon, Eneas, Torin, Leconte, Jazir, Goran, Lile y Nike que apareció de repente atrás de su tío Jazir.<br />-Ahora ¿con qué contamos?- preguntó Torin.<br />-Con lo que quedó de la batalla- le respondió Iskander y le enumeró las fuerzas de las que disponían.<br />-Y hay una opción más, Eglas- dijo Jazir.<br />Emme había cruzado el paso de Armellas, habían visto fuego en el Norte, y sabían que estaba cruzando el ejército hacia Rittardast, El enano Torin propuso crear una pared contra las montañas y encerrarlos con la caballería pero para eso…<br />-Hay que volar el paso de Armellas, no podemos esperar a Eglas, no sabemos si vamos a poder contar con él- la que habló fue Nike.<br />-¿Estás bien?- le preguntó a su marido. Los demás siguieron hablando pero no le importó.<br />-Más o menos- le respondió él.<br />Además había que cubrir Nuredum, allí también había un paso más. Iskander le preguntó a Jazir:<br />-Qué garantiza que Emme no vuelva a abrir el paso ¿ella podría volver a desbloquarlo con sus poderes?- dijo mirando al cadormen.<br />-Shezari no dejaría nada librado al azar.<br />Para llegar a Rittardast con la caballería se necesitarían dos días y había que ganar tiempo.<br />-La niña podría llevarlos.<br />Zug mientras dibujaba un plano y dijo que él podía crear algún artefacto móvil que permitiera volar el paso y se ofreció a ir. Jazir también iría, después de todo Emme era su hermana. Zug llevaría a dos orcos más para que lo asistieran a instalar los artilugios.<br />-¿Vos que vas a hacer?- le preguntó Iskander a Nike.<br />-Ella no va a ir.<br />-Yo todavía no decidí que voy a hacer- le respondió enfadada. Pero eso no era verdad, ella ya sabía que con Goran en ese estado no iba a ir a ninguna parte.<br />Según el enano Torin, ellos eran tres por cada uno de los hombres de Haradim. Estaban en desventaja numérica, nada que ya no hubieran tenido que vivir.<br />-Lile ¿los llevarías al paso?- le preguntó Nike.<br />-Quiero saber quién soy y por qué peleo- le dijo la niña.<br />-Hay que volar el paso para defender a los inocentes que se encuentran en Rittardast.<br />-Los voy a llevar, pero solo puedo llevar a seis, incluyéndome.<br />Entonces ya estaba todo decidido, Jazir iría al Norte con Zug, Thelmos y dos orcos ingenieros que los asistirían. Era muy peligroso, pero había que intentarlo. Iskander iría con la caballería junto a la reina Amelia.<br />-Hay algo que tenés que saber…- le dijo Jazir a su sobrina.<br />Ella lo miró y le dirigió toda su atención. El tono de su voz hacía prever que era importante.<br />-Nuestra familia está emparentada con una casa de Garrat. Los cadormen del sur saben que Shezari y vos son las herederas a ese lugar- luego miró al resto- si Shezari muere, ella será la heredera.<br />Nike se quedó perpleja ¿heredera a una casa de Garrat? ¿Qué significaba eso? Su tío tenía demasiados secretos, pero no parecía querer compartirlos con ella. Ya se había acostumbrado a que todos le ocultaran información, en especial los miembros de su familia. Sabía que si las cosas hubieran sido de otro modo ella hubiera estado ocupando el lugar de Thelmos, matar a Emme era uno de sus objetivos, pero no era su prioridad. No iba a dejar solo a Goran para saciar su sed de venganza. Ya llegaría el momento en que volvieran a estar frente a frente.<br />En el sur esperaban cuatro legiones de Garrat según los informes que había traído Davon.<br />-¿Dónde están asentadas las legiones?- preguntó Iskander.<br />-En Imerion, Josper y Elgart- le respondió el maestro. Pero Iskander pensó que debían solucionar un problema por vez. Luego Jazir sacó una vez más la pluma de plata y la colocó sobre la mesa, encima del mapa. Los miró a Davon y a Eneas.<br />-Sería bueno que algunos dieran una explicación.<br />Fue Goran el que tomó la palabra y les explicó exactamente lo mismo que a su amigo Jazir agregando que los métodos que utilizaba esta orden no eran del todo “sanctos”<br />-¿Quién te dio eso?- le preguntó Nike a su tío.<br />-Shezari- Él jamás la llamaba Emme- deberíamos averiguar a quién pertenece.<br />-¿Puedo quedarme con ella?- le preguntó Goran y se la guardó ante la afirmación de Jazir.<br />El Consejo llegó a su fin, todos sabían cual sería su camino y se despidieron. Lile se dirigió hacia una de las torres junto a los que transportaría al Paso de Armellas, les dijo que ella los llevaría y luego iría a buscar a su tío Eglas, una vez que escuchara la explosión volvería a buscarlos. Jazir se despidió de todos, pero no logró juntar coraje para despedirse de su sobrina, o temió que ella hiciera preguntas que no estaba dispuesto a responder, por el momento.<br />-Espero volver a verte, necesitamos a gente como tú en el futuro- le dijo Goran.<br />-Eso si logro que haya algún futuro- le respondió- Protege a Nike- y le dejó un sobre para ella.<br />Iskander preparó a la caballería y cuando estuvieron listos para partir lo vio a Burgen esperando junto a la tumba de su madre. Cuando él fue a dejar el casco Iskander le dijo que a su madre no le hubiera gustado que lo dejara. Burgen se levantó y siguió a su capitán. Iskander se llevó uno de los caballos del establo, uno de los que Burgen mismo había criado. El orco vio que a la entrada de la fortaleza lo esperaba su escuadrón de wargos.<br />-No los voy a poder nombrar a todos caballeros, no tengo tanto poder- le dijo Iskander sonriendo.<br />-No, pero podés armar tu propia orden- le dijo Milo.<br />La última noticia que obtuvieron fue que Leconte iba a escoltar a Davon y a Eneas hacia Imerion para que estuvieran a salvo, la reina Aiko permanecería en la fortaleza de Agún.<br />Goran estaba mirando sobre la muralla los preparativos de la caballería, a su lado estaba Nike. Un rayo de luz azulada iluminó el cielo, ya el sol se ocultaba en el horizonte. Lile había transportado con éxito a los encargados de la misión. A Nike le hubiera gustado acompañar a su tío pero su lugar estaba allí. Goran le dijo que iría al Lago de Cyro, tenía que hablar con Davon, no se ausentaría más de un día. Ella lo miró incrédula:<br />-Vos no vas solo a ninguna parte- le dijo terminante.<br />-Son solo algunos kilómetros, mañana voy a estar nuevamente en la fortaleza. Quedate protegiendo a la reina.<br />Parecía que Goran no entendía que ella no iba a dejarlo ir fueran los kilómetros que fueran.<br />-No voy a dejar que vayas solo.<br />Ya lo había dejado solo una vez y el resultado había sido arrepentirse los siguientes quince años de su vida. No lo iba a hacer una vez más.<br />-Voy a estar bien, además acá vas a estar a salvo.<br />-No me preocupo por mí.<br />-¿Querés venir conmigo?<br />-Sí- le respondió como si le estuviera preguntando algo obvio.<br />-Entonces vamos- fue su respuesta.<br />Nike abrió la carta de su tío, era básicamente una despedida.<br /><em>“Disculpame por no haberme despedido personalmente, te pido que por favor confíes en mí Nike, Shezari no es lo que todos creen.”</em> Ella confiaba en él, en la que no confiaba era en su hermana. Lo que había sufrido, pero más aún, lo que había sufrido Goran por su culpa, eso no iba a perdonárselo nunca. </div>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-83904849740971862812009-01-14T04:32:00.001-08:002009-01-14T04:32:22.027-08:00PlotEl ya pequeño ejército de Agún perdió varios soldados en la defensa del Paso. Ahora solo unos pocos tienen en sus manos el destino de Haradim. ¿Su pueblo será sometido por los invasores? ¿Lograrán seguir siendo un pueblo libre? Por el norte un ejército a las órdenes de Emme, la heredera de la casa Baenre, solo quiere destruir todo a su paso para sofocar su ira luego de que mataran a su amante, y Armellas sintió su furia. Por el sur una nueva amenaza, el ejército de Garrat listo para añadir un trozo más del mundo a su Imperio ¿Estarán los hijos de los dragones a favor de fulminar toda resistencia? ¿Recibirán ayuda nuestros amigos o serán ellos solos el último bastión? ¿Qué papel cumplirán los orcos a partir de ahora? ¿Se unirán para enfrentar al enemigo común? Y lo más importante: ¿Quién tomará ahora el poder en Haradim ahora que Goradim fue asesinado a manos de su propia esposa? Todas estas respuestas próximamente en Haradim II - El regreso de los héroes.Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-83796617801758395782009-01-12T15:26:00.001-08:002009-01-12T15:26:41.544-08:00Teaser II<hr /> <span id="postmessage_4854"><div style="text-align: center;">*****<br /><br />La batalla en el paso de Agún solo fue el principio...<br /><br />Una gran batalla se avecina...<br /><br />Los orcos, a las órdenes de Emme, invaden Haradim por el Norte,<br /><br />por el sur los cadormen de Athos se preparan para asistir a Garrat en su conquista mundial...<br /><br />¿Podrá Haradim resistir estas fuerzas y seguir siendo un reino libre?<br /><br /><br />Haradim II - El regreso de héroes<br /><br />Estreno<br /><br /><span style="font-weight: bold;">18/01/2009</span><br /><br />*****</div></span>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-617210032520368926.post-41930587208146647292008-12-11T10:30:00.001-08:002008-12-11T10:31:43.195-08:00Teaser<div align="center">****<br /><br /><em>Si creíste que lo habías visto todo...<br /><br />Si creíste que tu personaje no podía sufrir más...<br /><br />Preparate...<br /><br />Porque en Enero se vienen...<br /><br />Nuevos personajes...<br /><br />Nuevas intrigas...<br /><br />Nuevos conflictos...<br /><br />Nuevas batallas épicas...<br /><br />...y los mismos héroes intentando defender su mundo.<br /><br /><br /><strong>Haradim 2: "El Regreso de los Héroes"</strong><br /><br /><br /><br />Próximamente en tu club de rol amigo.<br /><br /><br /><strong>Enero 2009<br /></strong></em><br />*** </div>Helcawenhttp://www.blogger.com/profile/00339604129253436410noreply@blogger.com0